La mayor parte de los hogares europeos no invierte de forma directa en los mercados de capitales. Así lo apuntan los datos del último informe de EFAMA: Household Participation in Capital Markets – Assessing the current state and measuring future progress. Otro dato llamativo del estudio es que aquellos países con una proporción baja de depósitos bancarios tienden a registrar un nivel mayor de ahorro respecto a las pensiones.
El estudio, que está contextualizado dentro del Plan de Acción de la Comisión Europea sobre la Unión de Mercados de Capitales (CMU, por sus siglas en inglés), recoge diez recomendaciones de políticas concretas para ayudar al avance de la CMU, incluida la introducción de un indicador clave de rendimiento (KPI) para monitorear la participación de los hogares en los mercados de capital.
Por otro lado, el informe busca complementar las conclusiones del High Level Forum sobre la CMU, que analiza la inversión de los hogares en 25 países europeos. Además, estudia específicamente los avances realizados en los últimos años en la transferencia de la «riqueza financiera» de los hogares desde los depósitos bancarios a los instrumentos del mercado de capitales como, por ejemplo, seguros de vida y productos de fondos de pensiones, fondos de inversión, títulos de deuda o acciones cotizadas.
Así, según los datos de EFAMA, los incentivos fiscales desempeñan un papel fundamental a la hora de animar a los ciudadanos a invertir en instrumentos del mercado de capitales y a optar por algunos productos específicos de inversión a largo plazo.
“La UE puede impulsar la participación de los inversores minoristas en los mercados de capitales si se abordaran las cuestiones pendientes en la divulgación informativa a los inversores minoristas. Sin embargo, estas acciones solo serán efectivas si los estados miembros adoptan simultáneamente las medidas adecuadas en fiscalidad, en políticas de pensiones y en la educación financiera, para animar así a más ciudadanos a colocar sus ahorros en estos instrumentos”, asegura Tanguy van de Werve, director general de EFEMA. Además, van de Werve subraya la necesidad de que la UE supervise el progreso a nivel nacional a través del uso de KPIs.
En este sentido, el informe recoge diez recomendaciones de políticas concretas para impulsar fomentar las inversiones minoristas en instrumentos del mercado de capitales (CMI). Estas se centran en cuatro áreas principales: educación financiera, políticas de pensiones, incentivos fiscales y monitorización. En este sentido, EFAMA recomienda utilizar como KPI el denominado índice CMI, es decir, el ratio entre los ahorros de los hogares invertidos en mercados de capital y los colocados en depósitos. Así, cuanto mayor sea el valor de este índice, más hogares participarán en los mercados de capital.
Asimismo, los datos del informe apuntan a que, si los hogares europeos redujeran la proporción de su riqueza en depósitos en 5 puntos porcentuales, se podrían destinar casi 1,6 billones de euros para la financiación de la economía europea. “Esto demuestra el impacto que tendría una mayor participación minorista en los mercados de capitales en la financiación de las empresas europeas, al tiempo que los hogares podrían beneficiarse de un mayor rendimiento de sus ahorros a largo plazo, asegurando así mejores ingresos de jubilación”, aseguran desde EFAMA.