A pesar de los muchos riesgos económicos y geopolíticos del mundo actual, la volatilidad en los mercados ha sido notablemente moderada. Así lo cree Duncan Lamont, responsable de Research and Analytics de Schroders.
El índice Vix, conocido por medir el miedo, ha retrocedido recientemente a un nivel de alrededor de 10 y el experto considera que esto es excepcionalmente bajo en comparación con los estándares del largo plazo y se sitúa sólo por encima del mínimo histórico de 9 registrado en 1993. Hay que tener en cuenta que el nivel medio desde 1990 es de 20.
El Vix refleja la cantidad de volatilidad que los operadores esperan para el S&P 500 durante los próximos 30 días.
“La reciente calma en los mercados ha levantado las alarma entre los inversores en un momento en el que se teme que hay un exceso de complacencia.Sin embargo, si analizamos la evolución, los inversores habrían sido imprudentes al vender acciones sólo sobre la base de que el índice Vix tiene una cifra baja ahora mismo”, explica.
El gráfico siguiente muestra cómo ha funcionado el S&P 500 cuando el Vix ha estado en diferentes percentiles de su historia. Por ejemplo, el 5% del tiempo, el Vix ha estado por debajo de 11,6 y otro 5% ha estado entre 11,6 y 12,2, y así sucesivamente. Este desglose nos permite obtener los datos más significativos.
Cuando el Vix ha estado en su 5% más bajo de las cifras (en un nivel de 11,6 o menos), el S&P 500 ha generado históricamente un rendimiento medio del 11% durante los 12 meses siguientes, según el análisis llevado a cabo por Schroders.
“En lugar de predecir fatalidades, un Vix bajo se ha asociado con retornos bastante saludables. No tan saludables como cuando el Vix ha sido ligeramente superior, pero aún así, se pueden considerar buenos”, apunta Lamont.
Por el contrario, dice, el peor momento para comprar acciones ha sido realmente cuando el Vix ha estado relativamente alto. Típicamente, el Vix repunta cuando los mercados caen. Cuando el Vix se sitúa en el entorno de los 20, el cuchillo ha estado cayendo y los inversores que compraron entonces han sufrido las consecuencias.
“Es cuando los inversores se vuelven histéricos –cuando el Vix se sitúa en alrededor de 30 o más– cuando los valientes de corazón obtienen los mejores retornos. El viejo adagio de que los inversores deben ser codiciosos cuando otros son temerosos brilla claramente aquí”, afirma el responsable de Research and Analytics de Schroders.
“Al igual que con cualquier inversión, el pasado no es necesariamente una guía para el futuro, pero la historia sugiere que los inversores serían imprudentes si tomaran sus decisiones de inversión solamente sobre la base de niveles moderados de volatilidad”, concluye.