María Dolores Dancausa, consejera delegada de Bankinter, ha sido elegida como la séptima mejor ejecutiva por la revista Forbes en su ranking de los 50 mejores CEOs de las empresas que cotizan en España. Además, se trata de la única mujer en la lista.
“Inevitablemente, llama la atención un año más no solo que haya una CEO, María Dolores Dancausa, entre los diez primeros, sino que sea la única mujer de los 50 nombres que aparecen en el ranking”, señala la publicación. Esta lista solo incluye a los consejeros delegados de las compañías, no a otros primeros ejecutivos.
Además, el sector financiero ha sido uno de los campos con mayor presencia en el ranking. “Bankinter se encuentra, junto con otra entidad española, entre los bancos más rentables de Europa”, destaca la revista. Dancausa entró por primera vez en el ranking en 2013 y, desde entonces, se ha mantenido en la lista.
Forbes elabora este ranking a través de un proceso de cuatro fases. Primero, es necesario que la empresa cotice en España y que su CEO haya aportado una rentabilidad para el accionista superior tanto a la media de las cotizadas como al promedio de entidades de su sector que cotizan.
En segundo lugar, el jurado -compuesto por representantes de bancos de inversión, gestoras, headhunters, consultoras y escuelas de negocio- tiene en cuenta, principalmente, la transformación digital en las empresas, el liderazgo, la atracción del talento, la gestión y la capacidad estratégica.
Una vez resuelto el voto, que constituye la tercera etapa del procedimiento, se pasa a la cuarta fase del proceso: que la gestión de la empresa o la entidad esté alineada con valores que promueve la publicación, como la innovación, la defensa de la libertad de empresa o el liderazgo.
La Fundación Mapfre ha enviado a Ecuador los primeros respiradores creados en España por un grupo de jóvenes ingenieros y ampliará el acceso a estos equipos a otros cuatro países más, entre ellos Guatemala, gracias al gran avance en las conversaciones que se están produciendo estos días con las autoridades competentes. El objetivo es permitir que estos dispositivos, con capacidad para producirse a escala, lleguen cuanto antes donde más falta hacen y ayuden al personal sanitario a salvar vidas.
Los equipos, que utilizan piezas certificadas y probadas, y que tienen características similares a los actuales dispositivos comerciales, se podrán producir industrialmente tras completar con éxito los ensayos clínicos y disponer de la verificación correspondiente por parte de los países a los que lleguen.
La entidad tiene previsto invertir en este proyecto algo más de un millón de euros y donar, a los países que lo validen, alrededor de 500 respiradores, que han empezado a fabricarse en la empresa FABREZ Group, situada en Madrid.
De producción rápida y bajo coste
La principal diferencia respecto a otros respiradores validados por el Laboratorio Central Oficial de Electrotecnia (LCOE) es su facilidad de montaje y la utilización de piezas ya verificadas, lo que convierte en un dispositivo sólido y a un coste muy competitivo, entre cuatro y cinco veces más barato que uno comercial.
También cuentan con las especificaciones sanitarias correspondientes para garantizar así la seguridad de intubación y son capaces de regular todo tipo de parámetros y necesidades del paciente, como la frecuencia respiratoria, la presión y volumen y humedad del aire. Los equipos cumplen con los exigentes requisitos solicitados por la Agencia Española del Medicamento para poder ser usados en personas dentro de una investigación clínica y mientras dure la pandemia.
Innovación social española
Los respiradores han sido ideados y creados por Javier González, Ingeniero de Materiales por la Universidad Rey Juan Carlos, y Javier Asensio, médico del hospital madrileño 12 de Octubre, quienes, junto a un grupo de ingenieros, médicos, informáticos y científicos, se unieron el pasado mes de marzo para poner en marcha la asociación española sin ánimo de lucro The Open Ventilator y desarrollaron en tiempo record un prototipo de ventilador completamente funcional.
