En los últimos 12 meses, se ha producido un cambio relevante hacia el trabajo presencial en oficinas: actualmente, el 47% de las empresas sigue un modelo de trabajo con foco en lo presencial, frente al 36% del año pasado; mientras que el 45% sigue un modelo híbrido (en comparación con el 53% del año pasado). Según un estudio realizado por Grant Thornton, si las empresas presionan demasiado para que se vuelva a la oficina, es posible que, sin darse cuenta, echen por tierra logros en cuanto a la presencia femenina en puestos relevantes que se permiten a través del trabajo flexible. Su principal conclusión es que es necesario garantizar que haya al menos una mujer que sea alta directiva involucrada en la toma de decisiones en materia de diversidad, equidad e inclusión.
“Esta opción parece estar impulsada por los hombres que son directores ejecutivos: el 50% de las empresas dirigidas por un hombre sigue un modelo predominantemente presencial, en contraposición al 40% de las empresas dirigidas por una mujer”, indica el estudio Women in Business (WiB) de Grant Thornton (GT), cuya base es la encuesta a alrededor de 10 mil dirigentes empresariales de 28 países. Según el estudio, para fomentar y conservar el talento femenino en el entorno de trabajo, las empresas deben considerar detenidamente las prácticas laborales que ofrecen. La investigación sugiere que, tras algunas decisiones que han adoptado ejecutivos hombres, es necesario garantizar que también haya una mujer que sea alta directiva involucrada en la toma de decisiones en materia de diversidad, equidad e inclusión. Si las empresas presionan demasiado para que se vuelva a la oficina, es posible que, sin darse cuenta, echen por tierra algunos de los logros obtenidos en cuanto a la presencia de mujeres en puestos directivos que se consiguieron al adoptar prácticas de trabajo flexible.
Las diferencias regionales también son destacables. En Norteamérica, el 39% de las empresas ha adoptado un modelo de trabajo principalmente presencial, mientras que en la Unión Europea esta cifra es de 53%. Muchas grandes empresas han comenzado a poner en marcha directrices e incentivos para que los empleados vuelvan a las oficinas, como el enfoque de “la oficina primero” de Goldman Sachs , que establecía que los empleados debían acudir a la oficina cinco días a la semana. Amazon, Disney y Boeing también han aprobado políticas de regreso a la oficina en los últimos meses, según un reportaje de Inc .
Las empresas en las que los empleados trabajan principalmente en las oficinas son las únicas en las que el porcentaje de mujeres en altos cargos directivos se sitúa por debajo del índice de referencia mundial.
Tener la posibilidad de elegir dónde trabajar aporta beneficios sustanciales a las mujeres en las empresas, no solo a nivel directivo, sino también a la cantera de talentos. “Un modelo de trabajo que combina la modalidad presencial y a distancia es estupendo, tanto para hombres como para mujeres, ya que permite conciliar mucho mejor la vida personal y profesional. Por otro lado, no es deseable que los empleados más jóvenes se sientan abandonados, por lo que, sin duda, también es importante que puedan verte en persona si lo necesitan”, indican en Grant Thornton Chile.
Por último, según el estudio, “cuando las colaboradoras han tomado su pre y post natal, y ya están preparadas para reincorporarse al trabajo, es fundamental ofrecer la modalidad híbrida para poder retenerlas y ayudarlas a avanzar en su carrera profesional”.