En 2015 interesarán las acciones, pero también la deuda de mercados emergentes en moneda local, según las perspectivas de Luca Paolini, estratega jefe de Pictet AM, recientemente en Madrid.
El entorno es el de un crecimiento global que puede acelerarse algo, aunque no esperan un cambio masivo respecto a lo visto los pasados años: es previsible un crecimiento relativamente débil, mayor en EE.UU. que en otras regiones –lo que está prácticamente descontado en el precio de sus acciones-. “En conjunto seguimos pensando que las acciones pueden comportarse mejor que los bonos, aunque con rentabilidad de un solo dígito.Tenemos preferencia por las de Japón, en Europa por las de Alemania y en mercados emergentes por India. México y Filipinas también se están mostrando fuertes y es previsible que así sigan”.
En su opinión la gran cuestión es China, donde creen que el crecimiento seguirá por encima del 7% anual, aunque con riesgos, especialmente por el mercado de construcción residencial, que ha estado muy débil los últimos meses. En renta fija el año puede ser difícil pero la deuda de mercados emergentes en moneda local tiene mayor potencial, dado que las divisas están muy baratas –al nivel más bajo en 20 años- mientras las rentabilidades a vencimiento son altas, en un momento en que la inflación probablemente vaya a alcanzar techo.
“Hay que tener en cuenta que no esperamos que globalmente la liquidez vaya a cambiar. De hecho la expansión de balances de los bancos centrales puede ser un billón de dólares, la misma cantidad que los últimos años. Aunque la Reserva Federal haya dejado de imprimir dinero, el BCE y el Banco de Japón lo seguirán haciendo”, explica. Sin embargo, por valoración, casi todas las regiones están por encima de la media a largo plazo, aunque es normal a lo largo del ciclo que los beneficios se muestren deprimidos antes de rebotar.
De todas formas resulta difícil encontrar verdadero valor en prácticamente cualquier clase de activos, dice el experto. “En sentimiento hay mucha diferenciación. En EE.UU. los indicadores están extremadamente altos, en máximos históricos, pero en Europa e incluso en países emergentes el sentimiento es mucho menos optimista, lo que se puede explotar en la asignación de activos”.
Los efectos del petróleo en la asignación de activos
Por su parte el petróleo puede tener efectos positivos sobre la economía global los próximos seis meses, especialmente en EE.UU., donde hasta 80% de su PIB es consumo, en mayor grado que en Europa. Además está afectando a la distribución de activos entre países, pues actualmente es más conveniente la exposición a importadores de petróleo. “Turquía es de los países con mayor déficit por cuenta corriente, pero un gran importador de petróleo. Sudáfrica tiene déficit por cuenta corriente, pero no exporta petróleo. Pero hay que tener precaución con países con déficit por cuenta corriente y exportadores de petróleo. Es el caso de Brasil. Por su parte Rusia no tiene déficit por cuenta corriente, pero su economía sigue muy dependiente de la exportación de petróleo”.
Japón: el mercado más interesante
“De momento nos mostramos neutrales con acciones de Japón, pero para el conjunto de 2015es el mercado de acciones más interesante”, afirma, pues les favorece la liquidez y valoración. Y el movimiento sorpresa del Banco central de Japón para ampliar estímulos monetarios debe mejorar el sentimiento inversor y facilitar el crecimiento. “El país se encuentra geográficamente entre EE.UU. y China, en condiciones de aprovechar el crecimiento en ambas regiones, a lo que contribuye la debilidad del yen, importante fuente de competitividad para su economía, cuyo tipo de cambio efectivo nunca ha sido tan bajo en 30 años”.
Además, las expectativas de crecimiento de beneficios en Japón para 2015 son del 13%, en comparación con el 10,3% en EE.UU. A ello se añade la reasignación de bonos japoneses a acciones japonesas: el Pension Investment Fund (GPIF), mayor fondo de pensiones públicas en el mundo, con 1,1 billones de dólares en activos, tiene un peso objetivo del 60% en bonos japoneses, pero la reforma prevé que la asignación a renta variable japonesa pase del 12% al 25%.
Oportunidades por países en deuda de mercados emergentes
En la gestora no ven oportunidades endeuda pública de países desarrollados ni en deuda empresarial con grado de inversión. Sin embargo, sí las ven en deuda de mercados emergentes, pues los inversores están muy negativos respecto a una subida de tipos de interés de la Reserva Federal, probablemente lo largo del segundo trimestre de 2015, pero esta clase de activo muestra una elevada rentabilidad a vencimiento y una baja sensibilidad a esas variaciones. “Este año las denominaciones en dólares se han comportado mejor, pero para 2015 preferimos deuda emergente en moneda local, pues estas divisas cotizan muy por debajo de su valor razonable”, añade. Ahora bien, cree importante reducir esta exposición antes de una subida de tipos de interés en EE.UU. y volver a aumentarla al cabo de unos meses. Y siempre siendo selectivos: los bonos turcos, de India e Indonesia han proporcionado muy buena rentabilidad total, a diferencia de Rusia. Pero Brasil tiene que reducir la inflación. “Estamos invertidos en deuda y acciones de India, que tiene déficit por cuenta corriente pero es importador de petróleo”.
Alemania en Europa
Además, para a los próximos tres a seis meses ven oportunidades en Europa, donde ha habido excesiva salida de inversores, indicación de que el sentimiento está muy deprimido. “La situación es difícil a corto plazo, pero es probable que sorprenda. Hay que tener en cuenta que el BCE está expandiendo y vaa seguir expandiendo su balance. Aunque prevemos que el crecimiento en Europa será del 1,1% en 2015, puede ocurrir que el crecimiento global sea positivo, en cuyo caso Europa lo hará bien, pues muchos inversores buscarán valor real en áreas más cíclicas”.
Además el mejor comportamiento puede venir de acciones de Alemania, importador de petróleo, como Japón. “El país es competitivo y se puede beneficiar especialmente de la debilidad del euro”, afirma.