El mercado inmobiliario actualmente destaca por la fortaleza de la demanda y la escasez de oferta. Este aumento ha generado preocupaciones sobre la accesibilidad y disponibilidad de viviendas, además de los precios al alza que está habiendo.
En este contexto, como afirma Rubén González, socio fundador de la empresa especializada en servicios inmobiliarios personalizados, enfocada en el sector de lujo Mavericks Inmobiliaria, “la situación es muy beneficiosa para el propietario y más comprometida para el comprador promedio. La creciente demanda es superior a la oferta y ello hace que sea relativamente sencillo vender, y algo más complicado poder adquirir una vivienda. Las viviendas que están en precio se venden en días. Muy rápido”.
Un comprador más digital
Como explica González el perfil del comprador hoy en día es más digital. “Mucho más informado que el comprador promedio de hace unos años. Actualmente hay muchas herramientas para acceder a valoraciones, que no siempre acertadas, de las propiedades. Más del 80% de los contactos que genera una propiedad son a través de visualizaciones de anuncios con el teléfono móvil. A día de hoy, conviene ser muy rápido y versátil al comprar vivienda. En términos generales, ha evolucionado hacia un comprador con un nivel de conciencia y de conocimiento mayor”.
Las zonas con mayor auge
Para el experto, en general, la dinámica es positiva, pero especialmente las zonas más céntricas son siempre más sólidas y le afectan menos las fluctuaciones del mercado. “Son inmuebles que se consideran apuestas seguras, de ahí que su precio siempre crezca, y de haber una bajada genérica, aquí sería más ligera, ya que el valor es más sólido” y prosigue: “Entendemos que la zona costera y las islas tienen un perfil claramente internacional, pero en las zonas Prime de Madrid (como el barrio Salamanca, Chamartin, el centro), por ejemplo, también se cuenta con muchos perfiles de este tipo”.
No obstante, destaca que siempre hay innovaciones, mercados por explotar y servicios más modernos y versátiles. “En general las inmobiliarias deben digitalizarse y presentar soluciones más artesanales y personalizadas que generen el suficiente valor como para que el propietario promedio no se plantee vender la vivienda él mismo. Hoy en día, muchos propietarios apuestan por vender por su cuenta porque desconfían o no tienen en estima a los profesionales».
«Hay desde grandes corporaciones, que suelen caracterizarse por un trato más impersonal y menos humano, hasta boutiques o profesionales liberales, que compiten en términos de calidad de servicio, humanidad y personalización”, puntualiza.
Un acuerdo para seguir creciendo
Por otro lado, la exclusividad en el sector inmobiliario de lujo da un paso más allá de la compraventa de inmuebles con la alianza estratégica entre Gil Stauffer, uno de los servicios de mudanzas líderes en España, y Mavericks Inmobiliaria especialista en servicios inmobiliarios personalizados. Esta colaboración redefine la experiencia de mudanza y asentamiento en una nueva propiedad, integrando un servicio exclusivo que garantiza bienestar, confort y atención personalizada en cada detalle del traslado.