Generalmente, el estrés financiero es producto de los problemas económicos que provocan ansiedad y generan sensación de vulnerabilidad o escasez. Es imprescindible un buen control de las finanzas para prevenir este tipo de estrés y sus posibles efectos negativos en la salud física y mental. Los expertos señalan que una buena gestión de la salud financiera es fundamental para prevenir este tipo de estrés y sus posibles efectos negativos en la salud física y mental, sin olvidar el bolsillo.
Citibanamex –institución mexicana fundada en 1884 y que dentro de unos meses será desincorporada vía venta de acciones en la Bolsa Mexicana de Valores, del corporativo de Citibank para que funcione como banca minorista en México– no se ha quedado atrás. Juan Luis Ordaz, director de Educación Financiera de la firma mexicana, ha diseñado junto con su equipo algunas estrategias y consejos para disminuir el estrés financiero, que compartieron a través de una misiva a clientes del banco.
«Atender nuestras necesidades emocionales, físicas y mentales son la base del autocuidado, pero estos no paran ahí; administrar nuestro hogar y nuestras finanzas personales también son fundamentales en esta ecuación», dijo el experto en el documento.
En México, de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios (CONDUSEF), el 78.8% de la población de 18 años o más manifestó tener mucha, alguna o cierta preocupación por la acumulación de deudas, presentando diversos problemas fisiológicos como dolor de cabeza, falta de sueño, problemas gastrointestinales, de presión arterial, alimenticios e incluso conflictos familiares y con amigos.
Para reducir o prevenir este problema, los consejos de Citibanamex son los siguientes:
- Adopta el concepto de bienestar financiero: cualquier decisión de dinero pensada para aumentar ingresos, pagar deudas, incrementar o proteger tu patrimonio es una forma de autocuidado. Al crear cimientos financieros sólidos se pueden evitar sentimientos de estrés y preocupación que salen a flote cuando no podemos equilibrar nuestras finanzas.
- Conoce (y aumenta) tu valor neto: es decir, una medición exacta de tu patrimonio. Puedes calcularlo si restas tus pasivos (lo que debes) de tus activos (lo que tienes). Ya que tengas esta cifra, calcúlala de manera periódica. Al ver cómo aumenta o disminuye esta cifra te ayudará a determinar tus siguientes pasos financieros.
- Crea el hábito del ahorro: destina periódicamente un porcentaje de tu ingreso como si fuera un “gasto fijo” y mantén ese hábito. En el futuro, ese recurso te servirá para solventar una emergencia, destinarlo a una inversión que te ofrezca mayores potenciales de rendimiento o adquirir un bien que necesites. Indudablemente, el hábito del ahorro es fundamental para adquirir disciplina en el manejo de tus finanzas personales. De preferencia, evita el ahorro informal y asigna una cuenta formal en una institución financiera exclusiva para este fin.
- Protege tus datos: tu computadora y tus dispositivos móviles albergan y ofrecen acceso a mucha de tu información personal y confidencial. Comprométete a proteger tu perfil en línea cambiando tu contraseña cada cierto tiempo para garantizar tu seguridad. Puedes utilizar de contraseña tus metas, así serán un recordatorio de lo que quieres lograr.
- Usa el crédito a tu favor: construye una buena reputación crediticia. Asegúrate de adquirir deudas productivas y evita usar créditos para adquirir bienes o servicios que seguirás pagando después de haberlos utilizado. Procura usar esta herramienta para iniciar un negocio o adquirir un bien inmueble, ya que son opciones que darán beneficios económicos en el futuro.
- Ahorra para tu retiro: tu yo del futuro te lo agradecerá eternamente. Si ya estás trabajando formalmente (con afiliación al IMSS o la institución de seguridad de tu país) investiga los pormenores de tu cuenta. Nadie más que tú tiene el poder de decidir qué Afore o fondo de ahorro para el retiro, según el país de que se trate. Realiza aportaciones voluntarias y, de ser posible, crea un fondo complementario para el retiro.
- Cuídate a ti y a los tuyos: considera que los accidentes y enfermedades nos pueden afectar sin importar el sexo, la edad, la condición económica o el lugar donde vivimos. Realiza un diagnóstico y determina dónde te hace falta protección. Lo recomendable es primero pensar en ti mismo, después en tus dependientes económicos (si es que los tienes), luego proteger tu hogar y al final tu automóvil. Recuerda que más vale tener un seguro y no necesitarlo que necesitar un seguro y no tenerlo.
- Diversifica tus ingresos: procura no depender exclusivamente de uno solo. Explora tus gustos y habilidades, enamórate de un problema que estés decidido a resolver y aventúrate a emprender.
- Aprovecha los beneficios que ofrecen los productos y servicios financieros: desde meses sin intereses, cash back, preventas de conciertos, pagos y cobros digitales, domiciliación de servicios y descuentos, entre muchos otros.
El experto de Citibanamex recalcó que el uso de productos y servicios financieros puede abonar a una mejor calidad de vida. Priorizar el autocuidado y las finanzas sanas permite hacer espacio para la felicidad, prosperidad y salud en nuestras vidas, dijo en la nota de prensa.