El mundo se enfrenta a una ralentización del crecimiento y una crisis de deuda emergente. Es la tesis que maneja Ignacio de La Torre, economista jefe de Arcano, y que ha argumentado durante un encuentro con periodistas financieros. En su opinión, las tres economías mundiales más importantes, EE.UU., China y la zona euro, están sufriendo una desaceleración de su crecimiento que les ha llevado de crecer a un ritmo del 5% a hacerlo en el entorno del 3%. “En 2019 habrá sorpresas negativas en cuanto al crecimiento mundial”, afirma De la Torre.
El mundo experimentará, además, el año próximo «el principio del fin del dinero barato” como consecuencia de la subida generalizada de los tipos de interés. «Hemos pasado de tener a muy pocos bancos centrales subiendo los tipos, a una reacción mucho más global y bancos como la Fed, el banco central de México, de Turquía o de Canadá ya lo están haciendo también. Se ha acabado aquello de tipos al 0%, vamos a otro mundo”, afirma el economista jefe de Arcano.
Crisis de deuda sí o sí
De la Torre se muestra convencido de que «tendremos una crisis de deuda sí o sí» y su epicentro serán los países emergentes. «Mientras los países desarrollados han reducido su deuda, los emergentes la han aumentado y más de un 100% de la deuda mundial ya se genera en estos países. Esta crisis vendrá motivada por dos factores: la imposibilidad de los emergentes para pagar sus deudas y una desaceleración del crecimiento en China», explica el experto.
La explicación, añade, está en que la mayoría de los países emergentes, como Argentina o Turquía, «invirtieron en dólares porque en su momento era más barato». El problema ha llegado con la escasez de esta divisa, que ha provocado que el valor se dispare y como consecuencia, ha imposibilitado aún más que estos países rebajen su deuda.
Por otro lado, China ya está mostrando los síntomas de un agotamiento en su crecimiento y su gran esperanza, que reside en el consumo, no está funcionando. «Si China produce menos, importará menos materias primas desde los emergentes y sus síntomas se contagiarán. Este problema va a generar una crisis doméstica, bancaria y económica, aunque nada parecido a la crisis de 2007», afirma De la Torre.
España, favorita
La economía occidental será la más estable y, aunque en la zona euro el crecimiento también sufrirá ese descenso, la situación es favorable. «Los dos focos que podrían generar más incertidumbre, Italia y el Brexit, tendrán efectos mitigados y muy acotados en la economía europea», señala De la Torre. Eso sí, si hay que elegir un país favorito, para Arcano ese es España: “La virtud de España es que el PIB está creciendo más que la deuda y es una de las pocas economías del mundo que no está dependiendo de la deuda para crecer”, afirma.
Eso sí, el economista jefe de Arcano pronostica que España sufre un gran riesgo de robotización de la economía. «Cuanto menos creativo sea el trabajo, más fácil es robotizarlo. En España existe un gran riesgo de robotización», concluye.