Las métricas de valoración son un foco esencial para muchos inversores a la hora de decidir si es el buen momento de comprar acciones de una empresa o del mercado bursátil, pero Rob Marshall-Lee, de Newton, parte de BNY Mellon, cree que se confía demasiado en los conocidos ratios precio-beneficios.
«No tengo miedo de invertir en empresas que quizás puedan ser consideradas caras. Si tomamos el ejemplo de la empresa multimedia Tencent, en 2008 su cotización era de 25 veces las previsiones de ganancias y actualmente tiene la misma valoración, pero durante ese periodo su tamaño se ha multiplicado por 10. Tiene un historial de crecimiento fuerte y reanaliza constantemente sus mercados potenciales para maximizar beneficios en un área de alto crecimiento”, asegura el líder del equipo de equity en mercados emergentes y asiáticos en Newton.
Para Marshall-Lee, la ineficiencia del ratio precio-beneficios como métrica de valoración es clara desde hace tiempo: «La parte vendedora no es creativa a la hora de reinvertir el dinero de buenas empresas con buen potencial, el mercado intenta que la valoración crezca pero a menudo ignora completamente los ciclos de margen a largo plazo ligados a los ciclos crediticios». Estima que los beneficios y el crecimiento de la empresa suelen ser altos cuando la actividad económica es dinámica y la disponibilidad crediticia va en aumento o ya está alta, y viceversa.
La India es uno de los mercados más sobreponderados en la estrategia Global Emerging Markets (Mercados Emergentes Globales) de Newton (BNY Mellon), frente al índice comparativo (el índice MSCI de Mercados Emergentes), porque los márgenes y la disponibilidad crediticia en el país están en niveles bajos cíclicos y él cree que ambos crecerán a futuro. En el extremo opuesto, opina que los márgenes en EE.UU. están en máximos históricos y que los inversores deberían de tener esto en cuenta al utilizar múltiplos para las valoraciones.
«Los ratios precio-beneficios pueden verse ayudados por el exceso de apalancamiento de deuda en el balance. Preferiríamos tener en cuenta las tasas de crecimiento y márgenes a lo largo del ciclo basados en nuestras expectativas para una empresa.» Y utiliza los conceptos de Newton para ayudar a reducir el ruido del mercado (sea positivo o negativo) en una empresa, sector o país y mantener una perspectiva multianual.
Evitar métricas «obsoletas»
Los conceptos «Efectos Netos» y «Revolución Inteligente» examinan los diferentes impactos de Internet en los modelos de negocio y los supuestos de inversión tradicionales. Y Marshall-Lee cree que sobre todo este sector representa la inutilidad de utilizar métricas de valoración anticuadas.
«A menudo las empresas de Internet tienen poco capital y son capaces de generar un flujo de caja enorme. Si una empresa crece al 50% anual y obtiene entre el 20% y el 50% de rentabilidad del capital, los efectos combinados pueden ser enormes. No me importa si es más cara que el mercado, ya que prefiero invertir en una empresa de calidad que en una más barata de baja calidad. El mercado puede ser muy cortoplacista, pero estoy invirtiendo a cinco años y por lo tanto evalúo la valoración en ese plazo, no en referencia a un ratio precio-beneficios a corto plazo que puede ser engañoso”.
Esto no difiere mucho del enfoque del presidente de Berkshire Hathaway, Warrent Buffet, quien ha dicho a menudo que «es mucho mejor comprar una empresa maravillosa a un precio normal que una empresa normal a un precio maravilloso». Sin embargo, en el mercado se sigue confiando mucho en los ratios precio-beneficios.
Marshall-Lee añade que los ratios precio-beneficios ajustados cíclicamente (CAPE), que utilizan el múltiplo medio precio-beneficios en un periodo de 10 años, son ligeramente mejores, pero siguen siendo intrínsecamente imperfectos, ya que dirigen la atención del inversor al pasado en lugar de al futuro.
«Es mejor utilizar todos los múltiplos en combinación con muchos otros múltiplos y métricas o perspectivas a futuro. Si confías en los ratios CAPE creerías que actualmente las empresas mineras son baratas porque en los últimos 10 años fueron rentables, cuando en realidad la perspectiva es contraria debido al exceso de oferta y a un decrecimiento de la demanda china”.
Atreverse a ser diferente: evitar Brasil
Otro ejemplo de mirar más allá de la valoración es la evitación actual del mercado bursátil brasileño por parte de Marshall-Lee, ya que cree que está sujeto a «condiciones viciosas de corrección bursátil» tras la caída del precio del mineral de hierro debido a que China intenta pasar a una economía impulsada por el consumo.
Esto ha hecho que el real brasileño se debilitase en comparación con otras monedas en los últimos meses, otro factor que él considera a menudo ignorado en las valoraciones. «Tanto la moneda como los beneficios son más vulnerables de lo que reflejan los ratios precio-beneficios de muchas empresas brasileñas. Además, un ratio bajo es a menudo un mal indicador de valor cuando hay una mala asignación de capital (por ejemplo en una mala adquisición) o cuando hay un mal gobierno corporativo. Debido a la combinación de esos vientos de frente ya casi no tenemos activos en Brasil. Creemos que en todo ese mercado el riesgo es mayor que la recompensa y lo evitaremos en los próximos dos años a menos que se identifique alguna oportunidad bursátil excepcional”, dice.
A finales de junio la estrategia Newton Global Emerging Markets había invertido el 28,9% en la India, en comparación con el 7,65% del índice comparativo; y solo el 0,3% en Brasil en comparación con el 7,5% del índice. A finales de 2014 la estrategia invertía el 24% en la India y el 1,1% en Brasil en comparación con el 7,2% y el 8,9% del índice, respectivamente.