Gescooperativo, la sociedad de inversión colectiva del Grupo Caja Rural, su grupo asegurador RGA y Banco Cooperativo Español, reunieron en Madrid, durante dos días, a cerca de 200 directivos y gestores financieros procedentes de diferentes puntos de España para analizar la actual situación de los mercados financieros y las principales tendencias que en este contexto emergen en los campos del ahorro y la inversión.
Entre los asuntos abordados figuraron la incidencia previsible de las reformas legislativas en marcha o la situación de la previsión social en España y el futuro de las pensiones.
Cristina Freijanes, secretaria general de la Unión Nacional de Cooperativas de Crédito (UNACC), organización que agrupa a 42 cooperativas de crédito españolas, se refirió en su intervención a la Estrategia Europea de Inversión Minorista (RIS), una nueva iniciativa regulatoria que se propone atraer la confianza del inversor minorista e incrementar su participación en los mercados.
Freijanes consideró esta reforma como muy ambiciosa y, en alguno de sus aspectos, difícil de poner en marcha. Uno de ellos sería el que se refiere al establecimiento de lo que se denomina ‘value for money’, o la determinación de la relación coste-beneficio de un producto financiero. A este respecto, advirtió del riesgo de que se pueda incurrir en un supuesto de intervención de precios.
El futuro de las pensiones en España
El sistema de previsión social en España y el futuro de las pensiones fue el tema abordado en una mesa redonda en la que intervinieron Mirenchu del Valle, presidenta de Unespa, y Elisa Ricón, directora general de Inverco. Esta última aseguró que el sistema de pensiones en España es un pilar fundamental del Estado de bienestar y que debe apostarse por un sistema multipilar, en el que el público sea todo lo generoso que la economía española pueda permitirse, y se complemente con dos más, el de empresa y el individual, que estimulen el ahorro mediante formación, información y un tratamiento fiscal adecuado y estable.
Según señaló la presidenta de Unespa, mientras que en el conjunto de los países europeos el 39% de los ciudadanos no ahorra para su jubilación, esta tasa escala hasta el 51% en el caso de España. Ello, a su juicio, debería llevarnos a examinar esta situación y ver cómo contrarrestarla mediante formación y concienciación por parte de las propias administraciones públicas, y a través de mensajes en positivo para generar confianza en torno a los productos de previsión.
En relación con los nuevos planes de pensiones de empleo para trabajadores por cuenta ajena y autónomos, la directora general de Inverco subrayó la importancia de impulsar su desarrollo y recordó que, si se quiere generalizar su cobertura entre la población ocupada, se requieren incentivos más generosos, tanto para los trabajadores como para las empresas.
Ambas, además, defendieron la puesta en marcha de varias líneas de actuación para impulsar la demanda de planes de pensiones en España. Por un lado, mediante el desarrollo de campañas de concienciación con mensajes en positivo para dar a conocer estos productos financieros y el fomento de la información a los ciudadanos con herramientas como la remisión de cartas con el detalle de la pensión estimada.
Asimismo, consideraron necesaria la personalización de nuevos incentivos para estimular las aportaciones de jóvenes y personas con rentas bajas, y el establecimiento de un sistema gradual, con alicientes más potentes al inicio, para facilitar su expansión.