“El desarrollo de este respirador, que ha sido posible en menos de tres semanas, ha requerido un ingente esfuerzo de I+D del que todo el equipo de The Open Ventilator nos sentimos muy orgullosos. No se trata de un ventilador portátil de ambulancia o de campaña para hacer frente a las urgencias provocadas por la COVID-19, sino de un respirador funcional, robusto y fiable, con todos los parámetros médicos necesarios para dar tranquilidad en su uso a los especialistas médicos y salvar vidas”, ha subrayado Javier González, líder del proyecto, junto con Javier Asensio.
“Estamos muy satisfechos de haber participado en este gran proyecto, que sin duda pone en valor la importancia de la innovación social, con la que estamos totalmente comprometidos, y el enorme talento de un equipo de jóvenes investigadores españoles, que con su esfuerzo van a contribuir a salvar muchas vidas en todo el mundo”, ha destacado Julio Domingo, director general de Fundación Mapfre.
Listo para funcionar
De los prototipos presentados a la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios, The Open Ventilator es uno de los primeros proyectos españoles que durante esta situación de emergencia ha recibido la conformidad por parte del Laboratorio Central Oficial de Electrotecnia (LCOE) y la autorización de la Agencia Española del Medicamento para su ensayo en pacientes en el Hospital Universitario de Alcorcón (Madrid).
El equipo, que intentará obtener el marcado CE una vez se supere la pandemia, ha contado con el apoyo y la colaboración de la red de talento joven Celera, la Universidad Rey Juan Carlos, la Comunidad de Madrid, y un amplio grupo de empresas, entre las que se encuentran Airbus, RENFEy la multinacional japonesa OMRON.
Allianz Global Investors ha otorgado el premio del concurso internacional de ilustración Art On Climate al artista colombiano Luis Guarín Molina. Art On Climate es un concurso diseñado para ayudar a crear conciencia sobre la importancia del cambio climático y la necesidad de encontrar soluciones que puedan contribuir a alcanzar un futuro más sostenible.
El concurso Art On Climate es una iniciativa de Allianz Global Investors en España, con el apoyo de Imartgine que ha aportado su experiencia en el ámbito cultural. El concurso fue convocado en 2019 y, desde entonces, 446 artistas de 69 países, incluyendo 155 de España, han contribuido con 920 obras originales. La selección de las obras ha corrido a cargo de un Jurado Calificador, presidido por Beatrix Anton-Groenemeyer, Responsable de Sostenibilidad de Allianz Global Investors, con la participación de Joaquín Garralda, presidente de Spainsif, y de un grupo de expertos de reconocido prestigio en el mundo de la ilustración como Aurora Solano Pérez, Anne Derenne, René León Sánchez y Jean-François Sauré, director de imartgine.com, en calidad de secretario. Además de la obra ganadora, fueron elegidas como finalistas las ilustraciones de Agustín Gagliano (Argentina), Sebastián Govino (Argentina) y Aleksandra Herman (Polonia).
Como gestora activa, Allianz Global Investors busca influir y facilitar el cambio hacia una economía baja en carbono, tanto a través de sus decisiones de inversión como de su comportamiento corporativo. El concurso Art On Climate busca promover, mediante el arte, la reflexión en torno a la necesidad de luchar contra el cambio climático y de impulsar un modelo de desarrollo sostenible.
“En Allianz Global Investors trabajamos para mejorar y aumentar la sostenibilidad de nuestras inversiones, colaborando con empresas para ayudarlas a desarrollar negocios más sostenibles. Creemos en un futuro mejor para todos nosotros y en compartir la responsabilidad de hacerlo realidad. Y esto se conecta con el arte. Encontramos que los artistas tienen una visión muy especial, poco común y única sobre las cosas, el mundo y la sociedad. Tienen la capacidad de aportar una mirada refrescante y, como la mayoría de las obras de arte que participan en este concurso, en su mayoría optimistas, se esfuerzan en promover un mundo mejor”, ha señalado Beatrix Anton-Groenemeyer.
