Julius Baer Gestión, la sociedad gestora en España del banco privado Julius Baer que dirige Pelayo Gil-Turner, ha registrado en la CNMV un fondo de inversión que sigue criterios éticos y solidarios bajo los principios católicos y que estará disponible para clientes de Julius Baer.
Según la información de la CNMV, se trata de un fondo de renta variable mixta internacional, Temperantia; una solución de inversión socialmente responsable creada para responder las necesidades de los clientes de Julius Baer y ofrecerles el mejor asesoramiento en cuanto a criterios ESG (Environmental, Social and Governance).
Temperantia está pensado para entidades y personas que tienen sensibilidad católica también en la gestión de su patrimonio. Este vehículo de inversión cumple así los requisitos de un grupo de clientes de Julius Baer, ofreciéndoles por un lado un asesoramiento financiero que les permite alinear con responsabilidad sus inversiones con sus creencias y, por otro, un vehículo financiero transparente y eficiente que les ayuda a canalizar esas inversiones. De esta forma, obtienen no sólo una rentabilidad económica sino también un impacto social directo y medible.
Temperantia aplica criterios excluyentes y valorativos basados en la Doctrina Social de la Iglesia Católica. Para dotar de una mayor profesionalidad y objetividad a la selección de inversiones, su estrategia se apoya en las directrices de inversión socialmente responsable elaboradas por la agencia internacional MSCI Research bajo el programa MSCI Catholic Values Screening Research, el cual sigue los parámetros de inversión socialmente responsable de la Conferencia Episcopal Americana, actualmente una de las instituciones católicas de referencia en este campo.. Asimismo, Temperantia no invierte en compañías con una calificación inferior a “A” desde el punto de vista ESG.
Esta solución de inversión de Julius Baer contempla la aportación de un donativo anual que será puesto al servicio de las personas, financiando de forma directa proyectos de Iglesia basados en los siguientes tres pilares: Oración (Ora), Misión (Missio, Labora) y Formación (Formatio). Las entidades beneficiarias encargadas de canalizar el donativo hacia los proyectos son Ayuda a la Iglesia Necesitada y la Fundación DeClausura. Además, Temperantia busca promover la trasparencia y la corresponsabilidad hacia los propietarios del patrimonio invertido. Así, el inversor podrá saber cuánto dinero y en qué proyectos específicos irá destinado el donativo generado por el fondo, además del impacto social obtenido.
Temperantia no es un fondo solidario al uso ya que las entidades beneficiarias no recibirán el donativo únicamente de la comisión de gestión de Julius Baer Gestión, sino que los propios inversores podrán cursar de manera voluntaria órdenes periódicas de reembolsos (un pago anual similar al que realizan los Endowments americanos) y destinar directamente una parte de ese reembolso anual como donativo a las entidades beneficiarias. De esta manera, los inversores se convierten en partícipes directos de los proyectos financiados, recibiendo un informe anual que realizarán las entidades beneficiarias del fondo explicando los proyectos financiados. También podrán participar en las “visitas de campo” que organicen las entidades beneficiarias y que les permitan conocer en primera persona los proyectos en los que han participado.
Como referente internacional en banca privada con más de 125 años de historia, Julius Baer cuenta con una plataforma abierta de productos, donde se incluirá a Temperantia, que ofrece en exclusiva las mejores opciones de inversión a sus clientes. Una herramienta que les posiciona como marca de prestigio en la gestión patrimonial, volcada en ofrecer un servicio personalizado, innovador e independiente a sus clientes.