Según el análisis realizada por Morningstar, el mercado de ETFs en Europa se ha recuperado con fuerza a lo largo del segundo trimestre tras registrar unas entradas netas de 33.400 millones de euros y tras unas salidas de 4.400 millones de euros en el primer trimestre.
Desde Morningstar destacan que los activos se han recuperado hasta los 903.000 millones de euros desde los 780.000 millones de euros del primer trimestre. Una cifra que se sitúa en los niveles de 2019 y “pone de nuevo al mercado de ETFs en la senda para alcanzar 1 billón de euros. El segundo trimestre fue un período de fuertes flujos para los ETFs de renta fija, con el crédito grado de inversión a la cabeza de las preferencias de los inversores”, apuntan.
Este impulso tiene explicación. Según señala Morningstar, “los inversores encontraron consuelo en las numerosas de medidas políticas aplicadas por los bancos centrales para amortiguar la economía tras el impacto de la crisis del coronavirus, pero la mayor parte del dinero se dirigió a la renta fija”. De hecho, los inversores se han mostrado muy favorables a la renta fija, que atrajo el 70% de los flujos trimestrales y los activos crecieron un 14% hasta los 249.000 millones de euros desde los 218.000 millones de euros.
Respecto a la renta variable, los flujos hacia ETFs de renta variable totalizaron 4.000 millones de euros, a pesar de que los activos crecieron un 17%, hasta los 544.000 millones de euros, desde los 467.000 millones de euros, lo que refleja el fuerte repunte de los mercados de renta variable durante el trimestre. Morningstar destaca que, curiosamente, los ETFs de renta variable ESG reunieron 5.400 millones de euros, lo que implica que los ETFs de renta variable no ESG registraron leves salidas de 1.400 millones de euros.
Según su valoración, esto encaja con la narrativa de los inversores que buscan seguridad, principalmente en la renta fija, pero también en las inversiones de renta variable con temática de ESG, que se mantuvieron mejor que sus pares de la corriente principal durante la derrota de marzo. “A pesar de la tendencia alcista de las bolsas, los datos de los flujos mensuales muestran que los inversores siguieron actuando con cautela en abril y en mayo. Ambos meses cerraron con leves salidas de fondos en los ETFs de acciones en general, aunque hay indicios de que los inversores tomaron posiciones en fondos de acciones con temática ESG durante el período”, explica Jose Garcia-Zarate, Associate Director, Passive Strategies.