Las expectativas en los rendimientos a largo plazo de MFS Investment Management con respecto a las acciones globales son del 4,2%, con un alza moderada con respecto al 3,9% de enero. El principal factor de este incremento son las valoraciones modestamente mejores gracias a unos márgenes de beneficio que siguen siendo algo elevados, algo que puede ser insostenible en el grueso del mercado.
Las expectativas a largo plazo para los bonos globales de MFS han experimentado una subida similar, desde un 3,1% al 2,6% de enero.
Los diferenciales de la deuda siguen comprimidos, especialmente en ciertas áreas del mercado, como la renta fija high yield, dejando poco margen en los diferenciales para compensar por un deterioro de los fundamentales o por la volatilidad.
A nuestro modo de ver, los inversores deberían considerar evaluar sus exposiciones al riesgo y sus exposiciones regionales a la renta variable mientras que reconocen que los rendimientos de la renta fija serán más difíciles de cosechar durante las próximas décadas de lo que lo han hecho históricamente.
En la mayoría de las regiones de renta variable y en los sectores de renta fija, nuestras expectativas a largo plazo siguen siendo menores que sus medias históricas. Mientras que la renta variable global ha disfrutado de un rally significativo en los últimos años -es posible que los mercados continúen en alza- creemos que se debe tener precaución dados los elevados márgenes de beneficios y las valoraciones. En renta fija, los rendimientos a corto plazo han aumentado en algunas regiones, pero los rendimientos a largo plazo siguen siendo bajos, dando pocas razones para sobreponderar la duración.
El gráfico muestra las expectativas de MFS a 10 años en rendimientos ajustados al riesgo para las principales clases de activos a julio de 2018.
Renta variable global
Nuestra expectativa a largo plazo para la renta variable global es del 4,2%, una ligera alza con respecto al 3,9% de enero. El principal factor de ese incremento es una mejoría entre las valoraciones entre unos márgenes empresariales elevados del 9%, que esperamos que gradualmente regresen hacia su media a 20 años del 7%. De forma similar, con respecto a nuestras expectativas del mes de enero, los ratios P/E se han comprimido y se espera que arrastren el rendimiento global económico en muchas regiones, mientras que son algo más razonables, siguen siendo elevados.
Las expectativas de retorno de MFS son más elevadas en regiones como los mercados emergentes y Europa, donde seguimos siendo más optimistas con respecto a la mejora de los fundamentales. La renta variable emergente está cotizando por debajo de sus valoraciones históricas a largo plazo, con un fuerte crecimiento esperado en las ventas que contribuirá aún más en los beneficios. En el Reino Unido, unos márgenes en expansión son el principal factor de unos rendimientos esperados ligeramente superiores.
Renta fija
Nuestra expectativa sobre los rendimientos a largo plazo para los bonos globales agregados ha subido de un 2,6% en enero a un 3,1% n julio. El rendimiento a largo plazo actual de los bonos soberanos sigue siendo algo menor en relación a sus medias a largo plazo, aunque los rendimientos a corto plazo han aumentado en algunas regiones, principalmente en Estados Unidos y Canadá, conforme los bancos centrales han comenzado la normalización de sus tasas de interés. Los diferenciales del crédito siguen comprimidos, en especial en ciertas áreas del mercado como la deuda high yield estadounidense, dejando poco colchón de margen para compensar por un deterioro de los fundamentales o un aumento de la volatilidad.
Mientras los rendimientos de algunos bonos soberanos a largo plazo han subido ligeramente en anticipación al incremento en el crecimiento y la inflación, continuamos esperando que las tasas de rendimiento permanezcan relativamente comprimidas.
Los mercados globales de crédito han comenzado a divergir con los diferenciales de los rendimientos cercanos a mínimos históricos, y con un rendimiento relativamente menor tanto el crédito de grado de inversión como la deuda emergente. Un número de bancos centrales han comenzado el proceso de normalización de las políticas monetarias acomodaticias a través de cambios en sus programas de relajamiento cuantitativo, y en algunas regiones, incrementando las tasas de referencia. Predecimos que nuestra curva de rendimientos nominales se desplazará hacia arriba y en paralelo en los próximos 10 años, sugiriendo unas mayores tasas de rendimientos entre la mayor parte de las áreas de la curva.
Conclusión
La diversificación global continuará siendo un tema clave conforme muchos activos en mercados desarrollados, a excepción de Estados Unidos y en mercados emergentes parecen tener unas mejores valoraciones que los activos de riesgo estadounidenses.
Se espera que los rendimientos de la renta fija sean considerablemente menores en los próximos 10 años, en relación a sus rendimientos históricos. Tanto la deuda soberana como los diferenciales de la deuda corporativa, así como algunas partes del mercado se encuentran en sus puntos más altos, también otras están en los menores niveles que estos activos han tocado en su historia reciente.
Creemos que los inversores deberían considerar evaluar los riesgos de exposición y el posicionamiento regional en renta variable dentro de sus carteras, a la vez que reconocer que unos altos niveles de rendimientos en renta fija serán más difíciles de obtener en los próximos 10 años que lo que han sido históricamente.
Columna de Rabi B. Venkataraman, responsable global del equipo de Soluciones de Inversión de MFS Investment Management, y Jonathan W. Hubbard, director en el equipo de Soluciones de Inversión de MFS IM.