Los fondos de deuda de real estate privados han estado registrando entradas de flujos de capital sin precedentes en este tipo de estrategias durante 2017 y 2018. Esto hace que los fund managers tengan ahora más capacidad disponible para implementar que nunca.
Según un análisis de Preqin, 2017 fue un año récord de recaudación de fondos. Solo 63 fondos de los estudiados por la firma recaudaron más de 32.000 millones de dólares, un aumento significativo con respecto al récord anterior situado en 25.000 millones de dólares y marcado en 2014.
Todo parece indicar que este año la industria volverá a ver los niveles récord observados el año pasado. Desde el primer al tercer trimestre del año, según el estudio, 40 fondos han recaudado 21.000 millones de dólares.
Esta ‘potencia de fuego’ disponible para los fondos de deuda ha alcanzado un nuevo récord de 57.000 millones de dólares en octubre, frente a los 50.000 millones de dólares de finales de 2017.
Sin embargo, incluso pese a que la deuda de real estate ha crecido, el interés de los inversores por estrategias de este tipo ha caído. Si en junio de 2017, más de un cuarto (26%) de los inversores declaraban que destinarían parte de su capital a estas estrategias en los próximos 12 meses, un año después, en junio de 2018, solo el 6% de los inversores planeaba incorporar estas estrategias durante el próximo año.
“La deuda privada de real estate ha atraído un interés sustancial en los últimos años, impulsando estas estrategias para ver una fuerte actividad de recaudación de fondos y registrar altos niveles de capital para implementar. De hecho, durante la última década, la deuda de real estate pasó de representar una décima parte del total de capacidad al 20%. Los fondos de deuda de bienes raíces han sido anunciados en el pasado por sus altos rendimientos ajustados al riesgo y sus flujos de ingresos estables, pero recientemente los inversores parecen estar buscando inversiones de capital», explica Tom Carr, responsable de Real Estate de Preqin.