María, lo primero es pasar a las definiciones: ¿por qué no te gusta hablar de “activos alternativos” y prefieres el término “activos privados”?
“Es que ya no es una alternativa, son parte del portafolio. Los activos privados no son nuevos, toda la vida se pudo hacer préstamos privados, comprar propiedades y participar con capitales en emprendimientos inmobiliarios o empresariales. Lo nuevo es la posibilidad que tienen ahora los inversores privados minoristas de acceder a estas inversiones”.
“En 2011, cuando trabajaba en Credit Agricole, ya invertíamos en estos activos, pero el mínimo era de 5 a 10 millones de dólares. Hoy un cliente puede acceder a estas inversiones con montos que van desde 10.000 a 100.000 dólares en su mayoría. Por eso me gusta que se les llame por su nombre, son activos privados, que no tienen cotización pública y es la gran diferencia con los activos que comúnmente uno encuentra en el portafolio de un cliente final. Las acciones, bonos, ETFs y fondos mutuos tienen cotización pública, con acceso cada vez más público, al alcance de cualquier persona”.
“En los años 90, cuando operaba bonos, el precio era casi privado, porque muy poca gente tenía acceso a cotización online, los precios se conocían solo por algunos operadores que teníamos acceso a sistemas de información en línea. En esa época, muy pocos asesores financieros en Uruguay tenían acceso a un Bloomberg… te cuento, yo fui la primera usuaria de Bloomberg en Uruguay. ¡Hoy esa terminal está en el museo de Bloomberg, que horror!”
Una pregunta atrevida: ¿“activos privados” no es una especie de cajón de sastre, donde hay más o menos de todo? Algunos inversores ven la clase de activo como un almacén que vendiera en el mismo sitio pescado, un edifico residencial, ropa de lujo y perros… ¿no ganaría claridad el mercado segmentando más claramente cada producto?
“Activos privados ya tiene varias clases de activos, una primera división sería entre acciones, deuda, inmuebles, infraestructura y fondos especulativos (Hedge Funds), todos privados, con liquidez limitada. Dentro de cada clasificación, como en acciones privadas, hay subcategorías, capital de riesgo (Venture Capital), crecimiento (Growth), adquisiciones (Buyouts), y así con cada categoría”.
“Hoy hay mucha capacitación online, inclusive los grandes agentes del mercado han abierto academias y cursos online que le permiten al asesor, e inclusive al cliente final, educarse y entender antes de invertir”.
Puede leer el artículo completo en este enlace.