¿Te imaginas que te toca el premio ‘Gordo’ de la Lotería de Navidad? Como cada año por estas fechas, EFPA España ha elaborado un documento didáctico para repasar algunas recomendaciones a la hora de gestionar el premio, con el objetivo de sacar la mayor rentabilidad al premio y evitar que se pueda convertir en un problema.
1. Mantén la cautela. No tomes ninguna decisión precipitada. Lo primero, debes acudir a un notario a compulsar el boleto premiado. Si el importe asciende a más de 3.000 euros, no lo podrás cobrar en una Administración, así que deberás acercarte a una entidad bancaria concertada.
2. Ten en cuenta los impuestos que tendrás que asumir. Todos lospremios de Loterías y Apuestas del Estado que superan la cantidad de 2.500 euros tienen un gravamen especial del 20%. De este modo, el importe neto del premio ‘Gordo’ de Navidad (400.000 euros por un décimo), tras el pago de impuestos, ascendería a 320.000 euros. Este gravamen es retenido por la misma entidad de Loterías que abone el premio, y dicha retención constituye la tributación definitiva, de manera que no se debe incluir de nuevo en la declaración del IRPF del año 2015. También debes tener en cuenta que el premio computará en el Impuesto de Patrimonio te afectará, tanto si lo inviertes, como si lo mantienes en efectivo.
3. Revisa si te merece la pena amortizar algún préstamo. Cada caso es distinto, según tu situación financiera. Si cuentas con una financiación adecuada, en términos de costes, plazos o saldo pendiente de amortizar, no hace falta que vayas corriendo a levantar el préstamo. Existen algunas inversiones pueden rendirte por encima del coste de nuestro préstamo.
4. Analiza todas las alternativas de inversión. No te precipites y evita caer en la trampa de contratar un producto ‘gancho’. En un entorno de tipos bajos como el actual, lo primero que debes tener en cuenta es que, si asumes un mayor riesgo, podrás obtener una mayor rentabilidad. En todo caso, no existe el producto perfecto, ya que depende de tu perfil inversor. Ten en cuenta la fiscalidad y las características de cada vehículo de inversión. Por poner un ejemplo, los fondos de inversión permiten traspasar el dinero más las ganancias de un fondo a otro sin tener que pagar.
5. Abre un plan de pensiones. A estas alturas ya no hay discusión sobre la importancia de complementar la pensión pública con un plan privado, si queremos mantener nuestro poder adquisitivo en el momento de la jubilación. Si no lo has hecho antes, es un buen momento para abrir un plan de pensiones. Cuanto antes empieces a ahorrar para la jubilación, menor será el esfuerzo y mayor margen tendrás para asumir riesgos que aparejen una mayor rentabilidad con un plan de pensiones podrás obtener alguna ventaja fiscal, pero puedes también ahorrar con un fondo de inversión u otro producto. En todo caso, alerta con los gastos que comporta busca alguno que te recomienden con un buen rendimiento y bajas comisiones.
6. Acude a un asesor financiero cualificado. Un asesor financiero cualificado conoce todas las circunstancias de los mercados y los productos a disposición de un ahorrador por lo que te ayudará a adecuar las inversiones que mejor se adapten a tus circunstancias, teniendo en cuenta el horizonte temporal y tu perfil de riesgo.
7. Invierte en el largo plazo. Invertir a corto plazo es igual a especular, por eso es necesario que tu asesor trace contigo un plan a largo plazo y te acompañe en la planificación de tus finanzas personales, realizando un seguimiento continuo para controlar la inversión y realizar los cambios necesarios en la cartera de productos, según las circunstancias.