Según el último informe publicado por Thomson Reuters Lipper, la industria de ETFs europea disfrutó de una creciente popularidad entre todos los tipos de inversores en 2016. Esta popularidad también ha sido vista en el desarrollo de los activos bajo gestión, activos que se incrementaron por quinto año consecutivo y que marcaron un nuevo máximo histórico dentro de la industria europea de ETFs, alcanzando los 514.500 millones de euros a finales de diciembre.
Con respecto al número total de productos, no es una sorpresa que los fondos ETF de renta variable, con 364.000 millones de euros, recogieran la gran mayoría de los activos, seguidos de los fondos de renta fija, con 132.000 millones de euros, los productos de materias primas, con 15.900 millones de euros, y dentro de la categoría ‘otros’, unos 6.500 millones de euros. Por último, la categoría de mercado de dinero, con 2.900 millones de euros, y las categorías de activos-mixtos y productos alternativos UCITS, que gestionaron 400 millones de euros cada una.
También como cabría esperar, los promotores de ETFs disfrutaron de flujos netos de entrada en 2016 que estuvieron por debajo de los flujos de entradas de 2015, pero siguen por encima de la media a largo plazo. En conjunto, el impacto positivo del mercado en combinación con los flujos netos llevó a un incremento en el volumen de activos gestionado por la industria europea de ETF, que cerró el año con 514.500 millones de euros en diciembre. Por encima de los 448.200 millones de euros alcanzados en 2015. El incremento total de 66.300 millones de euros que experimentó la industria en 2016, se debió principalmente a las ventas netas, que incrementaron en 37.700 millones de euros, mientras que el rendimiento de los mercados añadió unos 28.700 millones de euros al incremento de los activos bajo gestión en el segmento de los ETFs.
Flujo de fondos por clase de activo
Los ETFs de renta fija, con un incremento de 19.100 millones, fueron la clase de activo dentro del segmento de ETFs europeos que durante el transcurso del año experimentaron unas mayores ventas. La renta variable fue la segunda clase de activo más vendida, con 15.500 millones de euros. Después, las materias primas, con 2.600 millones, seguido de la clase ‘otros’, con 1.600 millones de euros,
En el lado opuesto de la clasificación los ETF de mercado de dinero mostraron el mayor número de salidas del año, con 700 millones de euros, seguidos de cerca por los activos alternativos, con 400 millones en salidas de flujos, y los activos mixtos, con 9 millones. Las entradas en renta variable son reseñables, ya que los competidores en gestión activa mostraron flujos netos negativos al cierre del año. Incluso aunque esto ya había sucedido hasta un cierto punto, 2016 podría marcar un punto de inflexión en el comportamiento del inversor con respecto a los instrumentos de gestión pasiva.
La industria de ETFs continúa estando altamente concentrada
Mientras el nivel de activos de algunos ETFs en el mercado europeo es tan bajo que corren el riesgo de que sean cerrados en un futuro próximo, por la falta de interés de los inversores hacia ese producto, otros ETFs, en cambio, cuentan con un volumen de activos muy elevado, haciendo evidente el nivel de concentración de la industria. Tan solo 19 de los 48 promotores de ETFs en Europa mantienen activos por encima del nivel de los 1.000 millones de euros. El mayor promotor europeo, que sigue siendo iShares con un 48,71% de los activos totales del mercado, está muy por encima del promotor número dos, db x-trackers, con 53.300 millones de euros, y del tercer promotor, Lyxor ETF con 51.000 millones.