En un entorno donde la mayoría de las clases de activos se revalorizaron, el sector de los hedge funds experimentó uno de sus mejores años en una década, según la opinión de Alexis Mansuy, analista en SYZ AM, y Cédric Vuignier, director de Investigación e Inversiones alternativas en SYZ AM. Además, la mayor parte de las estrategias avanzaron, a excepción de las de los gestores sistemáticos macro, que no consiguieron interpretar los mercados con sus modelos fundamentales. “Para los fondos equity market neutral, fue un año positivo a la par que complejo, sobre todo a causa de unas rotaciones de factores más frecuentes y al estrangulamiento de las posiciones cortas”, subrayan los expertos.
Además, la decisión de la Reserva Federal de recortar los tipos de interés vuelve a catapultar los precios de los activos a cotas máximas, situando la volatilidad en niveles mínimos. Como consecuencia, se generaron importantes alzas en las asignaciones a renta variable y apalancamiento en las estrategias basadas en riesgos, como la de la paridad de riesgos. “En caso de que este aumente la volatilidad, cabe esperar un gran desapalancamiento como el que experimentamos a finales de 2018”, advierten desde SYZ AM. Ahora bien, ¿será el coronavirus el desencadenante?
“En nuestra búsqueda constante de alfa, creemos que hay tres temáticas que destacarán en los próximos doce meses”, destacan los autores. En primer lugar, el arbitraje de los bonos convertibles debería beneficiarse de una mayor volatilidad a nivel de los títulos individuales y del aumento de las emisiones nuevas en Estados Unidos. Asimismo, desde la gestora creen que hay valor por descubrir en Japón: “Gracias a las recientes reformas aplicadas por el primer ministro, Shinzo Abe, el sector empresarial japonés está experimentando profundos cambios”, destaca Mansuy.
Por último, la tercera temática de inversión que destaca SYZ AM es el aprendizaje automático. “Esta tecnología revolucionaria está alterando radicalmente nuestra experiencia del mundo a medida que los ordenadores desarrollan sus propios algoritmos”, subrayan los autores. Esto ha creado una carrera en pro de los datos y, entre los inversores, una búsqueda en el mercado. El aprendizaje automático es, según SYZ AM, actualmente una tecnología en la que se puede invertir y que trabaja para optimizar las carteras y crear inversiones y modelos de previsión.
Por otro lado, desde la gestora esperan que los mercados muestren mayor volatilidad, lo que debería favorecer a los gestores macro discrecionales y sistemáticos a corto plazo. No obstante, a los replicadores de tendencias de medio a largo plazo puede resultarles más complejo capear un mercado con más turbulencias.
Asimismo, en el periodo analizado, los mercados de renta variable se anotaron alzas de dos dígitos en la mayoría de las regiones, con dispersión entre los sectores. Las persistentes rotaciones de estilo también caracterizaron el periodo, lo que situó a los títulos financieros entre los más rentables.
Pese a los recortes de tipos a corto plazo a nivel mundial, el rendimiento estadounidense a 10 años volvió a subir del 1,5% a casi el 2%, lo que provocó una rentabilidad inferior en los sectores equivalentes a la renta fija como suministros públicos, inmobiliario y consumo básico.
En términos generales, los fondos direccionales con mayores exposiciones netas superaron a aquellos con niveles inferiores de exposición. Sin embargo, destaca la gestora, las marcadas rotaciones del estilo de crecimiento al de valor hicieron que el alfa fuera más baja para algunos gestores en este segmento. “Esto también generó preocupaciones para los gestores market neutral, que tendieron a mantener un posicionamiento largo en crecimiento y corto en valor, y que arrojaron una rentabilidad de plana a negativa desde septiembre hasta finales de año”, añade Vuignier.
Por todo ello, en estos últimos cuatro meses de repunte de renta variable, desde la gestora subrayan que “no es de extrañar que los gestores de estrategias equity hedge hayan aumentado su apalancamiento”.
“Continuamos siendo prudentes respecto de los mercados bursátiles en el año 2020, después de que en 2019 se hayan registrado rentabilidades que no veíamos desde hace más de media década”, concluyen los analistas. En este año, las tensiones políticas sobre las relaciones comerciales entre EE. UU. y China, y recientemente entre EE. UU. e Irán, así como la continua incertidumbre acerca del Brexit, justifican esta actitud prudente.