Los fondos activistas cayeron en 2019 a nivel mundial. Por ejemplo, el número de campañas activistas europeas pasó de 57 en 2018 a 48 en 2019. No obstante, su actividad se ha adaptado, tanto en enfoque como en estilo: ahora se centran en empresas que son buenas, pero que podrían ser mejores y tienden a adoptar un planteamiento más colaborativo en lugar de uno agresivo. Estas son algunas de las conclusiones del informe 2019 de Lazard sobre fondos activistas, que recopila y analiza datos sobre las tendencias clave del activismo a nivel mundial.
Según los datos de Lazard, la bajada registrada en Europa se debe a la caída de 10 campañas en Reino Unido, lo que supone el 30% de la actividad británica. Sin embargo, en lo referente a los datos de la Europa continental, el activismo ha aumentado un 30% en 2019. El informe destaca, principalmente, la expansión en Francia, Alemania y Suiza que “compensa parcialmente los datos derivados de la caída del Reino Unido”.
Tras el récord que registraron estos fondos en 2018, su actividad vuelve a la normalidad y se registra una expansión creciente más allá de los Estados Unidos En 2019, el activismo en empresas no estadounidenses representó un 40% de la actividad, frente al 30% de 2015. La caída de la actividad en Estados Unidos, frente a su aumento en Japón y Europa, ha motivado esta tendencia, según el informe. Por primera vez, Japón ha sido la jurisdicción no estadounidense más abordada por activistas accionariales, con 19 campañas y 4.500 millones de dólares en capital invertido en 2019. Asimismo, durante este año se ha registrado un grupo más amplio de fondos activistas: el número de inversores asciende a 147 activistas, entre los que destacan 43 sin antecedentes en activismo accionarial.
No obstante, este año se han registrado 187 empresas seleccionadas por fondos activistas este año, un 17% menos que en 2018, pero “en línea con los niveles de la media multianual”, asegura el informe. El capital invertido por estos vehículos registra una caída similar, de los 60.000 millones de dólares registrados en 2017/2018 a 42.000 millones. En total, se han lanzado 209 nuevas campañas este año, dos de ellas en España (Bankia y EDP).
Además, desde Lazard destacan el nexo entre activismo y M&A. Las fusiones y adquisiciones (M&A por sus siglas en inglés) baten récord con 99 campañas en 2019, un 47% de todas las campañas frente al 35% de años anteriores. En total, se han invertido 24.100 millones de dólares en estas campañas, un 60% del capital total invertido. Además, destacan los sectores industriales, tecnológicos y de energía como los preferidos entre estos fondos. Sólo en el sector tecnológico se utilizaron 7.000 millones de dólares en campañas relacionadas con fusiones y adquisiciones, según el informe.
Esta tendencia se refleja en los consejos de administración de las compañías. En 2019, 122 puestos en los órganos de gobierno corporativo correspondían a activistas. De acuerdo con el informe, la mayoría se obtuvieron mediante acuerdos negociados (85%) y el 20% de los escaños de activistas se asignaron a mujeres directivas.
Por último, “el enfoque de Inversión Socialmente Responsable continúa creciendo”, aseguran desde Lazard. En los últimos dos años, los activos bajo gestión de los signatarios de los Principios para la Inversión Responsable (PRI) de la ONU han aumentado un 26% con 86.000 millones de dólares, y el número de activos en ETF relacionados con ISR ha aumentado un 300%, según datos de Lazard.