Hubo una palabra que se repitió y se repitió durante el V Funds Society Investment Summit de Houston: «incertidumbre». Incertidumbre por Donald Trump y sus políticas arancelarias, y también por los conflictos geopolíticos y la inflación persistente, con su consecuente impacto sobre el crecimiento económico y las tasas de interés.
Pero las gestoras Thornburg Investment Management y Muzinich & Co. presentaron estrategias de inversión en renta fija global y aseguraron que hay grandes oportunidades, aún en el escenario actual.
El evento, realizado el jueves 6 de marzo en Houston y dirigido a inversores profesionales de Texas y California, reunió a cinco gestoras internacionales de fondos. El miércoles 12 de marzo publicaremos una segunda crónica con un resumen de las exposiciones de State Street Global Advisors, M&G y Vanguard.
Huida hacia la calidad
“Es un momento increíble para estar vivo”, comenzó diciendo Benjamin Keating, Client Portfolio Manager de Thornburg IM, alguien que con sus más de 30 años de experiencia en gestión de inversiones, demostró estar impactado por las últimas noticias internacionales e incluso bromeó diciendo que su presentación podría quedar vieja en 24 horas. “Aunque es frustrante -continuó- porque, como mínimo, hay incertidumbre en Washington”. Y dijo después lo obvio: “sólo queremos certeza para los inversores”.
El experto se refirió al “dramático” aumento de tasas, a la estrechez de los diferenciales de crédito y recordó a los presentes en la sala que “se suponía que tendríamos una recesión hace dos años, pero nunca ocurrió”, y esto es así porque los balances de las empresas estadounidenses “son mucho más sólidos hoy que antes de 2008”.
Sin embargo, cuando la Reserva Federal recortó las tasas el otoño pasado, el rendimiento de los bonos a largo plazo subió, explicó. En su opinión, “no vamos a tener un colapso de la inflación. Lo estamos viendo en otras partes del mundo, pero no en Estados Unidos”.
“Lo que nos quita el sueño en Thornburg en el sector de renta fija, no son las SPAC ni las criptomonedas ni las entidades no bancarias. Lo que nos quita el sueño es que Alemania no pueda emitir deuda o que el Tesoro de Estados Unidos no pueda emitir deuda, porque ahora tienen una subasta todas las semanas. Y si tienen que aumentar los rendimientos para que la gente atraiga su deuda, será una mala señal. Hasta ahora no ha sucedido», alertó. Ese es un problema importante”, aseguró. “Realmente esperamos que, incluso si la economía no se desploma, la Fed de todos modos debería recortar las tasas a finales de este año”, agregó.
Keating mostró preocupación por los aranceles a México y Canadá por parte de Estados Unidos. “Ese es el tema más importante, y es algo que todavía no está en el precio de los bonos”, señaló. Según el experto, “empezaremos con una carrera arancelaria absurda entre México y Canadá”. Y vaticinó que los rendimientos caerán, el entorno no será bueno para el riesgo, y habrá una huida hacia la calidad.
“Son tiempos realmente extraños”, describió. “Pero podemos prosperar como inversores a pesar de la disfunción que está ocurriendo en Washington. Los rendimientos a 10 años son un gran impulsor de hacia dónde fluirán los activos. El dinero fluye hacia donde puede ir. Y si hay un evento geopolítico importante, hay un lugar al que va, y es Estados Unidos”, dijo. Proyectó además un dólar debilitado en el próximo ciclo aunque «nunca perderá el valor de almacenamiento de los retornos en un futuro cercano».
El experto concluyó: “hay demasiadas cosas en juego con las políticas arancelarias iniciales. Hasta ahora, los diferenciales de crédito están apretados pero las tasas no suben. No vemos una recesión hacia adelante, y no creemos que las tasas van a colapsar. Nos recuerda a la situación de 1990, un periodo de gran innovación con una inflación del 4%. Creemos que hay valor en la renta fija de EE.UU.; compramos hipotecas y treasuries a 10 años. Creemos que el rendimiento de los bonos del Tesoro va a caer en los próximos 18 meses por debajo del 4%”.
Benjamin Keating hizo su presentación en torno a la estrategia de renta fija multisectorial insignia de la firma: el Thornburg Strategic Income Fund, con cerca de 10.000 millones de dólares de AUM. La gestora cree que el potencial de rendimiento total de la renta fija está sesgado al alza y que los cupones más altos ayudan a protegerse contra el aumento de las tasas, y al mismo tiempo, brindan un impulso para las subidas de tasas. La cartera invierte en una combinación de valores que generan ingresos, con énfasis en los sectores de mayor rendimiento del mercado de renta fija.
Manejando activamente la renta fija de corto plazo
Ian Horn, co-Lead Portfolio Manager de Munizich & Co expuso en otra sala sobre el Muzinich Enhancedyield Short Term Fund, un fondo global de crédito de empresas con calificación media de grado de inversión y una duración inferior a los 2 años.
“Es un fondo de rendimiento mejorado; es el más grande y el más popular que gestionamos. Hoy tiene unos 8.000 millones de dólares de AUM”, describió. El fondo se lanzó a finales de 2003 y tuvo solo dos años negativos: 2008 y 2022. El diseño del fondo, su estructura y el hecho de centrarnos en los plazos cortos nos permiten generar rendimientos positivos muy resistentes y atractivos”, explicó.
Al día de hoy, tiene un rendimiento del 5,25%. pero Horn agregó: “Podemos estar relativamente seguros de que obtendremos rendimientos en torno al 6% este año con el manejo activo de la estrategia”.
El experto señaló que el momento “no es para tomar mucho riesgo. El momento ahora es capturar la oportunidad de rendimiento en el mercado y no buscar más riesgo, porque no están pagando mucho por ese riesgo incremental”.
Luego explicó que el fondo puede tener hasta un 40% en alto rendimiento; sin embargo ahora sólo tiene alrededor del 24% en ese tipo de bonos; casi la mitad es BB+. “Lo que estamos haciendo es asumir cierto riesgo en grado de inversión, en bonos BBB, y especialmente de la periferia de Europa: España, Italia, Portugal y Grecia. Aunque el fondo tiene una estrategia cruzada, tomamos riesgo cuando pensamos que nos van a pagar”, señaló. Solo el 6% del fondo invierte en instrumentos a tasa flotante, el 3% lo hace en crédito estructurado y otro 3% es asignado a préstamos. El 90% del fondo tiene una duración inferior a los cuatro años.
La estrategia es global; en este momento alrededor del 54% del fondo está invertido en EE.UU. y más del 36% en Europa; pero Horn explicó que la cartera gira con relativa rapidez. “Estamos reinvirtiendo constantemente la cartera, porque el efectivo vuelve a nosotros cada semana y cada mes”, dijo.
Europa ha estado ofreciendo una prima de diferencial sobre los EE.UU. durante los últimos años. Esto es relativamente inusual, y ha sido impulsado por el conflicto entre Ucrania y Rusia, entre otros motivos, explicó. “Esta es una de las razones, como estrategia global, por la que hemos estado asignando más a Europa, porque hemos estado recibiendo una prima de diferencial en ese mercado. Aunque hay incertidumbre en Europa, no vemos un riesgo de impago allí”, indicó.
Respecto a los mercados emergentes, en Muzinich son “bastante cautelosos”, dijo; el fondo invierte de manera selectiva en ese tipo de mercados. Con todo, el experto subrayó que “cuando asumimos riesgos, siempre lo hacemos de forma muy conservadora, porque los asumimos en bonos a dos años”.