Por su parte, Joaquín Garralda apunta que “en la actual emergencia sanitaria del COVID-19, puede parecer que la pandemia ha quitado relevancia a la preocupación por la ‘emergencia climática’ y que esto seguirá así durante cierto tiempo, aun cuando la situación se normalice. Sin embargo, puede ser un factor que acelere la exigencia social a los líderes políticos para que afronten más coordinadamente los problemas globales. Desde el punto de vista del empleo, la gran preocupación actual, la transición hacia una economía baja en carbono se presenta como una importante fuente de generación de empleo. Por ello no son emergencias que se sustituyen una a la otra, sino que pueden ser muy complementarias. En este sentido, el poder de las imágenes tiene un papel muy relevante y este concurso es una buena muestra de ello. La creatividad y sensibilidad de las imágenes que han concursado hace más difícil no considerar el tema climático con la relevancia y urgencia que se necesita”.
Con el objetivo de compartir cómo los artistas participantes ven y piensan sobre el cambio climático, Allianz Global Investors creará el Museo Virtual “Art On Climate”, donde se podrá disfrutar de una selección de las mejores obras, incluidas las del ganador y los finalistas.
La obra ganadora, del artista colombiano Luis Guarín Molina es un retrato de una mujer en el que su pelo se transforma en una abundante melena de hierba verde salpicada de flores rojas. Sobre ella, el autor comentó: “Con esta obra he querido mostrar que no hay división entre nosotros y la naturaleza, que en realidad estamos mucho más unidos a ella de lo que creemos, y es esta unión la que permitirá que la tierra tenga un mejor futuro. Estoy muy agradecido de haber recibido este premio y de poder contribuir a generar conciencia de la importancia de la sostenibilidad y la conservación de nuestro planeta para futuras generaciones”.
Por su parte, Marisa Aguilar, Directora General para España de Allianz Global Investors, añade: “El arte es una herramienta de comunicación muy poderosa y estamos convencidos de que puede contribuir a amplificar el impacto de la necesaria concienciación sobre el cambio climático. Por ello agradecemos enormemente la participación de tantos artistas en esta iniciativa, y desde Allianz Global Investors nos comprometemos a seguir haciendo esfuerzos por conseguir un crecimiento económico y social más sostenibles, ahora más que nunca».
Ana Poyatoses experta en mindfulness y en comunicación no verbal y tiene una experiencia de más de 20 años en los departamentos de back office de varias entidades financieras.
En un artículo en la revista número 17 de Funds Society España, explica las claves de mindfulness: “¿Qué es mindfulness? Intentar explicar el término es tan fácil como complejo. Sería como intentar definir lo que es comerse una onza de chocolate. Su color, textura y sabor son inseparables de sensaciones, emociones, ideas, sutilezas, detalles o recuerdos que nos evoca el cacao en nuestra boca. Pero por mucho que nos lo cuenten, hasta que no se prueba, ná de ná”.
Mindfulness no es sólo un término que se pueda traducir, sino que es también una actitud y un estilo de vida: “Es una práctica que invitaría a la apertura mental, a abrirse a nuevas vías y posibilidades”, dice. Y se cultiva con práctica, práctica y más práctica.
Tiene muchos beneficios: la práctica de mindfulness implicaría una serie de beneficios científicamente demostrados. Además de una regulación emocional o desarrollar una mayor consciencia interoceptiva, se podría decir que, a través de la práctica de mindfulness, se desarrollarían una serie de habilidades, como un lenguaje positivo, honesto, amable y humilde; una corporalidad digna que invitaría al acercamiento, a la apertura, y al servicio (que no servilismo) o desarrollar una actitud activa y positiva ante la vida.
En este contexto, mindfulness se presentaría como una herramienta que podría mejorar el bienestar de las personas, lo que repercutiría directamente en el entorno y ambiente laboral, siempre y cuando se ofrezca al 100% de las personas que integran las organizaciones.
Cecabank se suma al proyecto #CruzRojaResponde con una donación de más de 55.000 euros que contribuirán a paliar los daños de la crisis del COVID-19. Esta iniciativa, lanzada por Cruz Roja, busca prevenir los riesgos sanitarios y las dificultades sociales derivadas de la crisis sanitaria.
Dentro del marco de su plan de responsabilidad social, el pasado 3 de abril, Cecabank inició una campaña de donaciones entre sus empleados, a los que la entidad ha sumado el doble de lo recaudado. En total, la entidad colaborará con 55.350 euros recaudados entre los empleados, sindicatos y el banco.
