Los asesores dedican la mayor parte de su tiempo a tareas de administración y cumplimiento en detrimento del servicio al cliente, advierten los asesores de Square Mile Investment Consulting and Research. El análisis, recogido por el diario online FTAdviser y compartido por CISI, concluye que los asesores califican las tareas administrativas como las culpables de la mayor demanda de su tiempo en el trabajo, seguidas por tener que lidiar con el cumplimiento.
El tiempo que pasan cara a cara con los clientes ocupa el tercer lugar, a pesar de que el 39% de los asesores afirman que las reuniones en persona con los clientes son el medio de comunicación más efectivo, recoge también el diario.
Mark James, director de relaciones con los clientes en Square Mile, apunta: “Esto pone de manifiesto una desconexión obvia: la carga administrativa de los asesores les impide proporcionar mayores servicios de valor añadido a sus clientes. Si los asesores pasan la mayor parte de su tiempo cumpliendo con los requisitos reglamentarios, esto supone menos tiempo frente a los clientes, que es donde obtienen sus honorarios”.
Sin embargo, apuntan desde FTAdviser, la encuesta a 133 asesores financieros realizada en septiembre también identifica una tendencia creciente: asesores que subcontratan servicios reguladores a terceros como un medio para superar la creciente carga.
“Una forma en la que los asesores han modificado su modelo de negocio es que se han dado cuenta de que ésta es un área en la que pueden ahorrar tiempo al incorporar expertos al negocio. Esta es la tendencia más grande que hemos observado: los asesores ya no lo hacen ellos mismos”, declara James.
En los últimos años, se han introducido en el mercado una serie de requisitos reglamentarios, incluida la Directiva de Mercados de Instrumentos Financieros (MiFID II), el Reglamento General de Protección de Datos (GDPR) y el inminente Régimen de Directivos Senior y Certificación que se prevé implementar en diciembre. Estas reglas han exigido más tiempo y energía a los asesores; en particular, a aquellos que trabajan en pequeñas y medianas empresas sin un departamento de cumplimiento específico, apunta FTAdviser.
A principios de este año, el Chartered Institute for Securities & Investment (CISI) ya advirtió que MiFID II, que exige que las empresas de servicios financieros divulguen un desglose de todos los costes y cargos asociados con las inversiones de un cliente, supone unos 20 minutos de tiempo administrativo a cada reunión con clientes, tal y como señala el medio.
James agrega que la subcontratación también se está convirtiendo en una práctica común para los procesos de inversión: menos de la mitad de los asesores de la encuesta de Square Mile, un 44%, utilizan ahora sus propios servicios de inversión centralizados. Sin embargo, admite que esto lleva un elemento de riesgo: la disminución del control y un coste adicional ya sea directamente para el asesor o para el cliente, advierten.
Ya en mayo Nucleus publicó unos datos similares, tal y como señala FTAdviser, cuando la plataforma advirtió de que el número de asesores que dedicaban el 40% de su tiempo a tareas administrativas se había triplicado en un año.
Nucleus también descubrió que los asesores tenían dificultades a la hora de encontrar el tiempo suficiente para atender el aumento del número de clientes y que sólo uno de cada siete asesores pasaba más del 40% de su tiempo con los mismos clientes, en comparación con uno de cada cinco el año pasado, apunta el artículo.