La inflación en máximos históricos, la subida de los tipos de interés y la inestabilidad geopolítica contribuyeron a una caída del mercado de fusiones y adquisiciones (M&A por sus siglas en inglés), que tocó fondo en el segundo trimestre de 2023. Desde entonces, más agentes han vuelto a la mesa de negociación, con un aumento del 16% en las operaciones realizadas entre julio y septiembre, según demuestra el estudio «Quarterly Deal Performance Monitor (QDPM)» elaborado por WTW.
Según la firma, con los elevados costes de los préstamos, los conflictos geopolíticos y un nutrido calendario electoral en todo el mundo, el potencial de que haya perturbaciones en 2024 sigue siendo considerable y las perspectivas del mercado M&A difíciles de predecir.
No obstante, señalan que las condiciones actuales brindan la oportunidad de buscar operaciones estratégicas que podrían no estar disponibles cuando la competencia por los activos se intensifique durante el próximo repunte del ciclo de fusiones y adquisiciones. En este sentido, una de las tendencias con más fuerza está protagonizada por la inteligencia artificial. “Se espera un cambio sísmico en el enfoque de la inversión hacia la inteligencia artificial (IA) en 2024. Aunque los negociadores han expresado reservas sobre esta tendencia tecnológica, las empresas dirigen cada vez más su atención y sus recursos hacia los negocios basados en la IA. Esta tecnología revolucionaria y el talento técnico de las empresas emergentes de IA también se consideran una ventaja potencial para mejorar los procesos de fusiones y adquisiciones y la creación de valor. Desde la mejora de la eficiencia mediante la automatización hasta el fomento de la innovación, el potencial de la IA es enorme. El éxito de la operación, sin embargo, también dependerá de la capacidad del comprador para construir una cultura que apoye la innovación con IA y su poder para mejorar la experiencia de los empleados”, señala Beatriz Pavón, directora de M&A en WTW España.
Otra de las tendencias que veremos, según la firma, de cara al próximo año será que las operaciones de menor cuantía impulsarán el flujo de operaciones. Según su barómetro, las grandes operaciones, valoradas en más de 1.000 millones de dólares, han seguido experimentando un descenso constante en volumen desde 2020. “El entorno actual de tipos de interés elevados ha desencadenado una clara tendencia en el sector M&A que continuará en 2024, ya que los responsables de las operaciones se centran cada vez más en transacciones más pequeñas del mercado medio, más fáciles de ejecutar, menos arriesgadas de financiar y que ofrecen un encaje único y estratégico dentro de la cartera de un adquirente”, según WTW.
Para 2024, el capital riesgo seguirá dominando la actividad de M&A. Según el barómetro, a medida que la diferencia de valoración entre comprador y vendedor siga reduciéndose, los objetivos serán cada vez más atractivos y contribuirán a impulsar la recuperación del flujo de operaciones en 2024. “Esta será una noticia especialmente bien recibida por las empresas de capital riesgo, que han estado sometidas a una creciente presión para desplegar más de 2 billones de dólares en dry powder (término anglosajón que hace referencia a la cantidad de reservas de efectivo o activos líquidos disponibles) y se espera que dominen el mercado de fusiones y adquisiciones en 2024”, aclara Pavón.
Por último, habrá una clara tendencia hacia la búsqueda de valor, ya que la negociación se ha vuelto más compleja y competitiva. Según WTW, las estrategias tradicionales tienen dificultades para ofrecer una ventaja competitiva. Por ello, en este contexto, mejorar las probabilidades de éxito en 2024 dependerá no solo de un enfoque preciso a la hora de buscar las operaciones más adecuadas, una diligencia debida sólida y la integración de las ESG, sino también de la capacidad de gestionar los riesgos del talento en un mercado laboral restringido que, si no se controla, puede socavar rápidamente el valor de la operación.
En el vertiginoso mundo de las fusiones y adquisiciones, la antes mencionada IA también se está convirtiendo rápidamente en un factor de cambio y tiene el potencial de acelerar significativamente las operaciones de fusión y adquisición, desde la diligencia debida hasta la integración posterior a la fusión. Desplegadas correctamente, las capacidades de IA pueden ser la clave para desbloquear un mayor valor a través de las fusiones y adquisiciones.
“Es probable que la incertidumbre macroeconómica y los retos regulatorios pesen mucho en la actividad general de las operaciones en 2024. Sin embargo, un renovado interés por la tecnología, en particular la IA, debería proporcionar su propio impulso para las operaciones en el mercado medio y las adquisiciones complementarias que ayuden a impulsar los niveles generales de actividad a medida que los compradores estratégicos y financieros aprovechen las oportunidades de crecimiento a mejor precio”, concluye Beatriz Pavón.