En el mercado de renta variable, los máximos históricos pueden despertar sentimientos encontrados. Según destacan las firmas de inversión, históricamente los mercados alcistas se han prolongado durante mucho más tiempo que los mercados bajistas, provocando nuevos máximos en cada ciclo y oportunidades. Por ejemplo, terminada la presentación de resultados de la banca estadounidense, los buenos resultados reflejan el buen momento en el que este sector se encuentra en el último trimestre antes de las bajadas de tipos, previsible para septiembre por parte de la Fed y del BCE.
Sim embargo, los mercados de renta variable vieron como las ventas ganaban la partida al son de las prohibiciones para exportar a China tecnología punta para el desarrollo de la Inteligencia Artificial. «Así, valores como Nvidia o ASML acumularon pérdidas cercanas al doble dígito que acabaron arrastrando a los principales índices bursátiles: el S&P 500 perdía un 2% en los últimos 5 días frente al -4% del Nasdaq y, -4,3% del Euro Stoxx 50, mientras que el Ibex 35 cedía únicamente un 1,45% al ser la referencia con menor peso en tecnología», señala el equipo de inversión de la agencia de valores Portocolom.
Edmond de Rothschild AM el último análisis de Edmond de Rothschild AM, los últimos acontecimientos políticos en EE.UU. han reforzado la gran rotación que se viene produciendo desde los datos de inflación de hace unas semanas. “Los inversores están sustituyendo las empresas de gran capitalización por las small caps, los valores tecnológicos por los energéticos e inmobiliarios y el growth por el value”, apuntan.
“Con el impulso de las acciones energéticas, el mercado americano sigue marcando nuevos máximos, continuando el alejamiento respecto al comportamiento lateral de la bolsa europea que no logra alcanzar nuevos máximos desde abril. Los problemas en China afectan al principal sector en Europa dejándolo atrás en las subidas bursátiles”, explican desde Activotrade
Cuando el mercado alcanza un nuevo máximo, los inversores pueden llegar a la conclusión de que el mercado ha tocado techo y ellos han perdido la oportunidad. Según Capital Group, nada más lejos de la realidad. “En periodos largos, los mercados han tendido al alza y han alcanzado múltiples niveles máximos a lo largo de un ciclo”, señalan.
Todos sabemos que es evidente que las caídas del mercado son inevitables y que pueden producirse en cualquier momento. Pero, en opinión de Capital Group, la historia nos ha demostrado que los momentos en los que los mercados han alcanzado nuevos máximos han ofrecido una vía de acceso atractiva para los inversores a largo plazo. “Desde 1950, cada vez que el índice S&P 500 ha alcanzado su primer máximo histórico en al menos un año, la rentabilidad media de la renta variable ha sido del 17,1% en los doce meses posteriores. Salvo en el inicio de la crisis financiera mundial en 2007, un inversor habría obtenido ganancias en todos estos periodos”, explican desde Capital Group.
“Esa es la razón que nos lleva a enfocarnos en temáticas como la globalización, la productividad y la innovación, que impulsan enormemente el crecimiento. Vamos a tener que enfrentarnos a caídas del mercado, pero estas caídas no han cambiado la trayectoria a largo plazo. Por eso suelo posicionarme a favor de la revalorización del mercado”, añade Martin Jacobs, gestor de renta variable de Capital Group.
En opinión de Yves Bonzon, CIO (Chief Investment Officer) del banco privado suizo Julius Baer, el comportamiento del mercado ha sido bueno en lo que va de año, y parece que los bajistas parecen haber capitulado por el bien de sus carreras. “En consecuencia, no costaría mucho reajustar el indicador de codicia (sentimiento alcista) y miedo (sentimiento bajista) de nuevo hacia el miedo. La relación riesgo/beneficio para la segunda mitad del año es la menos atractiva que hemos visto en mucho tiempo. Para ser claros, seguimos creyendo que la tendencia principal es alcista. Por lo tanto, estamos tratando de protegernos contra una corrección intermedia en una tendencia alcista”, afirma Bonzon.
Para el CIO de Julius Baer, la narrativa está cambiando ahora hacia una rotación saludable, pero no de forma inmediata. “Aunque aún está por ver, no estamos convencidos de la probabilidad de un giro rápido y conveniente hacia un mercado alcista de renta variable estadounidense mucho más amplio en el que el S&P 500, ponderado por igual, supere de repente a su primo ponderado por capitalización bursátil. Dicho de otro modo, la economía puede disfrutar de condiciones similares a las de Ricitos de Oro, pero los mercados no suelen ser tan amables. Dudamos que el escenario de Ricitos de Oro para la renta variable, con un mercado amplio al alza, comenzara el jueves pasado”, argumenta.
Según Bonzon, otra prueba de que aún no se ha iniciado una rotación sostenible es la decepcionante evolución de la renta variable europea y china. “Si dicha rotación está en marcha, la renta variable europea y china no parece estar beneficiándose de ella. Creemos que las probabilidades de una corrección son mayores que las de una rotación sostenible. No podemos dejar de señalar los disturbios que probablemente habrían inundado EE.UU. si el intento de asesinato del ex presidente Trump hubiera tenido éxito”, afirma.
Perspectivas segundo semestre
Según la valoración que hace DPAM, nos encontramos en un ciclo atípico caracterizado por un crecimiento económico persistente en medio de una política monetaria restrictiva, lo que suscita inquietud tanto para los Bulls o bears. “El equilibrio entre la desinflación, el crecimiento, las subidas de tipos de interés y el impacto de los temas seculares a largo plazo continúa. Los alcistas llevan actualmente las de ganar, como demuestran los nuevos máximos del mercado”, señala Johan Van Geeteruyen, CIO de Renta Variable Fundamental en DPAM.
En este contexto, Van Geeteruyen considera que los inversores aún no han reaccionado y prefieren las grandes capitalizaciones hasta que mejore la estabilidad económica, y que el endurecimiento de la política monetaria también ha afectado a las pequeñas capitalizaciones. “Creemos que la mejor estrategia es acumular posiciones gradualmente, ya que varios catalizadores, como los recortes de tipos de interés del BCE, la mejora de las condiciones macroeconómicas y el bajo posicionamiento, sugieren un cambio inminente. La reciente mejora de los flujos, con el regreso de los inversores estadounidenses, también podría ser un fuerte catalizador”, señala.
Según sus previsiones, el mercado espera una recuperación del crecimiento en 2024 y 2025. Consideran que el PMI compuesto ha subido por encima de 50, gracias a la solidez del PMI de servicios, y el PMI manufacturero que ha mejorado de 45 a principios de año a más de 47. Este punto de inflexión indica históricamente un rendimiento superior inminente de las pequeñas capitalizaciones, que son sensibles a las mejoras económicas, pero llevan más de dos años en niveles de valoración recesivos.
“Seguimos neutrales en EE.UU. debido a los problemas de valoración, pero nos inclinamos por sobreponderar Europa. Evitamos infraponderar EE.UU. por su dinamismo y su condición de refugio seguro. Los factores que respaldan nuestra posición sobreponderada en Europa son la mejora de los indicadores macroeconómicos, el aumento de la confianza empresarial, el repunte de la actividad empresarial, la atractiva distribución del capital y la infravalorada difusión de la IA”, apunta Van Geeteruyen.