En 2019, el número de entidades de asesoramiento financiero se redujo en España, pasando de las 158 de un año antes a 140. Eso ha provocado que las cifras de patrimonio asesorado, ingresos y comisiones hayan caído también, en un momento complejo en el que muchas entidades se transforman en otras figuras o se fusionan entre ellas para hacer frente a los retos del entorno.
En este momento crítico para el sector, aunque de crecimiento entre aquellas entidades que siguen adelante con su negocio, ¿cómo puede afectar la crisis del coronavirus? ¿Dará la puntilla a la industria o por el contrario mostrará la importancia de un asesoramiento independiente y de calidad en momentos tan complejos?
Guillermo Santos, socio de la EAF iCapital, explica bien la disyuntiva: “Por un lado es muy negativo pues el movimiento de mercado está haciendo caer las valoraciones de la mayoría de clientes lo que, aunque sea de forma transitoria, comportará una reducción de ingresos”. Pero, dice, por otro es favorable, “dado que fases de caídas como la presente ponen en valor la calidad del asesoramiento de muchas EAFs que saben aportar diversificación y carteras realmente adecuadas al riesgo de cada inversor con productos de máxima calidad y mantener en todo momento una cercanía al cliente que las grandes bancas privadas no pueden muchas veces asumir”.
También ven una doble cara en la EAF Cross Capital: “Las EAFs (y resto de ESIs) ya venían sufriendo la presión de márgenes derivada de la adaptación a la MiFID II y de la competencia con la banca. En el caso de las unipersonales y firmas pequeñas monoservicio, esta situación les añade más presión”, dice Munesh Melwani, socio fundador-director general de Cross Capital EAF. Pero, por otro lado, hay una cara positiva: «Como se suele decir, en toda crisis, se originan oportunidades; en esta ocasión no iba a ser distinto, una vez más, a la gestión pasiva se le está viendo los colores, al igual que a los fondos y planes de pensiones bancarizados”.
Un refuerzo al modelo
En positivo se pronuncia Carlos Farrás Fernández, socio director y CIO de DPM Finanzas EAF: “Esta crisis sin precedentes intensifica nuestra relación de confianza con los clientes y pone en valor la importancia de contar con un asesor profesional que le ayude a tomar las mejores decisiones a través de recomendaciones construidas pensando únicamente en el interés de cada cliente. En nuestro caso esta situación refuerza nuestro modelo de asesoramiento independiente y a medida. Nuestra independencia nos permite tomar decisiones libremente pensando en el único interés de nuestros clientes y el contar un servicio a medida nos permite adecuar perfectamente la cartera a la situación particular de cada uno de nuestros clientes”.
También lo cree Iker Barrón, socio director de la EAF Portocolom: “Históricamente la gente se acuerda del asesoramiento cuando hay problemas con lo que creemos que momentos como éste son los que definen a los auténticos asesores, que son los que están alineados y en perfecta sintonía con sus clientes independientemente del entorno”, dice. “Aquellos clientes que estén fuera de su perfil sufrirán sobremanera y buscarán respuestas”.
Por otro lado, explica, “consideramos que los modelos de negocio que apuestan por un futuro más sostenible tienen un mayor valor intrínseco y son las empresas que tendrán mayor capacidad de adaptación a la situación a la que nos enfrentamos”.
“Siguiendo la lógica, esta crisis tendría que poner en valor el asesoramiento de calidad, pero cualquiera sabe ya que, como dijo Aristóteles, la duda es el principio de la sabiduría», añade Araceli de Frutos.
“En estos momentos, la situación puede ser positiva para poner en valor el asesoramiento de calidad. Tal vez los inversores se planteen buscar e investigar las diferencias entre un asesoramiento independiente a través de una EAF, frente al asesoramiento de las bancas privadas. Ser asesorado por una EAF es ser asesorado de una forma más personal y más alineada con los intereses del cliente, fundamentalmente porque las EAFs no tenemos producto propio. Y muchas de nosotras tenemos una política de honorarios basada en el cobro exclusivo del cliente para evitar cualquier conflicto de interés”, explica Ana Fernández Sánchez de la Morena, fundadora de AFS Finance Advisors EAF.
“Personalmente, creo que esta situación para dar una mayor visibilidad a las finanzas conductuales. Nosotros somos pioneros en utilizar herramientas de coaching y psicología a la hora de tomar decisiones de inversión. Y esta forma de asesorar permite que el inversor se conozca mejor y entienda el porqué y el para qué de sus decisiones patrimoniales”, añade.
Mayor presión
Más pesimista es Cristóbal Amorós, de Amorós Arbaiza Inversiones EAF: “Esto puede ser la puntilla para muchas empresas de asesoramiento financiero, que ya vienen (venimos) sufriendo desde hace tiempo una situación complicada”.