Durante mis lecturas semanales, me topé con el informe de Riesgo Global 2024, publicado por el Foro Económico Mundial, donde se destaca la «migración involuntaria»como uno de los principales riesgos mundiales en los próximos dos y diez años.
Este descubrimiento se basa en las opiniones de casi 1,500 líderes globales en ámbitos académicos, empresariales, gubernamentales, de la comunidad internacional y de la sociedad civil.
Para profundizar en el tema, me propuse revisar los informes de Riesgo Global de los últimos cinco años, y para mi sorpresa, no encontré que la «migración involuntaria» haya sido un patrón de riesgo en esos años.
Esto me lleva a concluir que, en la actualidad, este factor está cobrando más relevancia y se está convirtiendo en un tema crítico.
Los principales factores que contribuyen a la «migración involuntaria» incluyen los cambios climáticos, la confrontación geoeconómica, la polarización social, los conflictos internos o interestatales y las crecientes dificultades económicas.
Estos elementos son algunos de los que llevan a muchas personas a considerar adquirir una ciudadanía adicional como una póliza de seguro o como un plan B para estar preparados ante lo inesperado.
En un mundo marcado por la volatilidad e incertidumbre, tener más de un pasaporte proporciona una red de seguridad adicional que ofrece beneficios significativos en términos de movilidad internacional, seguridad personal y familiar, protección de activos, y la posibilidad de contar con un hogar alternativo.
En última instancia, así como uno adquiere un seguro de vida para garantizar tranquilidad, también debería considerarse tener un «seguro de pasaporte».
De mis conversaciones con clientes, uno me dijo que mi familia y yo podríamos trabajar para el servicio secreto por las múltiples ciudadanías y residencias que teníamos todos.
Me preguntó por qué tenía tantas y esto fue lo que le dije:
- Facilita los viajes internacionales: En un mundo donde las regulaciones de viaje cambian rápidamente, tener más de un pasaporte nos proporciona flexibilidad. Al poseer pasaportes de diferentes países, nos ayuda a evitar restricciones de visado o situaciones complicadas al viajar a ciertos destinos.
- Seguridad personal y familiar: Nos proporciona una red de seguridad adicional en situaciones de emergencia, desastres naturales, conflictos políticos, etc. En tales casos, un segundo pasaporte nos facilita la evacuación o nos proporciona acceso a la ayuda consular de otro país.
- Legado para futuras generaciones: Aparte de dejar un patrimonio monetario a nuestras hijas, un legado de ciudadanías que se multiplicara por generaciones ofreciendo innumerables beneficios y opciones para el futuro.
- Protección de activos: Nos ayuda a proteger activos y patrimonio en caso de cambios políticos o económicos.
- Acceso a servicios y beneficios: Nos proporciona acceso a una variedad de servicios y beneficios, como atención médica, educación, seguridad social y oportunidades de negocio en otros países.
Para nosotros tener múltiples ciudadanías significa no estar atrapados a un solo país, a una sola economía y a un solo gobierno. Nos gusta tener opciones.
Por Juliana Cloutier, experta en soluciones para inversión y ciudadanía en el extranjero de la firma Alta Invest.