Dado el importante crecimiento de los roboadvisors -aquellos que usan algoritmos informáticos para proporcionar servicios de asesoramiento de inversión digitalmente-, la Comisión de Bolsa y Valores estadounidense (SEC) ha presentado dos publicaciones con información y orientación sobre estos, dirigidas a la industria de servicios financieros y a los inversores, respectivamente.
Una primera publicación pretende guiar a los roboadvisors –dadas sus características únicas- con sugerencias sobre las obligaciones de información legal, adecuación y cumplimiento normativo en virtud del Investment Advisers Act de 1940.
La segunda publicación es un boletín para inversores, editado por la Oficina de educación y defensa de inversores de la SEC, y dirigido a inversores individuales, a los que proporciona información que pudieran necesitar para tomar decisiones informadas si considerasen la utilización de roboadvisors. Entre los puntos que el inversor debe consideran destaca: el nivel de interacción humana que el inversor considera importante; la información que el roboadvisor utiliza en la formulación de recomendaciones; el enfoque del roboadvisor para invertir; los honorarios y cargos involucrados.
«Con la mejora de la tecnología y los profundos cambios que provoca en la industria de los servicios financieros, es importante que los reguladores evalúen su impacto en los mercados estadounidenses y ofrezcan orientación completa a aquellos que participan en el mercado», declara Michael Piwowar, presidente en funciones de la SEC. «Esta información está diseñada para ayudar a los inversores a aprovechar las oportunidades que las fintech pueden proporcionar, a la vez que garantiza equidad y protege a los inversores».
Los inversores pueden usar la base de datos IAPD (Investment Adviser Public Disclosure) de la SEC, alojada en investor.gov, para investigar los antecedentes –incluyendo registro, licencias e historial disciplinario- de cualquier individuo o empresa que recomiende una inversión, incluyendo a los roboadvisors, que suelen estar registrados como asesores de inversiones ante la SEC, o ante otra u otras autoridades estatales de valores.
Los roboadvisors, como asesores de inversiones registrados, están sujetos a las obligaciones sustantivas y fiduciarias del Advisors Act (Ley de asesores). La guía actualizada señala que puede haber diferentes medios para que un roboadvisor cumpla con sus obligaciones para con los clientes bajo el Advisors Act y que no todos los asuntos tratados en ella serán aplicables a todos los roboadvisors.
Ambas publicaciones dan seguimiento al Foro Fintech organizado por la Comisión, celebrado el 14 de noviembre de 2016, que incluyó una mesa redonda sobre roboadvisors, y han podido ser elaboradas gracias a la contribución de Rochelle Kauffman Plesset y Robert Shapiro.