Se acerca el Día de la Mujer y qué mejor forma de celebrando que escuchando la voz de ocho autoras en defensa de ocho causas. Descubre cuáles son sus consejos, valores e ideas para un mundo más diverso con esta lista que recomienda LID Editorial.
Humanizar la empresa
“Es ahora, en el momento de mayor tecnificación de la historia, cuando el toque humano es el que marca realmente la diferencia en la empresa”, defiende Pilar Bringas, autora de Marketing no es (solo) publicidad.
Humanizarla, convertirla en “compañera”, significa ser más transparentes y honestos con nuestros clientes, con nuestros colaboradores y con todo el ecosistema que nos rodea. Si queremos humanizar la empresa tenemos que hacerla valiente, mostrar nuestras fortalezas y reconocer nuestras debilidades.
Hacer valer a las personas y perseguir la diversidad en el talento que forma parte de nuestra organización; escuchar, entender y colaborar con nuestros clientes. Humanizar la empresa es la parte principal del camino para resultar verdaderamente diferenciales, relevantes y sostenibles.
Una sociedad constructiva e inclusiva
“La comunicación constructiva y respetuosa en la educación y en las organizaciones impulsa el desarrollo de las personas y de la sociedad”, asegura Noemí Vico, coautora de Smart feedback.
Promover la comunicación y el feedback desde un enfoque respetuoso, diverso, empoderador y constructivo a todos los niveles (familia, educación, organizaciones) fomentar el aprendizaje constante, desarrollar el talento y generar mejores relaciones será la semilla para el cambio en la sociedad presente y futura.
Visibilizar el talento femenino sénior
“Los hombres maduran, las mujeres envejecen. ¿Cómo es posible que el cumplir años reste, en vez de sumar?”, reflexiona Raquel Roca, autora de Silver surfers y Knowmads.
Hay una realidad social llamada edadismo (discriminación por cuestión de edad) que genera exclusión, baja autoestima y empeora la salud de quien lo sufre, y que es especialmente lacerante con las mujeres, que además de discriminación laboral sufren una “devaluación” por la edad. ¿Por qué invisibilizamos e incluso bloqueamos algo tan valioso como los años o la experiencia?
La demografía longeva de sociedades envejecidas nos obligará a cambiar estas reglas penalizadoras. El futuro empresarial necesitará un clima corporativo age friendly, sensible al cambio demográfico, a la nueva longevidad laboral, con especial atención al talento sénior y extrayendo el poder de la mezcla intergeneracional.
Liderazgo trascendente
“El liderazgo se diferencia por la misión, no por el estilo. Apostemos por un liderazgo trascendente, ese que facilita el desarrollo de nuevos líderes”, invita Jane Rodríguez del Tronco, coautora de Smart feedback.
El líder trascendente va más allá de alcanzar los objetivos, de transformar la realidad y facilitar el desarrollo de sus colaboradores. Es un líder al que le mueve un propósito mucho mayor: la misión y, por tanto, el compromiso de crear nuevos líderes, dejando su legado para que este mundo cuente con equipos y organizaciones donde las personas y el desarrollo del talento sean el verdadero centro. Es un líder que no tiene pudor en mostrarse vulnerable, al que le distinguen su actitud de servicio y las habilidades de un coach, y que hace de la conversación y el feedback sus principales herramientas.
El líder tradicional se ha centrado en la consecución de objetivos. El transformador daba un paso más allá, y se comprometía además con el futuro, cuestionando el status quo y asumiendo un rol más creativo tanto en la dimensión de los proyectos, como de las personas. El que marca la diferencia, el que deja una verdadera huella, es el que además encarna la misión de trascender su liderazgo, comprometiéndose con la labor de desarrollar a nuevos líderes, involucrándose desde su autenticidad y de manera integral con el otro.
