Al firmar el Compromiso de Carbono de Montreal, los inversores se comprometen a medir y divulgar públicamente la huella de carbono de sus carteras de inversión anualmente.
El texto del compromiso es el siguiente: «Como inversores institucionales, tenemos el deber de actuar en los mejores intereses a largo plazo de nuestros beneficiarios. En este rol fiduciario, creemos que hay riesgos de inversión a largo plazo asociados con las emisiones de gases de efecto invernadero, el cambio climático y la regulación del carbono. Con el objetivo de entender mejor, cuantificar y gestionar el carbono y los impactos relacionados con el cambio climático, los riesgos y las oportunidades de nuestras inversiones, es esencial medir nuestra huella de carbono. Por lo tanto, nos comprometemos, en una primera etapa, a medir y calcular la huella de carbono de nuestras inversiones anualmente con el objetivo de usar esta información para desarrollar una estrategia de compromiso y/o identificar un conjunto de objetivos de reducción de huella de carbono».
El Compromiso se lanzó el 25 de septiembre de 2014 en el PRI en persona en Montreal (un evento que se celebra anualmente y asisten por ejemplo empleados de las empresas signatarias de los Principios de Inversión Socialmente Responsable de la ONU: los UNPRI de todo el mundo y el año pasado 2017 fue en Berlín con más de 1000 asistentes, 140 ponentes y 35 sesiones) y cuenta con el respaldo de los Principios para la Inversión Responsable (PRI) y la Iniciativa Financiera del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA FI).
Para lograr los requisitos del compromiso, los signatarios deben medir anualmente la huella de carbono de las acciones de sus portfolios, o al menos una parte. El Compromiso del Carbono de Montreal también considera la huella del carbono de otra categoría de activos, incluyendo el capital privado. La revelación puede ser hecha a través de un sitio web, un informe anual, informe de sostenibilidad, un informe sobre inversión responsable u otro canal de información público visible para los clientes y los beneficiarios.
El compromiso está abierto a todos los propietarios de capitales y gestores de inversión: no es necesario ser un signatario de los Principios para una Inversión Responsable (PRI, por sus siglas en inglés). Los compromisos de estos inversores permitirán que la comunidad inversora pueda comparar una cantidad creciente de portfolios con los índices mundiales de referencia, identificar campos y acciones prioritarias para reducir las emisiones y seguir los progresos de estas reducciones.
Las acciones que los inversores llevan a cabo después de medir su huella de carbono varían, desde el monitoreo regular de las emisiones a asegurar que son monitoreadas y entendidas, a invertir en las soluciones bajas en carbono, y la integración de análisis medioambientales en los procesos corrientes de inversión.
Supervisado por el PRI, ha atraído el compromiso de más de 120 inversores con más de 10 billones de dólares en activos bajo gestión, a partir de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP21) en diciembre de 2015 en París. El respaldo al Compromiso de carbono de Montreal proviene de inversores de Europa, EE.UU, Canadá, Australia, Japón, Singapur y Sudáfrica.
El Compromiso de Carbono de Montreal permite a los inversores (propietarios de activos y gestores de inversiones) formalizar su compromiso con los objetivos de la Coalición de Descarbonización de Cartera, que moviliza a los inversores para medir, divulgar y reducir la huella de carbono de su cartera. Se han comprometido más de 100.000 millonesde dólares para esto a partir de la COP21.
Se puede ver en el documento Montreal Carbon Pledge: Accelerating Investor Climate Disclosuer la implementación de los inversores un año después de la COP 21 y el reparto de los signatarios por tipo de empresa de gestión de activos de dicho compromiso según imágenes del mismo.
En junio de 2017, el Grupo de trabajo FSB sobre información financiera relacionada con el clima (TCFD-Task Force on Climate-related Financial Disclosures) publicó sus recomendaciones finales. El PRI alienta a todos los inversores a implementar la guía de divulgación de TCFD para propietarios de activos y administradores de activos, con los firmantes de Montreal Carbon Pledge bien posicionados para esto.
En enero de 2018, el PRI alineará su Marco de Informes para todos los signatarios del PRI con la orientación del TCFD, lo cual es una ayuda tener una taxonomía más consensuada entre gestoras de activos que gestionan IICs como fondos y planes de pensiones y también productos de seguro ahorro como planes de previsión asegurados, rentas vitalicias, Unit Link, etc.. de manera que los inversores tanto institucionales como minoristas estén mejor informados y con más transparencia de la actual (sin confusión de excesivas nomenclaturas similares para referirse a una misma temática) y así puedan votar con los pies, contratando los productos financieros más ajustados a la rentabilidad/riesgo de sus perfiles, pero que también contribuyan a la transición a una economía y a unos mercados financieros bajos en carbono.
Tribuna de Luis Hernández Guijarro, gestor del fondo ético Esfera II Sostenibilidad ESG Focus FI en Esfera Capital Gestión SGIIC