Mis palabras no tomarán a nadie por sorpresa: el mundo no es el que existía antes de 2008 y muy difícilmente lo volverá a ser. Especialmente si hablamos del mundo financiero.
Recordemos que, desde marzo de 2009, ante una economía raquítica, y con mercados financieros desplomándose, empezó la puesta de dinero por parte de los bancos centrales. Expansión monetaria, como se ha denominado, que ha impulsado al alza los activos financieros, con retornos en algunos casos exorbitados, y que, pasado un tiempo, han puesto a preguntarse a propios y extraños hasta dónde más pueden subir los activos en estas condiciones. Lo peor, es que nadie lo sabe.
La idea inicial de los programas de expansión monetaria podría haber sido darle un impulso a la economía, y luego empezar a recoger dinero y normalizar el tema. Pero no. Llevamos ya cerca de 8 años en el mismo tema, las tasas de interés siguen en cero (o muy cerca de ellos) y el dinero sigue saliendo. De hecho, estamos ad portas de que Japón, lance un nuevo programa de ayuda monetaria, que dependiendo cómo y cuándo, puede ser una nueva innovación en la expansión monetaria que llevamos viviendo por muchos años.
La pregunta lógica que se hace cualquier persona, en este punto podría ser: ¿y si ocurriera hoy una nueva crisis?, ¿qué harían los bancos centrales? Buena pregunta, para la que parece no haber respuesta. Empecemos con temas: después de la inflación de la década de los 70, la receta básica de los bancos centrales fue siempre una tasa de interés más baja que la del ciclo inmediatamente anterior. Así, la tasa de 1990 fue más baja que la de 1987; la de 2001 fue más baja que la de 1994; la de 2008 fue a su vez más baja que la que había en 2003. Pero hoy la tasa es cero, y con mucho dinero en la economía. Si llegara a haber una nueva crisis financiera, no pensemos en un episodio a lo 2008, sino en una corrección bien marcada, tipo 2001-2002, ¿para dónde irían los bancos centrales?
La respuesta, debo admitirlo, no la tengo; y tiendo a pensar que nadie la tiene. Quizá veríamos formas más novedosas de lo mismo, pero al final, lo mismo, es decir, tratar de estimular la economía con tasas de interés altamente negativas, como es lo que en últimas es el efecto del dinero que se lanza de forma desproporcionada a la economía.
Lo bueno de lo anterior, es que, desde el punto de vista económico, las cosas pueden funcionar si uno ve los resultados de los mercados financieros. Lo malo, es que con tanto dinero rondando en la economía, el mismo puede llevar a desequilibrios en otras partes del globo; y pongo un ejemplo: si el dinero crece a manos llenas en cualquier parte del mundo, ¿no aprovecharía un gobierno relativamente laxo fiscalmente para emitir deuda a manos llenas y tener dinero para cualquier propósito que tenga?
Sin embargo, la pregunta de fondo es que, si llevamos años con el paciente bajo la misma receta y aún no logra recuperarse plenamente, ¿qué haría el doctor si el paciente recae?
Las opiniones expresadas son responsabilidad del autor, y no representan necesariamente la posición de Old Mutual sobre los temas tratados.
Opinión de Manuel García Ospina, vicepresidente de wealth management de Old Mutual Colombia.