El Consejo de Gobierno del BCE se reunió ayer, en lo que fue la primera de una serie de reuniones de alto nivel programadas por distintos bancos centrales del mundo para los próximos días. Así, mientras Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed tienen previsto verse el 27 de julio, el Banco de Japón lo hará el 29 de julio y el Banco de Inglaterra el 4 de agosto. Estas serán fechas claves para los inversores a nivel mundial.
La experiencia del pasado nos enseña a no dar por seguro los mensajes de Draghi o del Consejo: cada vez que lo han necesitado, han conseguido sorprender al mercado y es por eso que había que estar atentos a la reunión celebrada ayer. Los estímulos monetarios están cumpliendo con sus objetivos de reducir la fragmentación de crédito que existe entre la deuda pública de los estados ‘core’ de la Unión Europea y los de la periferia. El programa tiene todavía varios meses de vida antes de expirar y, lo que es más importante, el BCE ha logrado proporcionar estabilidad tanto a la deuda pública como a la corporativa en estas últimas semanas caracterizadas por la volatilidad.
Ayer Draghi lanzó cuatro mesajes:
- No tener noticias es una buena noticia: el Consejo de Gobierno del BCE ha mantenido todos los tipos de interés oficiales y las compras de activos sin cambios. En concreto, las compras mensuales han superado, hasta ahora, el ‘objetivo’ de 80.000 millones de euros al mes. Draghiafirmó que de momento el paquete de estímulos puesto en marcha es suficiente, pero que el BCE no dudará añadir nuevas medidas si fuera necesario.
- No ha terminado hasta que se termina: inicialmente el actual programa de flexibilización iba a extenderse hasta marzo de 2017, pero Draghi ha declarado que el programa durará hasta que se vea un «ajuste sostenido de la inflación» y que si el escenario económico se deteriora de manera significativa, el Consejo de Gobierno actuaría mediante el uso de todos los instrumentos disponibles dentro de su mandato.
- «Créanme, será suficiente»: Draghi pronunció estas famosas palabras en 2012, y han vuelto a nuestra cabeza al oir ayer que como subrayaba “la disposición, voluntad y la capacidad” que tiene la actitud del BCE para hacer frente a cualquier impacto negativo del Brexit sobre la economía europea en general.
- La tasa de mora y el sector bancario: preguntado sobre las iniciativas para hacer frente a los problemas de morosidad a los que se enfrentan los bancos europeos (y en concreto los bancos italianos), Draghi dijo que las cuestiones de morosidad “llevarán algún tiempo» y, lo que es más importante, que cualquier respaldo público sería una medida útil, pero que tendría que ser «acordado con la Comisión Europea de acuerdo con las normas vigentes».
Por último, el presidente del BCE reiteró que las medidas más allá de la política monetaria corresponden a los representantes elegidos políticamente y que los gobiernos deberían apoyar el estímulo monetario con reformas dirigidas a mejorar la productividad y a mejorar el entorno empresarial.
La reacción del mercado a la reunión de hoy fue relativamente contenida: vimos los diferenciales de la deuda ‘core’ corrigiendo por la falta de «nuevas» noticia, y compartimos esta opinión. Creemos el mensaje fue, pero desde la perspectiva del mercado se le puede calificar como un ‘no-evento’.
Creemos que los inversores están ahora en un modo de «una tarea hecha, cuatro por hacer» y están a la espera de catalizadores concretos de las reuniones del FOMC, del Banco de Japón y del Banco de Inglaterra, así como los resultados de los test de estrés de la Autoridad Bancaria Europea (ABEque está previsto que se conozcan en los próximos diez días.
Tanguy Le Saout es responsable de renta fija europea de Pioneer Investments.