En el mercado europeo cada vez existen más soluciones de inversión que tienen en consideración los factores ESG ( medio ambiente, social y buen gobierno, según sus siglas en inglés). Y el motivo es sencillo: cada vez hay mayor demanda. Según el último informe de Cerulli Associates, titulado European Environmental, Social, and Governance Investing 2019: Setting Standards and Enhancing Integration, la inversión responsable sigue creciendo en Europa.
“En los últimos años, las gestoras de fondos han lanzado numerosas propuesta con valor añadido que contempla los factores ESG, para satisfacer la creciente demanda de los inversores locales”, apunta en su documento. De hecho, la investigación realizada por Cerulli Associates estima que en agosto de 2019 había registrados 1.840 fondos ESG, entre fondos tradicionales y ETFs, para su vu venta en Europa.
La tendencias es imparable, pero su ritmo de crecimiento es diferente según la región de Europa. Lo único que es común a todo el viejo continente es que la demanda por productos de inversión sostenible aumenta. “Esto es particularmente cierto en el caso de la banca privada y la gestión de altos patrimonios, donde se está registrando la mayor demanda de fondos ESG y de ETFs sostenibles”, matiza. A finales de agosto de 2019, los fondos ESG contaban con un patrimonio de 303.000 millones de euros.
«En los últimos años, los gestores de activos en Europa han lanzado nuevas soluciones de inversión ESG, con el objetivo de dar respuesta al aumento esperado de la demanda de los inversores. Además, dedican cada vez más esfuerzo en diferenciar sus nuevas propuestas de las de sus competidores. Este es un movimiento sensato y debería ayudar a atraer nuevos flujos hacia sus plataformas ESG «, afirma Fabrizio Zumbo, director asociado del equipo europeo de análisis minorista de Cerulli Associates.
Según el análisis que hace la firma, la banca privada es el principal canal de distribución de productos ESG en Europa y Cerulli cree que las gestoras deberían dirigirse hacia ellos con ofertas especializadas en ESG. “Los clientes privados compran cada vez más la narrativa que hay detrás de los productos. Así que aquellas gestoras que pueden crear un discurso ESG convincente estarán bien posicionados para tener éxito. Además, las gestoras deberían intentar crear herramientas de análisis más innovadoras para las ESG, así como herramientas digitales para los inversores minoristas. Éstas deberían ofrecer información sobre riesgos no financieros y la exposición a factores ESG de los activos, además de la huella de carbono de las carteras”, añade Zumbo.
El 45% de los bancos privados a los que Cerulli Associates encuestó para su informe considera que la inversión sostenible será una parte muy relevante de su negocio dentro de dos años. Por ello, el 73% de los encuestados espera que aumente la demanda de este tipo de fondos. Por la parte de la oferta, los propios bancos privados están adoptando tácticas para desarrollar más su oferta de soluciones de inversión ESG. Las grandes firmas internacionales, generalmente, tienen enfoques de ISR bien definidos, mientras que los bancos más pequeños a menudo carecen de la experiencia relevante y, en cambio, buscan proporcionar su oferta apoyándose en gestoras externas o internacionales.
En el caso de los inversores institucionales, fondos de pensiones y aseguradoras principalmente, la mayoría de ellos ya ha integrado en los factores ESG en la toma de sus decisiones de inversión. «A medida que evolucione la integración de ESG, será crucial para los gestores traducir su análisis de riesgos en un marco de inversión sostenible robusto y replicable basado en métricas de ESG cuantificables», concluye Justina Deveikyte, directora asociada del equipo de investigación institucional europeo de Cerulli Associates.