Todas las casas de inversión reconocen que 2019 va a ser un año importante para los inversores y su confianza en los productos de inversión. El mal comportamiento de todos los activos y productos ha hecho que pierdan dinero, incluso los inversores más conservadores. Por lo que de cara a este año lo más importante para Jorge Sanz, presidente de atl Capital, es “cómo proteger el patrimonio de los clientes”.
Durante la presentación de perspectivas para este año, Sanz ha querido destacar que el asesoramiento, la gestión activa y el análisis tendrán un papel determinante para lograr rendimientos positivos, sobre todo al abordar activos como los monetarios, los emergentes y la renta variable, donde considera que están las mejores rentabilidades ahora mismo.
“Me preocupa que la banca comercial esté tan activa en la banca privada porque no sé cómo van a plantear el asesoramiento financiero cuando su modelo de negocio está más orientado a lograr ingresos a través de sus productos, que en proteger el patrimonio del inversor”, apunta entre sus inquietudes y como parte de su reflexión sobre los retos a los que se enfrentan los gestores este año. Desde atl Capital, Sanz señala que su prioridad sigue siendo el cliente y lograr ofrecerle la máxima rentabilidad sin cambiar su perfil de riesgo.
Sanz hace hincapié en esto porque lo considera importante de cara al escenario macro que tienen los inversores. Según explica Ignacio Cantos, director de inversiones de la firma, no habrá una recesión a corto plazo, pero sí habrá que prepararse para un menor crecimiento. “No creemos que vaya a ocurrir a corto plazo, pero está claro que en algún momento llegará y habrá que estar preparo. No podemos decir que la economía mundial está en recesión cuando estamos manejando estimaciones de crecimientos en torno al 3,5% para este año y del 3,6% para 2020”, apunta Cantos.
Los indicadores macroeconómicos analizados por los gestores de atl Capital –inversión de la curva de tipos americana, tasa de desempleo y evolución de los diferenciales de créditos- que suelen adelantar una recesión económica con un periodo de anticipación de seis a 12 meses no dan señales de una recesión inminente. En sus estimaciones, ven las economías europeas creciendo en torno al 1%-1,5%, con países como España superando el 2%. En Estados Unidos, el crecimiento se sitúa en torno al 2%-2,5% y en China, se espera crecimiento estable sobre el 6%. En este entorno de desaceleración económica, la inflación no a ser ver un problema, ya que sigue claramente por debajo del objetivo marcado por Banco Central Europeo (2%) y en Estados Unidos no hay presiones inflacionistas.
Entre estos riesgos, señalan un recrudecimiento de la guerra comercial Estados Unidos-China con una escalada de los aranceles, un acuerdo de Brexit duro que generaría caídas del PIB de más del 7% en Reino Unido y arrastraría a Europa. Además, en los últimos días se ha introducido a este escenario de incertidumbre la situación de Venezuela que puede desembocar en un enfrentamiento entre Rusia y Estados Unidos, con la consiguiente subida del precio del crudo. También destacan los expertos de atl Capital dentro de este foco, un parón pronunciado en la economía China.
Oportunidades de Inversión
Los activos de riesgos tanto en mercados desarrollados como en emergentes ofrecen expectativas de rentabilidad razonable a largo plazo con lo que para los gestores de atl Capital resulta interesante ir tomando posiciones en las carteras este año. Por activos, la renta fija empieza a ofrecer valor en algunos segmentos debido al cambio que se ha registrado en este mercado en los últimos meses. “Tras un 2018 en el que se vivió una subida significativa de los diferenciales de créditos en high yield y mercados emergentes, los niveles alcanzados desde diciembre nos hacen ser optimistas con estos activos para 2019”, señala Félix López, director de atl Capital Gestión. Sin embargo, todavía no ve oportunidad investment grade.
En renta variable, los gestores de atl Capital consideran que sin una recesión en los próximos 18 meses, el mercado de renta variable remunera adecuadamente los riesgos. “El crecimiento de los beneficios empresariales va a ser más importante que nunca este año en el comportamiento de este activos. Si los beneficios de las compañías siguen creciendo, como se espera que ocurra, es extremadamente difícil que veamos un mal año en renta variable y esto hace que seamos optimistas”, señala Mario Lafuente, gestor de atl Capital.
Por áreas geográficas, Mario Lafuente ve oportunidades tanto en Europa como en Estados Unidos: “Ambas zonas presentan un atractivo importante. Estados Unidos por la calidad de sus empresas y Europa por valoraciones”. Sin embargo, dentro de la inversión en Estados Unidos, su recomendación es reducir la exposición en las carteras de pequeñas compañías y dirigir la inversión a grandes empresa americanas que presentan balances más sólidos.
Por último, otra alternativa de inversión para 2019 con expectativas atractivas a largo plazo es la renta variable emergente. “Si hay un avance en las negociaciones de la guerra comercial entre Estados Unidos y China, estos mercados pueden hacerlo muy bien y obtener un repunte importante en sus valoraciones. Al igual que en los mercados desarrollados, la evolución de los beneficios empresariales será muy importante”, subraya Lafuente, que ve potencial de revalorización por la entrada de flujos de capital hacia estos mercados, muy poco representados en las carteras.