El patrimonio de Banca March en gestión discrecional de carteras (GDC) aumentó en 2020 un 38%, hasta los 1.210 millones de euros. Este resultado ha sido posible gracias a la gran acogida por parte de clientes, cuya cifra se incrementó un 55% en este periodo, hasta llegar a los 3.900 contratos a finales de 2020.
Los servicios de GDC se pusieron en marcha en 2018 con el objetivo de poner a disposición de los clientes una selección de productos de arquitectura abierta que se gestionan de manera activa para obtener retornos en cualquier contexto de mercado. Los buenos resultados obtenidos por las soluciones de GDC a lo largo de este año, uno de los más complicados de la historia de los mercados financieros, han permitido impulsar su crecimiento, ya que todas las carteras modelo se anotaron resultados positivos, desde el 3,3% de la cartera de perfil más defensivo, exclusivamente de renta fija, hasta el 30% de Next Generation.
Cabe subrayar el dinamismo de la estrategia Next Generation, la propuesta de inversión basada en megatendencias globales identificadas por el equipo de la entidad, que elevó sus activos gestionados en más de un 140% hasta diciembre, con más de 220 millones de euros.
Next Generation invierte en las grandes tendencias de futuro que forman parte del cambio económico y social a nivel global: revolución 4.0, sostenibilidad y medio ambiente y demografía y estilo de vida, con un horizonte de inversión a largo plazo. Además, los clientes pueden acceder a esta propuesta de valor a través del fondo de fondos March Next Generation F.I., que permite a los clientes y no clientes acceder a esta estrategia sobre megatendencias con una inversión mínima de una participación. En febrero de este año se lanzó Next Generation en este formato, y ya acumula 140 millones de euros, por lo que la estrategia conjunta (en carteras de GDC y fondo) gestiona ya más de 360 millones de euros.
Activos alternativos y sostenibilidad
Las propuestas de inversión en activos alternativos, que el banco incorporó a su oferta de soluciones en 2019 a través de sendas alianzas con K2 Advisors-Franklin Templeton (GDC) y Banque Syz (fondo de fondos), suman ya más de 160 millones de euros bajo gestión, lo que supone un alza del 80% respecto al año anterior.
Finalmente, los últimos lanzamientos del año, relacionados con la inversión sostenible y responsable (ISR) de la mano de J. Safra Sarasin y con la inversión de Impacto con Amundi-CPR, también obtuvieron una acogida excelente, con un patrimonio gestionado que supera los 65 millones de euros entre las dos propuestas.
Desde el área de Productos consideran que en 2020 han sido críticas las decisiones de inversión estratégicas, con apuestas de convicción en sectores como la tecnología o la salud, unidas a decisiones clásicas de la gestión activa, más tácticas, como las adoptadas durante el mes de abril, apostando por sectores favorecidos por la nueva situación económica, y por geografías que reaccionaron más ágilmente al difícil panorama económico provocado por la situación sanitaria.
Además, la apuesta por la gestión alternativa líquida ha sido muy acertada. En un año extraordinariamente volátil se ha puesto de manifiesto que incorporar elementos para el control de riesgo y la gestión de la asimetría de rentabilidades a las propuestas de clientes de Banca March ha dado resultados muy positivos. En un periodo en el que la dispersión de rentabilidades ha sido muy elevada por sectores, geografías e incluso compañías, la agilidad a la hora de invertir de los gestores seleccionados por los socios de Banca March ha demostrado ser muy oportuna. En ambos casos, la propuesta de Banque Syz como la de K2 han obtenido unos resultados acordes con sus objetivos de Euribor+3%.
Juan Antonio Roche, director del Área de Productos de Banca March, destacó: “Resulta difícil de imaginar un test más completo para nuestras tesis de inversión y la confianza de nuestros clientes que lo vivido en un año tan extraordinario como este. Respecto a lo primero, las rentabilidades alcanzadas corroboran el valor de la gestión activa, así como las apuestas más innovadoras a favor de un ciclo económico distinto y la inclusión de tendencias de crecimiento ajenas a él o la apuesta que hicimos por la gestión alternativa hace algo más de un año. En cuanto a lo segundo, no hay mejor prueba que el crecimiento del número de clientes que nos han confiado la gestión de su dinero en momentos de incertidumbre máxima, en los que su atención debía estar centrada en otras cuestiones. El mundo en 2021 seguirá sufriendo episodios de volatilidad, y la rentabilidad dependerá de la habilidad para aprovecharlos, combinándola con esas palancas de rentabilidad a largo plazo que se derivan de una trasformación que no solo no se interrumpe, sino que se acelera, como la llegada de la inversión sostenible, que centrará buena parte de nuestros esfuerzos”.