Durante la última semana, la volatilidad ha aumentado marcadamente en la zona euro como reacción a los acontecimientos en la política italiana. El 21 de mayo, el Movimiento Cinco Estrellas y la Liga, los ganadores de las elecciones legislativas de Italia del 4 de marzo, llegaron a un acuerdo sobre una plataforma común y acordaron que Giuseppe Conti sería el próximo primer ministro del país.
Este intento de los partidos populistas de formar un gobierno no llegó a ningún sitio después de que Sergio Mattarella, presidente de la República, bloqueara la nominación de un ministro de finanzas de corte euroescéptico. Ahora, explica BNP Paribas AM, los políticos italianos se encaminan a nombrar un gobierno de transición que guíe al país hacia nuevas elecciones.
“Y como resultado de este contexto de incertidumbre, el spread de la prima de riesgo entre los bonos del gobierno a 10 años de Italia y Alemania se ha ampliado abruptamente a más de 260 puntos básicos, su nivel más grande desde el verano de 2017. El euro también sufre y se ha llegado a cambiar con el dólar en las dos últimas sesiones por debajo del nivel de 1,16”, explican los expertos de la firma.
Para BNP Paribas AM, queda por ver cómo evolucionarán estas cuestiones a partir de ahora, pero está claro que los inversores están cada vez más nerviosos. La prima de riesgo actual (diferencial) entre los rendimientos de los bonos soberanos a 10 años en Italia y Alemania está lejos del nivel de alrededor de 525 puntos básicos a finales de julio de 2012, cuando Mario Draghi declaró que el BCE estaba listo para hacer «lo que fuera necesario» para preservar el euro .
“Es demasiado pronto para decir cómo se resolverán las cosas, pero podemos enfrentarnos a una rigurosa prueba de estrés tanto del entorno de riesgo como del entorno económico, el último de los cuales sigue siendo ampliamente favorable a pesar de la reciente desaceleración de la actividad”, concluye la gestora.