Sanar el alma
“La capacidad de poder sanar está en la oportunidad que tenemos las personas para poder conversar acerca de nuestras heridas, y así poder generar un nuevo relato”, define Silvia Guarnieri, coordinadora de Distinciones de coaching y coautora de No es lo mismo.
Cuando hablamos de curar una herida o una enfermedad, decimos que la medicina, los apósitos, las tiritas curan. Sin embargo, cuando decimos “sanar”, nos referimos a otra cosa bien diferente. Hablamos de sanar el alma, un alma herida que merece la pena prestarle toda nuestra atención. La palabra no cura, pero sí sana.
Bienestar laboral
“Somos responsables de resignificar el mundo del trabajo y generar entornos garantes de bienestar organizacional. Ya no hay excusas, en el centro de la estrategia han de estar las personas felices”, insiste Rosa Rodríguez del Tronco, coautora de Smart feedback.
Facilitar y generar entornos de bienestar corporativo permite que las personas florezcan y prosperen. Escuchando, empatizando y trabajando la inteligencia emocional, el liderazgo, la comunicación y la confianza podremos desarrollar empresas a las cuales las personas quieran pertenecer. Solo así, las organizaciones contribuirán a lograr una sociedad más sana y feliz siendo básico para la mejora de la salud mental, física y social que en estos momentos se torna tan necesaria.
Diversidad, inclusión y desarrollo
“La naturaleza de la humanidad es la diversidad de mujeres y hombres que juntos generan innovación y desarrollo sostenible en empresas y organizaciones”, reflexiona Myrtha Casanova, autora de El poder de la diferencia.
En solo los últimos 100 años la humanidad ha pasado de ir a caballo a explorar Marte. No es por casualidad. Es que en penas cuatro generaciones la mujer ha logrado entrar a participar plenamente de forma decisiva en el mundo empresarial, económico, tecnológico y político: como nunca en los 10M años de historia había sucedido.
Desde 1995 hay más mujeres que hombres universitarias en la Unión Europea cuya presidencia hoy la ostenta una mujer, Ursula von der Leyen; Susan Wojcicki es CEO de YouTube; Fabiola Gianotti dirige el principal centro de física de partículas del mundo; Kristalina Gueorguieva es directora del FM.
La actual evolución de la humanidad es el resultado de la inclusión y puesta en valor tanto de las diversidades demográficas (etnia, edad, discapacidad, orientación sexual) como las culturales (idioma, creencia, educación, familia, competencias, habilidades) de las mujeres, que sumadas a las de los hombres genera la imprescindible innovación que garantiza la sostenibilidad de las organizaciones en los presentes y futuros escenarios en profunda transformación continua.
Emprendimiento femenino
“Decídete a emprender; hazte cargo de tu negocio y serás la dueña de tu tiempo, de tu dinero y tomarás las riendas de tu vida”, anima Alicia García Esteban, autora de Triunfa en el marketing multinivel.
Para las mujeres emprender es una puerta abierta a ser independientes económicamente y no depender de una pareja, de la familia, de una empresa, o del estado. Muchas mujeres han puesto su talento femenino al servicio de la venta directa y el marketing multinivel porque es una gran oportunidad y tienen muchas ventajas; inversión inicial mínima, ser tu propio jefe, flexibilidad de horarios por lo que conciliar con la familia es una realidad, recompensas, estatus, formación, reconocimiento, autorrealización, no tiene techo y sí un potencial ilimitado.
Diferentes perfiles de mujeres y de todas las edades triunfan en este modelo de negocio, porque las mujeres tenemos un enorme poder de atracción, sabiendo como relacionarnos y tratar a las persona, cualidades innatas como el compartir, enseñar, cuidar y habilidades como la empatía, la sororidad, la persistencia y el compromiso, son excelentes para poner las bases de un negocio como La Venta Directa y el Marketing Multinivel, donde los objetivos los marcas tu y está abierto a cualquier mujer sin experiencia ni capital que quiera emprender y tengas de aprender y ganas de ganar.