La iniciativa #CruzRojaResponde está dirigida a ayudar a colectivos ya de por sí vulnerables, como puede ser el caso de las personas mayores, niños, mujeres en situación de exclusión social, personas con patologías previas, discapacidad, personas sin hogar, o inmigrantes, entre otros. Así, el programa articula diferentes respuestas para resolver problemas derivados en áreas como salud, inclusión social, educación, empleo o medio ambiente. Este se desarrollará a través de la red territorial propia de Cruz Roja y su voluntariado.
“La política de acción social de Cecabank busca tanto el compromiso de los empleados como del propio banco, fomentando en todo momento el orgullo de pertenencia”, aseguran desde el banco. Es el caso, por ejemplo, del programa TÚ ELIGES, que reparte cada año 100.000 euros entre 15 proyectos sociales, culturales y medioambientales elegidos por los empleados.
Además, Cecabank también colabora en emergencias humanitarias de la mano de ACNUR, Cruz Roja, Médicos del Mundo o el Comité de Emergencia. En este aspecto, otra de sus líneas de actuación son el patrocinio del Banco de Alimentos de Madrid, la creación de aulas informáticas para el Real Oratorio de Caballero de Gracia y la Fundación Bobath, donde se da apoyo a los colectivos más desfavorecidos. Además, en colaboración con sus empleados, Cecabank organiza mercadillos solidarios, campañas de recogida de ropa y comida, así como campañas de donación de sangre.
Con el objetivo de mitigar los efectos de la actual pandemia del coronavirus, DWS donará 1 millón de euros a organizaciones sin ánimo de lucro en los países en los que desarrolla sus actividades y que se han visto especialmente afectados por el virus.
Esta donación se destinará a varias organizaciones benéficas nominadas por los empleados de la gestora en todo el mundo. El objetivo de esta donación es garantizar servicios básicos a los grupos sociales en situación de vulnerabilidad, como las personas sin hogar y los niños. Por ejemplo, en Reino Unido y Estados Unidos los fondos se destinarán al proyecto Feeding Britain y Feeding Americas, respectivamente. Asimismo, se realizarán donaciones a la fundación Akshaya Patra de la India, como país afectado significativamente, así como a la organización de ayuda Help Refugees, que también se beneficiarán de estas donaciones.
Además, la gestora está animando a sus empleados a realizar donaciones a estas organizaciones para lograr el mayor efecto posible. Esta medida también marca el lanzamiento de un nuevo programa de RSC en DWS con un compromiso social más amplio.
“Para nosotros es nuestro deber intervenir y apoyar donde podamos y de forma que llegue directamente a los más necesitados, especialmente en estos tiempos. Me complace que nuestros empleados apoyen este compromiso y que podamos mostrar solidaridad juntos”, asegura Asoka Woehrmann, CEO de DWS.
Desde que Muhammad Yunus ganó el Premio Nobel de la Paz en 2006, los microcréditos han crecido en popularidad y alboroto. Con el foco en personas de bajos recursos sin historial crediticio y, por lo tanto, excluidos del sistema financiero, los microcréditos han ganado un lugar importante en la lucha contra la pobreza. Sin embargo, sus condiciones son criticadas a menudo.
¿Acaso estamos en posición de decidir qué es lo mejor para los demás? Indudablemente, los avances tecnológicos de los últimos años suponen una oportunidad jamás imaginada para llegar a lugares más remotos y ofrecer mejores condiciones.
En la revista número 17 de Funds Society España, el fundador de Microwd, Alejandro de León, explica que en la compañía ofrecen microcréditos en Latinoamérica con los intereses más bajos de la zona.
“En Microwd dedicamos una gran parte de nuestro tiempo a seleccionar a quienes llamamos mujeres extraordinarias. A diferencia de la mayoría de microfinancieras, preferimos prestar a menos mujeres y confiarles mayores cantidades. Esta selección de mujeres extraordinarias nos ha permitido reducir el riesgo de impago (manejamos un 4,47%), generar 2,45 empleos por microcrédito y fomentar que el 66% de las emprendedoras ahorren”, explica.
