Los países asiáticos están emergiendo de la situación de COVID-19 mucho más en forma, económica y socialmente, que otras partes del mundo. Esto le da a la región una ventaja para crecer, encabezada por China. Se espera que la región se recupere más rápido y crezca más rápido que el resto del mundo.
Con una mayor demanda interna, particularmente en China, los países asiáticos han aumentado el comercio entre sí, percibiéndose una fuerte demanda de productos tecnológicos de Taiwán y Corea del Sur, lo que ayuda a la economía de estos países cuya mayor fortaleza es la exportación.
Uno de los fondos de inversión de la categoría VDOS de renta variable internacional Asia ex-Japón que mejor comportamiento tuvo durante 2020, tanto por rentabilidad como por volatilidad es Nordea 1-Asia ex Japan equity fund, revalorizándose un 21,42% en su clase BP en euros.
Tiene como objetivo preservar capital y generar una rentabilidad adecuada a largo plazo, invirtiendo principalmente en acciones de Asia. Se gestiona siguiendo el International Focus Equities Concept, un proceso de inversión centrado en el análisis profundo de los fundamentales de las empresas a la hora de seleccionar valores. Es un proceso inversor que busca identificar empresas con valoraciones atractivas y fundamentales sólidos, que estén infravaloradas con respecto a su potencial de generación de flujos de caja.
La gestora principal de la cartera del fondo es Kenglin Tan, CFA, directora general y gestora senior del equipo de renta variable. Con sede en Hong Kong, ella es la principal responsable de analizar y seleccionar acciones para las carteras de Asia ex-Japón, Asia Pacífico y ASEAN (Asociación de Naciones del Sureste Asiático). También trabaja en estrecha colaboración con otros gestores de cartera que cubren los mercados de la región del norte de Asia.
Kenglin tiene experiencia en análisis de acciones que cotizan en las bolsas de Hong Kong, Taiwán, la región de la ASEAN y Australia. Antes de incorporarse a Manulife Investment Management trabajó para JS Cresvale International (Hong Kong) y Pheim Asset Management. Kenglin tiene una licenciatura en Administración de Empresas con especialización en finanzas, por la Universidad de Putra, en Malasia, y cuenta con la certificación CFA.
La estrategia de gestión del fondo se basa en un enfoque fundamental de inversión para la selección de acciones. El proceso de inversión está diseñado para producir valor añadido, al permitir que el equipo gestor del fondo acceda a análisis e ideas de inversión procedentes del proceso central de análisis de la gestora. Los amplios recursos locales de la empresa en toda Asia y la habilidad para seleccionar de forma ascendente, de abajo hacia arriba, son fundamentales para capturar plenamente estas oportunidades de inversión.
La gestora principal de la cartera implementa la estrategia dentro de sus limitaciones y directrices. Los especialistas por país y sector se concentran en el análisis y la identificación de empresas adecuadas para el universo de la estrategia, mediante la consideración de diferentes criterios de selección y valoraciones de mercado. Todas las asignaciones por valor, sector y país son responsabilidad de la gestora principal de la cartera. El dinámico proceso de toma de decisiones del equipo incluye una revisión constante de las novedades macro y micro, correspondiendo las acciones seleccionadas para su inclusión en la estrategia a las ideas de mayor convicción, resultantes de este extenso proceso de investigación.
La cartera resultante incluye entre sus mayores posiciones acciones de Samsung Electronics (8,89%), Taiwan Semiconductor Manufacturing (8,64%), Alibaba Group Holding (7,79%), Tencent Holdings (7,68%) y Ping An insurance Group Co of China (3,12%). Por sector, tecnología de la Información (9,46%), consumo básico (2,51%), industrial (1,22%) y servicios de comunicación (0,62%) representan los mayores pesos, mientras que, por país, las mayores ponderaciones corresponden a Corea (2,55%), Taiwán (2,35%), Vietnam (1,20%), Indonesia (0,55%) y Singapur (0,12%).
La historia de rentabilidades del fondo lo sitúa entre los mejores de su categoría por este concepto, en el primer quintil, durante 2017, 2019 y 2020. A tres años, su dato de volatilidad es del 19,73%, reduciéndose hasta 17,41% a un año, lo que lo posiciona entre los mejores de su categoría por volatilidad en este último periodo, en el quintil cinco. También a un año, su Sharpe es de 1,36 y su tracking error, respecto al índice de su categoría, del 8,86 %. Aplica a sus partícipes una comisión fija del 1,50 %.
Durante el inicio del brote de COVID-19 las economías de Asia ex-Japón lograron evitar una grave conmoción del sistema gracias a la rápida respuesta fiscal de los gobiernos. De cara al futuro, el consenso estima que las economías de Asia ex-Japón crecerán a un ritmo del 5,5% en 2021. El crecimiento en China e India se estima que sea de entre el 8% y el 9%, superando al de otros países de la región. Si bien la cifra de crecimiento absoluto parece alta, es necesario señalar que se compara con una base anormalmente baja en 2020.
En general, el equipo gestor espera que la recuperación económica en la región sea gradual y desigual. El estrés económico de 2020 puede hacer notar sus repercusiones durante 2021, por lo que esperan ver un deterioro de la calidad de los activos de crédito a lo largo del año, particularmente en sectores con una debilidad prolongada en los ingresos. Dada la dispersión de las estimaciones de consenso para el crecimiento del PIB en toda la región de Asia, el equipo gestor se centrará en las tendencias estructurales clave que ganen interés en 2021, en lugar de ser excesivamente optimistas sobre una rápida recuperación.
Entre estas tendencias señalan: 1) la amplia adopción de la tecnología 5G, 2) el cambio climático y el desarrollo sostenible, 3) deslocalización de la producción y reubicación de nuevas fábricas en la región, 4) la automatización de la fabricación y 5) la digitalización de la economía del Sudeste asiático.
Tribuna de Paula Mercado, directora de Análisis de VDOS