Las dudas sobre la evolución del crecimiento en Europa, especialmente en Alemania y Francia, el deterioro de los datos de empleo en Estados Unidos y el hecho de que la inflación parece estar bajo control han desencadenado el, tan esperado, cambio de régimen en la política monetaria a ambos lados del Atlántico. “Una vez puesto el foco en evitar una recesión e idealmente conseguir un crecimiento sano en ambas regiones, el debate clave es hasta dónde se bajarán los tipos y en la velocidad con que las autoridades monetarias llevarán a cabo dichas bajadas”, señala Gonzalo Meseguer, director general de Santalucía Asset Management en la última carta trimestral a los inversores correspondiente al tercer trimestre de 2024.
Este contexto macroeconómico ha tenido un impacto “positivo” en los mercados financieros en el tercer trimestre de 2024, dando continuidad al buen comportamiento registrado desde comienzos de año y “da alas a los mercados financieros”. La renta fija, en general, se ha beneficiado del mayor “sentimiento de urgencia por abaratar el precio del dinero por parte de la Fed y el BCE y ha vuelto a ofrecer un rendimiento notable”.
Por su parte, las bolsas han acogido las bajadas de tipos con “optimismo y, en los próximos meses, deberían verse respaldadas por unos tipos de interés más bajos que generen un entorno económico favorable que ayude a acelerar el crecimiento de los beneficios empresariales… con permiso de la inestabilidad geopolítica en Oriente Medio que será sin duda una fuente de volatilidad en el medio plazo”.
Con este panorama en la política monetaria, desde el equipo de renta fija se ha realizado una gestión activa de la duración, “aprovechado momentos de excesivo optimismo respecto a la economía, con repunte de tipos, donde casi no se descontaban bajadas de tipos, para incrementar duración en las carteras”, indica Luis Merino, responsable de Renta Fija, Mixtos y Selección de Fondos.
Posteriormente, con el mal dato de empleo del pasado mes de julio en EE.UU., “el mercado descontó una próxima recesión en EE.UU., provocando una fuerte revalorización del mercado de bonos, que hemos aprovechado para realizar beneficios y neutralizar la duración de las carteras”.
Se ha mantenido infraponderación en Francia, con una prima de riesgo que se ha ampliado por los problemas políticos y presupuestarios, y sobrepondaración en Italia y el mercado de crédito, que ha mostrado una gran fortaleza y estabilidad en los últimos meses. Como consecuencia de esta táctica, a cierre de trimestre fondos de renta fija presentan rentabilidades superiores al 3%: Santalucia Renta Fija Corto Plazo (3,15%) y Santalucía Renta Fija (3,74%).
“Los fondos de renta variable han reaccionado muy bien a las bajadas de tipos. Las compañías en cartera están seleccionadas con esmero para que no dependan de factores exógenos. Todas nuestras compañías serán capaces de crecer a un ritmo muy saludable, independientemente del momento del ciclo en el que nos encontremos. Pero las bajadas de tipos de interés siempre ayudan y ha permitido que los fondos de renta variable continúen ofreciendo muy buenas rentabilidades”, comenta Antonio Manzano, responsable de Renta Variable.
A 30 de septiembre de 2024, la rentabilidad anual acumulada de los fondos de renta variable de estilo global, europea e ibérica superan el 10%. Santalucía Renta Variable Internacional Clase A genera unos retornos del 15,32% en el periodo, seguido de Santalucía Ibérico Acciones A (12,81%), Santalucía Quality Acciones Clase A (12,54%) y Santalucía Grandes Compañías Europeas A (12,68%).