Los últimos análisis desarrollados por la consultora Towers Watson arrojan que, de no haber nuevas reformas sustanciales, el Fondo de Reserva de la Seguridad Social española, el que paga las pensiones públicas, podría agotarse en 2020. Tras analizar exhaustivamente la evolución de Fondo de Reserva de la Seguridad Social en España a partir de los datos publicados por Banco de España, la propia Seguridad Social, y las proyecciones de la población a largo plazo en España para el periodo 2012-2052 publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), Towers Watson ha identificado tres posibles escenarios: optimista, neutral y pesimista.
En el escenario más pesimista, el fondo se agotará en apenas 5 años (2020); en el más optimista, en 2028. Como opción “neutral”, el final de las reservas del Fondo se situaría en 2024. Para definir los tres escenarios, la consultora ha trabajado con cinco hipótesis principales: el crecimiento anual de los salarios; la tasa de revalorización anual de las pensiones; la evolución de la tasa de desempleo; la edad de entrada al sistema de cotizaciones y la edad de jubilación.
Como explica Gregorio Gil de Rozas, responsable del área de Previsión Social de Towers Watson España, “se trata de una realidad que hemos de tener muy en cuenta. El desequilibrio entre el gasto por pensiones contributivas y los ingresos por cotizaciones, incluso en las previsiones más optimistas, es grave y creciente. Es importante tomar medidas correctivas antes de que sea tarde”.
Aumentar las rentabilidades
Si se pretendiese mantener el nivel del Fondo en los 41.600 millones de euros con los que se cerró 2014, los analistas de Towers Watson han detectado que la rentabilidad exigida anualmente y de forma inmediata al Fondo de Reserva de la Seguridad Social tendría que ser superior al 10%. Por otra parte, para conseguir alargar la vida del Fondo de Reserva de la Seguridad Social hasta 2027, año en que se completaría la reforma en vigor sobre las pensiones con los plazos establecidos, la rentabilidad anual exigida es también superior al 10%.
Con los índices actuales de rentabilidad de la deuda española (en negativo a 6 meses y cercano al 1,3% a 10 años), la única opción de inversión contemplada hasta ahora para el Fondo, es muy improbable lograr la rentabilidad adecuada para la supervivencia del Fondo de Reserva, defienden.
Para Towers Watson es importante que se tomen medidas con cierta urgencia. En este sentido, la consultora valora tres posibilidades. La primera opción es acelerar la puesta en marcha de las reformas de la Seguridad Social, disminuyendo sensiblemente los actuales -interminables- plazos para su operatividad. La segunda opción es seguir introduciendo nuevas reformas y, sobre todo y como tercera vía paralela a las anteriores, buscar nuevas formas de inversión para el Fondo, más rentables, que incluyan otras posibilidades además de la deuda española.
“Sin estas medidas, no vemos la posibilidad de revertir la evolución negativa del Fondo. Y si éste se llega a agotar, no quedará más remedio que afrontar una agresiva política de incremento de impuestos y, en paralelo, reformar así mismo la Ley que, precisamente, impide que la Seguridad Social se financie mediante impuestos”, explica Gil de Rozas.