Ahora que muchos estamos trabajando desde casa, el jefe de renta variable europea de Aberdeen Standard Investments, Ben Ritchie, ha querido compartir en esta charla cómo ha cambiado el confinamiento su rutina laboral y personal. Desde Londres, da algunas ideas y consejos para lidiar con esta coyuntura desde el sector financiero.
¿Qué le está pareciendo trabajar desde casa?
Hemos tenido que ir ajustándonos a la situación, pero, en general, está yendo muy bien. Siempre hemos trabajado con el equipo dividido entre Edimburgo y Londres, así que estábamos acostumbrados a las videollamadas. Además, antes del confinamiento, estábamos avanzando hacia rutinas de trabajo más ágiles y con más herramientas que nos permitieran llevar a cabo las tareas a distancia, así que ya habíamos recorrido buena parte del camino. Sin lugar a dudas, hay espacio para la mejora en el campo tecnológico, pero toda la empresa tiene capacidad para trabajar en remoto. Esta situación ha contribuido a demostrar la efectividad del teletrabajo y eso es algo positivo.
¿Cómo cambia el teletrabajo su rutina?
Creo que es mucho más fluida y flexible. Antes, necesitaba media hora para desplazarme y estar en la oficina a las 07:00. Ahora, comparto ese tiempo con mis dos hijos, que tienen tres y seis años. Así que la primera hora del día es para que mi mujer y yo desayunemos con los niños. Es bastante diferente. Sobre las 08:00 estoy en mi despacho. El resto del día, no es solo puro trabajo: la nueva situación implica hacer malabares con los aspectos familiares y del hogar mientras sigo trabajando, atendiendo reuniones y llamadas. Esto supone que los horarios se flexibilizan y quizás nos toque trabajar hasta algo más tarde. La flexibilidad no significa que trabaje menos, sino que las jornadas se alargan más de lo habitual.
¿Le gusta esta nueva dinámica laboral?
Como todo, tiene sus ventajas e inconvenientes. Antes, cuando viajaba, a veces no veía a mi mujer y a mis hijos en una semana. Ahora están conmigo todo el día. Eso es obviamente algo estupendo, aunque conlleve sus propios retos.
¿Cómo mantiene el contacto con las empresas de su cartera?
La interacción es tan elevada como antes de la crisis. Siempre hemos dado mucha importancia a tener acceso a las empresas y a las reuniones presenciales, pero, sin la posibilidad de viajar ni la necesidad de tener que hacer malabarismos con las agendas, es más fácil que nunca organizar una reunión en vídeo o una llamada. Les pasa también a las propias empresas: están más dispuestas a estar en contacto para mantenernos al día sobre sus planes y estrategias. Hasta cierto punto, se trata de algo que hacen para controlar la situación, pero también es parte del diálogo continuo que hemos fomentado a lo largo de los años. Ciertamente, son ventajas que sacamos de esta situación.
¿Cree que puede cambiar la forma de trabajar del futuro?
Creo que la lección principal es cómo pensamos sobre nuestro tiempo. Como empresa, nos estamos moviendo hacia una mayor flexibilidad en nuestras rutinas y creo que eso es una tendencia que se acelerará. La vieja mentalidad de «el primero en llegar y el último en salir» y de tener reuniones presenciales todo el tiempo es una tendencia que estaba en declive incluso antes del confinamiento y creo que ya forma parte del pasado. Además, y no creo que sea el único en pensar esto, los días llenos de reuniones interminables son ya historia.
Vivimos momentos que pueden ser estresantes, ¿cómo desconecta?
Sinceramente, creo que es difícil desconectar, dada la incertidumbre que nos rodea. Sin embargo, intento salir a hacer ejercicio, ya sea a correr o a caminar. Esto último me da una buena oportunidad para reflexionar y aclarar mi cabeza; para poner en orden mis pensamientos. También significa que puedo ponerme al día con las llamadas de mis compañeros.
Cambiando de tema, ¿puede recomendar un libro, una serie y una canción que le ayude a pasar este tiempo?
Acabo de terminar de leer la biografía de Stephen Schwarzman “What it Takes”. Es una guía interesante y fácil de leer sobre cómo Blackstone se convirtió en una de las compañías de servicios financieros más importantes del mundo. En cuanto a series, he terminado la segunda temporada de Succession, que me ha resultado muy interesante. Otro de los beneficios de trabajar desde casa es que me ha permitido volver a disfrutar de canciones que tenía olvidadas: he estado escuchando mucho Blink 182, y me alegra decir que sigue siendo un pop californiano algo meloso, ¡pero estupendo!
Por último, ¿algún consejo para los compañeros de la industria?
Creo que es importante mantener la confianza en lo que haces y ser estructurado. Son tiempos sin precedentes, pero, en cierto sentido, el futuro siempre ha sido incierto, así que es importante tener un plan de ruta y atenerse a él. Mi segundo consejo sería: confía en tus compañeros. Como empresa, tenemos muchos profesionales con talento y dedicación con nosotros. Durante el confinamiento, la respuesta de todos está siendo increíble y me ha impresionado cómo todo el mundo se ha adaptado rápidamente y ha continuado con su trabajo. Creo que, al final, eso nos ayudará a ser mejores profesionales, lo que redundará en una mejora del sector.