Hoy, 22 de abril, se celebra el Día Internacional de la Tierra. Se trata de una efeméride global establecida por Naciones Unidas en 2009 y que tiene como fin concienciar a la humanidad sobre la necesidad de preservar nuestro planeta. En este sentido, la industria de inversión lleva años impulsando la inversión sostenible y bajo criterios ESG, para remar en favor de este objetivo.
Con motivo de esta celebración, que se enmarca este año en el contexto de la pandemia mundial del COVID-19, Andrew Howard, responsable de análisis sostenible de Schroders, se plantea si esta situación marca un momento crucial para la lucha contra el cambio climático. “Los efectos devastadores de la pandemia del COVID-19 han tenido un impacto a corto plazo en las emisiones de carbono, pero no lo suficiente como para modificar el control del progreso climático de Schroders, que permanece inalterado al implicar un aumento de la temperatura a largo plazo de 3,9°C en su última actualización trimestral”, señala.
Howard está en lo cierto. Una de las principales moralejas medioambientales que nos está dejando esta pandemia es que la reducción total de la actividad económica y la limitación de la movilidad ha reducido las emisiones de forma sustancial, rebajando la contaminación de las principales ciudades del mundo. En su opinión, no podemos bajar la guardia y debemos aprovechar este momento para tomar un mayor impulso en la defensa de nuestro entorno.
“Durante la crisis financiera mundial de 2008-09 vimos una reducción del 1,3% de las emisiones y posteriormente una recuperación de un 6% hasta 2010, a medida que las inyecciones de apoyo fiscal en las principales economías impulsaban la actividad económica. No queremos que esto vuelva a suceder y, a medida que los responsables políticos, las empresas y los gobiernos comiencen a planificar la recuperación económica y social tras la pandemia, éste podría ser el punto de inflexión para que el cambio climático acelere la transición a una economía con bajas emisiones de carbono. Las economías de todo el mundo necesitarán apoyo fiscal y algunos responsables políticos, por ejemplo, los dirigentes de la Unión Europea han acordado que el plan de recuperación económica de la región será coherente con su compromiso de transición ecológica. El hecho de que otros sigan el ejemplo, o el grado de rigor que demuestren sus criterios, se hará más claro a medida que los compromisos se conviertan en acciones», defiende Howard.
Para Andrew Parry, responsable de inversión responsable en Newton IM, parte de BNY Mellon IM, la pandemia es una “llamada de atención” para los participantes del mercado, los responsables políticos y cada uno de nosotros sobre la fragilidad de este mundo tan complejo e interconectado. En este sentido considera que la respuesta mundial a la enfermedad está siendo cada vez más coordinada y demuestra que las políticas se pueden modificar profundamente cuando nos enfrentamos a una crisis, también a la climática.
“El coste social del COVID-19 palidece ante la creciente amenaza que supone el cambio climático para la humanidad y, aun así, sigue siendo difícil que se adopten medidas decisivas a nivel mundial. Si bien la respuesta inmediata de las autoridades ha sido, lógicamente, intentar limitar las consecuencias sociales de la crisis actual, esta situación representa una oportunidad para garantizar un futuro más saludable y más resistente para el medioambiente, y no deberíamos dejarla pasar. Hasta ahora, de los miles de millones de dólares movilizados a nivel mundial para estimular la actividad económica, la contribución directa a la transición climática ha sido escasa en comparación con las cantidades destinadas a apoyar a empresas que ya presentaban problemas”, señala Parry.
Por último, las gestoras han querido recordar en este día que la inversión en productos sostenibles, bajo criterios ESG o de impacto puede ser una forma de canalizar, sin perder rentabilidad, capital hacia el cambio. “Actualmente vemos importantes oportunidades para las empresas que se centran en soluciones dentro de la eficiencia de los recursos y la protección del medio ambiente. El principal motivo del atractivo de estas áreas se basa en sus potenciales rendimientos y tiempos de recuperación de estas soluciones. El ahorro de electricidad, el uso de menos recursos o el despliegue de productos más eficientes se traduce directamente en una mejor propuesta de valor para los clientes”, apuntan Thomas Sorensen y Henning Padber, gestores del Nordea 1 – Global Climate and Environment Fund, respecto a las oportunidades de inversión que observan.
