Fundado en Ginebra en 1819, Mirabaud, grupo de dimensión internacional con actividad en el sector bancario y financiero, cumple en 2019 doscientos años. Un bicentenario en cuya celebración la entidad quiere poner un acento especial en el compromiso con el arte que siempre le ha caracterizado. Con este objetivo, Mirabaud ha puesto en marcha un conjunto de iniciativas para favorecer el acceso al arte y la cultura al mayor número posible de personas y que se desarrollarán a lo largo del año en Suiza y España, país en el que la entidad tiene un mayor número de sedes, concretamente cuatro, en las ciudades de Madrid, Barcelona, Sevilla y Valencia.
Es en este marco en el que hay que situar la decisión de Mirabaud de colaborar con el Museo del Prado, que también cumple 200 años en el presente ejercicio, para hacer posible la muestra “Alberto Giacometti en el Prado”, abierta al público desde hace unos días. «Nos pareció una idea formidable apoyar esta exposición, que permite al gran público acceder a la obra de Alberto Giacometti, uno de los artistas suizos más reconocidos y de los mayores exponentes del surrealismo, y hacerlo en uno de los museos más importantes del mundo en el que, además, la obra de Giacometti nunca había tenido presencia», explica Lionel Aeschlimann, socio gestor del Grupo Mirabaud y CEO de Mirabaud Asset Management. «Será una oportunidad única de asistir al diálogo entre las obras de este artista del siglo XX y algunas de las piezas más emblemáticas de la magnífica colección de El Prado», añade Aeschlimann.
Dentro de los actos de celebración de su bicentenario, Mirabaud anuncia también su apoyo al programa global A.R.T.E.S (Art-Research-Technology-Ethnoeducation-Sound) de la Fundación Cerezales Antonino y Cinia, un innovador centro de investigación, producción y difusión de la cultura que trabaja en un contexto de transferencia de conocimientos enclavado en el medio rural. Se trata de un proyecto que, como explica Lionel Aeschlimann, “ha captado poderosamente la atención del Grupo Mirabaud ya que coincide plenamente con la visión que la entidad tiene de la expresión artística como fiel reflejo de la sociedad y uno de los más ricos testigos de nuestra historia pasada y presente». «Con este acuerdo también damos nuestro pleno apoyo al objetivo de hacer que la cultura sea accesible a las personas que viven lejos de las grandes ciudades», concluye el directivo.
Ubicada desde 2008 en las antiguas escuelas de Cerezales del Condado, población situada a 30 kilómetros de León, la Fundación mantiene distintas líneas de trabajo e investigación en torno a tres ejes fundamentales: arte y cultura contemporáneas, sonido y etnoeducación. Despliega sus vías de acción a través de exposiciones, conciertos, talleres, seminarios, proyectos en residencia, producciones propias, coproducciones con otras instituciones y agentes, así como mediante proyectos en relación con el estudio, la consolidación y el respeto al entorno como modo de abordar una idea de ecología en el más amplio sentido, capaz de aproximarnos a la complejidad de todo tipo de procesos que afectan a la vida y al modo de habitar el planeta.
La colección de arte Mirabaud reúne a nuevos artistas con firmas consagradas
El especial interés de Mirabaud por el arte y por cohesionar tradición y modernidad viene de lejos. De hecho, el Grupo Mirabaud, en su vocación por tender un puente entre ambas y con el mismo enfoque de visión a largo plazo que aplica a su estilo de gestión financiera, ha reunido ejemplos relevantes de artistas contemporáneos con obras de siglos pasados dando lugar a una importante colección de arte que incluye tanto jóvenes talentos como figuras reconocidas de diferentes épocas, con firmas como, entre otras, Olafur Eliasson, Marina Abramovic, Fischli / Weiss, Ugo Rondinone, Not Vital o Nan Goldin y con una clara apuesta también por artistas españoles, contando con obra de Daniel Canogar, Carmen Calvo, José María Sicilia y José Guerrero.
Democratizando el acceso al arte
Fuera de nuestras fronteras, el bicentenario de Mirabaud es el hito elegido por la entidad para abordar la ambiciosa iniciativa de colaborar para que la entrada al Museo de Arte Moderno y Contemporáneo (MAMCO) de Ginebra, del que es socio, sea gratuita durante todo 2019. Gracias a la subvención excepcional afrontada por Mirabaud, el acceso al MAMCO, que habitualmente implica un coste de 15 francos suizos, no implicará desembolso alguno para los visitantes del centro, sin excepción, hasta el 31 de diciembre de 2019.
La que nació como una banca familiar especializada en gestión patrimonial se ha convertido en un grupo internacional con 700 empleados y oficinas en diferentes ciudades de Suiza, Europa, Canadá, Emiratos Árabes Unidos y América Latina que ofrece a sus clientes, tanto privados como institucionales, servicios de banca privada, de asset management y de securities. El grupo, que abandera un servicio al cliente basado en la solidez, la exclusividad y la personalización, siempre ha sido un actor comprometido con la proyección del arte, la cultura y el deporte.
Desde Mirabaud afirman colaborar con diferentes entidades y acontecimientos, entre ellos el Bol d’Or Mirabaud, el festival ‘Geneva Lux’, la asociación Quartier des Bains, Geneva.art, la Feria Internacional de Arte Contemporáneo (Fiac) de París o el Zurich Art Weekend, foro público que implica a museos, entidades y galerías durante un fin de semana en la ciudad helvética. Mirabaud también organiza diferentes ciclos de conciertos bajo la prestigiosa batuta de Joji Hattori en las ciudades en las que la entidad está presente. En este marco se contextualiza, por ejemplo, el patrocinio que desarrolló Mirabaud durante dos años para la Orquesta Sinfónica de las Islas Baleares, una prueba más de su compromiso con el arte, en este caso con la música clásica.