Una misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visitó Managua del 20 al 29 de octubre del 2015 concluyó que las perspectivas macroeconómicas de Nicaragua son positivas; sin embargo enfatizó en la necesidad de reforzar las políticas macroeconómicas en algunas áreas para crear un espacio que permita enfrentar vulnerabilidades fiscales y externas.
La misión examinó la evolución económica reciente y discutió las perspectivas económicas de Nicaragua en sus reuniones con autoridades del Banco Central, el Ministerio de Hacienda y Crédito Público, y otros miembros del gabinete económico, así como con miembros de la comisión económica de la Asamblea Nacional, líderes empresariales y sindicales, grupos académicos y representantes de centros de análisis económico.
Gerardo Peraza, quien encabezó la misión, comentó que “Nicaragua continúa teniendo un desempeño económico favorable. El crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en los últimos tres años ha promediado el 4,8% y es de los más altos en la región”. Concluyeron que el año pasado se vieron sanos indicadores en deuda, con una reducción del 2,2% en la deuda pública así como el que el déficit de la cuenta corriente externa se redujo del 11% al 7% del PIB y las reservas internacionales aumentaron al equivalente de 4,1 meses de importaciones excluyendo las importaciones de zona franca.
De cara al futuro, se estima que el crecimiento del PIB en 2015 será del 4% con una inflación del 3,5%. Sin embargo, se estima que el déficit y la deuda del sector público consolidado subirán al 2,7% y 42,5% del PIB, respectivamente. También se proyecta un aumento en el déficit de la cuenta corriente al 8% del PIB “pero la cobertura de reservas internacionales se mantendrá estable. Para el mediano plazo, la misión proyecta en su escenario base que el crecimiento del PIB convergerá a su nivel potencial (alrededor del 4%) con inflación aproximadamente del 7%”.
La misión sugirió un esfuerzo fiscal adicional en 2017 a fin de crear espacio fiscal en caso que las vulnerabilidades fiscales y externas se materialicen; medidas posibles a considerar incluyen una reducción en las exoneraciones fiscales y una mayor focalización de los subsidios eléctricos a los hogares más pobres. Hacia adelante, la misión recomienda identificar medidas económicas para fortalecer la viabilidad financiera del instituto nacional de seguridad social y continuar con el compromiso de mantener un nivel adecuado de reservas internacionales como objetivo principal de la política macroeconómica. «Esto es de crucial importancia para reducir la vulnerabilidad de la economía nicaragüense a desaceleraciones en la economía mundial o a cambios abruptos en los términos de intercambio o en la disponibilidad de financiamiento externo. La misión ve con beneplácito los esfuerzos del banco central para fortalecer el manejo de liquidez de corto plazo en el sistema financiero. Además, las autoridades deben seguir monitoreando el crecimiento de la cartera de crédito y fortaleciendo la supervisión bancaria», comentó Peraza.
La misión también recomienda continuar con el fortalecimiento de los mecanismos para mejorar la recolección de datos; los procedimientos para monitorear la calidad de las estadísticas; y la estrategia de comunicación y reiteró su compromiso de continuar asistiendo a las autoridades en dichos esfuerzos de fortalecimiento.