Según la experiencia de estos gestores de Nordea AM, han identificado también oportunidades en el ámbito de la gestión de agua, el aire y los servicios ambientales como respuesta a los bruscos cambios de tiempo y a la mala calidad del aire. “Los consumidores están cada vez más preocupados por el medio ambiente y, por lo tanto, exigen productos que sean respetuosos con el medio ambiente, es decir, hechos con ingredientes orgánicos o naturales y producidos sin causar contaminación. También es importante para estos consumidores verdes que las materias primas de los productos finales sean trazables y que éstos se entreguen aplicando soluciones de envasado sostenibles”, concluyen desde Nordea AM.
Open Value Foundation se une a la Bolsa Social en el lanzamiento de una convocatoria extraordinaria de inversión participativa y abierta para financiar empresas españolas en fases tempranas que estén desarrollando soluciones para mitigar el impacto del coronavirus a nivel sanitario, económico y social.
La convocatoria se dirige a startups y emprendedores/as sociales que estén desarrollando productos o servicios tecnológicos e innovadores que ofrezcan soluciones para alguno de los desafíos que está suponiendo el COVID-19.
El objetivo es canalizar de manera ágil inversión en forma de capital (equity) a empresas innovadoras que estén trabajando para mitigar los efectos del coronavirus, tanto a nivel sanitario -por ejemplo, desarrollando herramientas de apoyo a la estructura sanitaria nacional-, como económico -soluciones que ayuden a mantener y recuperar el empleo y las empresas- o social -mecanismos que movilicen recursos para los sectores de la población más vulnerables a la crisis-.
Las startups interesadas ya pueden presentar su candidatura. Tras un análisis por parte de un comité de expertos, las empresas que resulten seleccionadas podrán lanzar una campaña de crowdequity de entre 50.000 y 500.000 euros a través de la plataforma de inversión colectiva de La Bolsa Social, en cuya página web está toda la información sobre la convocatoria.
Además de Open Value Foundation, se han unido a esta iniciativa inversores particulares, business angels, fondos de impacto y otras empresas comprometidas con el impacto, como el Fondo Bolsa Social Impacto FESE, Ship2B, Creas, Mumtree o You&Law, entre otros, que podrán apoyar a las startups de impacto seleccionadas a través de inversión o servicios.
Las empresas sociales interesadas tendrán que cumplir con los siguientes requisitos mínimos:
Aportar un producto o servicio que suponga una solución viable, sostenible y escalable a los desafíos relacionados con el impacto del COVID-19
Ser una solución innovadora de componente tecnológico
Contar con una validación técnica y comercial de su propuesta, con facturación demostrable
Tener un buen equipo y un modelo de negocio escalable
Bolsas y Mercados Españoles (BME) compra material de protección por valor de 1 millón de euros para apoyar a las Fuerzas Armadas en la lucha contra la expansión del coronavirus. Esta partida se ha destinado a la adquisición de mascarillas de intervención FFP2, guantes de nitrilo y buzos desechables para los militares que participan en las diferentes acciones de la Operación Balmis.
La transacción se ha efectuado a través de un proveedor homologado, utilizando la red logística del Ejército de Tierra y cuenta con total trazabilidad.
A través de la denominada Operación Balmis, las Fuerzas Armadas llevan a cabo diferentes acciones para combatir la situación de emergencia sanitaria provocada por la rápida expansión de la pandemia. Así, están participando en las labores de desinfección e instalación de infraestructura de apoyo a la red hospitalaria española, a la vez que participan en misiones de control de fronteras y seguridad de infraestructuras críticas.
Esta donación se suma a otras medidas adoptadas por BME en las últimas semanas para hacer frente a la crisis provocada por el coronavirus. Siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, más del 97,5% de la plantilla desarrolla su actividad en la modalidad de teletrabajo y las instalaciones de todas las sedes han sido desinfectadas.
A esta misma iniciativa se une Renta 4 Banco con la aportación adicional de 100.000 euros. Entre otras acciones, Renta 4 Banco está colaborando con donaciones a asociaciones e instituciones en los países de Latinoamérica en los que está presente, como Chile, Perú y Colombia.