Las empresas de asesoramiento financiero españolas, conocidas como EAFIs, siguen creciendo. Con los últimos datos publicados por la CNMV, el supervisor de mercados español, lograron aumentar su patrimonio un 21,2% a lo largo de todo el año pasado, situando su volumen bajo asesoramiento en 21.366 millones de euros, desde los 17.600 de finales de 2013.
El crecimiento se sitúa por encima del experimentado en 2013, del 19,3%, y está también acompañado por el mayor número de EAFIs en el sector: de las 123 a 146 en un año, según los datos de la CNMV. Con las últimas incorporaciones en 2015, el número de entidades ronda ya los 150.
Aunque parte de este crecimiento puede explicarse por el efecto mercado, las EAFIs también están captando clientes, pues el número de contratos aumentó casi un 14% en 2014, en línea con el dato de 2013. “Se está produciendo un crecimiento conjunto del sector como consecuencia de la llegada de nuevos clientes a la industria de asesoramiento patrimonial y planificación financiera”, apuntaba entonces Javier Kessler, presidente de Aseafi, como consecuencia de un entorno de bajos tipos de interés y el fin de los depósitos extratipados que hace necesaria la búsqueda de otros instrumentos financieros, como los fondos. Y en esa búsqueda, los clientes necesitan contar con profesionales cualificados, como las EAFI.
Más crecimiento entre profesionales
Aunque las entidades se están consolidando para dar servicio sobre todo a clientes minoristas, como ocurrió en 2013, en 2014 el crecimiento fue mayor entre clientes profesionales: el patrimonio gestionado para ellos aumentó un 22% (hasta superar los 4.800 millones de euros y con un crecimiento sobre todo en los contratos de más de 3 millones de euros), frente al crecimiento del 14% en los minoristas (hasta casi 5.700 millones de euros). Por número de contratos, el de los profesionales aumentó más de un 17% y el de los minoristas, un 13%.
Con todo, casi 11.000 millones, la mitad del total de volumen de las EAFIs, están en manos de otros inversores, un 25% más que hace un año. En este apartado se encuentran las llamadas contrapartes elegibles, una especie de subgrupo dentro de los clientes profesionales que incluye a los más profesionales. Así, MiFID establece tres grupos de clientes en función del grado de protección necesario, y los divide entre minoristas, profesionales y contrapartes elegibles (que la CNMV incluye en el apartado de otros clientes, según explican fuentes del supervisor a Funds Society). Los datos indican que estos clientes, los más profesionales dentro de los profesionales del sector financiero (como podrían ser otras ESIs, bancos centrales, entidades financieras, fondos de pensiones, aseguradoras…) también están recurriendo a las EAFIs: su número de contratos creció un 80% el año pasado (sobre todo los contratos con volumen superior a 3 millones de euros, cuyo número creció un 150%).
2 de cada 10 euros en retrocesiones
En este contexto de crecimiento del negocio y de captación de clientes, los ingresos por comisiones de las EAFI aumentaron un 43% el año pasado, frente al 27% de 2013, hasta superar los 47,7 millones de euros. Ese incremento procedió sobre todo del cobro a los clientes, que aumentó un 43%, sobre todo en servicios de asesoramiento financiero (con un crecimiento del 43%) y elaboración de informes, cuyas comisiones aumentaron un 92%. Las comisiones percibidas por asesoramiento a empresas sobre estrategias de capital, fusiones y adquisiciones cayeron un 33%.
A ese crecimiento de ingresos también contribuyó el aumento en las comisiones percibidas por parte de otras entidades, que aumentaron un 41%. En este contexto, las retrocesiones percibidas se dispararon un 42% en 2014, hasta acercarse a los 9,1 millones de euros. Una cifra que supone el 19% de los 47,7 millones de euros obtenidos en ingresos por comisiones, lo que quiere decir que dos de cada 10 euros de ingresos de las EAFI proceden de las retrocesiones. Esto también supone que la gran mayoría del negocio, el 80%, procede del cobro directo al cliente.
Con todo, algunos expertos del sector hacen matices: la CNMV cuenta como no retrocesiones la práctica del “neteo” o compensación, que realizan muchas EAFIs sobre todo a la hora de cobrar el servicio de asesoramiento al minorista. «La práctica totalidad de los ingresos por asesoramiento a minoristas proviene de esta práctica», advierten desde la industria.