Renta 4 ha lanzado un nuevo servicio para que los ahorradores puedan invertir su dinero en un fondo de inversión de forma “simple, manteniendo la liquidez y con un riesgo reducido”, según ha descrito Juan Carlos Ureta, presidente de Renta 4 Banco. La entidad propone un producto, llamado Foncuenta, que se activa desde una cuenta corriente, que ha sido previamente abierta por el ahorrador en Renta 4, cuyo saldo líquido pasa inmediatamente al fondo de inversión Renta 4 Foncuenta Ahorro FI.
Según explica Ignacio Victoriano, gestor de este fondo y de renta fija de Renta 4 Gestora, se trata de un fondo de corte conservador de renta fija a corto plazo, con una duración de 18 meses, de gestión flexible y baja volatilidad. “El fondo estará invertido en un 80% en deuda investment grade y hasta un 20% en bonos high yield. Tendrá exposición a países de la Unión Europea y de la OCD y marginalmente a países emergentes. El riesgo para el inversor será, según la calificación de la CNMV, de 2 sobre 7”, afirma.
Victoriano reconoce que se trata de un producto muy conservador para que cualquier ahorrador se sienta cómodo teniendo una primera experiencia invirtiendo en un fondo; lo que explica la composición de la cartera. “Teniendo en cuenta el contexto actual de tipos y que este fondo pretende mantener una volatilidad muy baja, podremos encontrar algunas oportunidades en la renta fija a través de deuda híbrida, emisiones bancarias, bonos a tipos de interés flotantes y cierta renta fija privada -crédito- a corto plazo”, señala.
El banco no se ha marcado objetivos en cuanto al número de suscriptores, volumen de patrimonio gestionado o rentabilidad del fondo. Sobre esto último Victoriano apunta que el objetivo es “lograr una rentabilidad superior a lo que puede ofrecer una cuenta corriente remunerada”. Respecto a la operativa del fondo, aclara que es igual que un fondo de renta fija.
Desde la entidad insisten en explicar que el servicio Foncuenta no es una cuenta corriente, ni un depósito vinculado a un fondo, sino un concepto basado en que el cliente ingresa el dinero que quiere invertir en una cuenta y desde ella se activa la inversión en el fondo. El proceso de activación parte de un simple click y, a partir de 200 euros, el dinero se traspasa automáticamente al fondo.
De la misma forma, si se quiere disponer del dinero invertido, simplemente se puede hacer ordenando una transferencia desde la cuenta y, de forma automática la entidad anticipa el importe, hasta el 90% del patrimonio. Según puntualiza Victoriano, “el banco adelanta ese importe, mientras se ejecuta al mismo tiempo una orden de reembolso. En este sentido, funciona igual que cualquier otro fondo”.
Educación financiera
La liquidez y la baja volatilidad del fondo son las dos principales ventajas de este servicio, según Ureta, porque “están pensadas para que los ahorradores se atrevan a invertir en fondos”. Desde Renta 4 señalan que han constatado que el ahorrador español está comenzando a dar sus primeros pasos en el mundo de la inversión como consecuencia de los bajos tipos de interés y al comprobar que los productos tradicionales que tienen contratados no ofrecen rentabilidades atractivas.
“Es una cuestión de cultura. Tomando como referencia los datos del Banco de España, los depósitos suponen el 42,2% de la riqueza financiera de las familias; en cambio en Europa suponen el 29,6%, es decir entre 12 y 13 puntos básicos de diferencia. Estamos todavía lejos de los estándares europeos de que el ahorrador entienda el ahorro desde una mayor diversificación”, apunta Ureta.
En este sentido, Renta 4 ha manifestado un fuerte compromiso por mejorar la cultura financiera de los ahorradores, además de impulsar en ellos ese salto hacia la inversión. Por eso, el servicio Foncuenta que ha creado cuenta además con el Programa de ahorrador a inversor, que aporta al cliente cursos presenciales, charlas online, guías básicas para la inversión, el seguimiento del fondo y la asignación de un asesor personal.