El grupo chino Fosun anunció la compra de la firma brasileña de gestión de fondos Rio Bravo Investimentos, en la primera gran adquisición que realiza el conglomerado chino en América Latina.
Fosun no indicó el valor del acuerdo, pero dijo a través de un comunicado que esperaba beneficiarse del «excepcional período de cambio y renovación económica» que se está desarrollando no sólo en Brasil, sino también en los países vecinos, según indicó la publicación Reuters.
Brasil está luchando por mantenerse a flote en la convulsión actual y la acusada recesión económica prolongada en el tiempo, que, acompañada de una alta inflación, una tasa alta tasa de desempleo y una débil moneda, están azotando el país. El sector de bienes raíces se ha visto afectado directamente, una caída del 20% de los precios de los bienes inmuebles fue registrada en 2015, según la agencia de calificación Moody’s, que además alertó que la industria continuaría bajo presión al menos hasta el 2017. Pero para el inversor oportunista de bienes raíces, generalmente, las malas noticias son buenas noticias, dado el potencial para encontrar compras a precio de ganga e invertir en empresas en apuros durante los ciclos a la baja.
Rio Bravo Investimentos tiene su base en Sao Paulo y gestiona cerca de 10.000 millones de reales (unos 3.000 millones de dólares) en dinero de sus clientes en fondos líquidos, bienes raíces e inversión privada.
Fosun se ha convertido en el mayor conglomerado privado de China y tiene intereses en una gama amplia de empresas, desde firmas médicas hasta el grupo francés Club Med.
«Geográficamente, Brasil es una vía que conecta América Latina y Asia«, dijo en el comunicado Guo Guangchang, fundador de Fosun. «Con características económicas que la distinguen y un gran tamaño, Brasil tiene una fuerte influencia en la región».
Guo agregó que la adquisición significa un hito importante en el establecimiento de la estrategia de globalización de Fosun, que busca marcar presencia en importantes economías emergentes.