En el mundo actual, donde la economía global está experimentando una desaceleración, India brilla con un impresionante crecimiento de aproximadamente el 6%-6,5%. Algo que es todavía más reseñable si tenemos en cuenta que supera a muchos de sus homólogos asiáticos y globales.
Las empresas indias han experimentado un interesante crecimiento en sus ganancias, lo que se ha traducido en un sólido rendimiento en los mercados. Si bien las valoraciones pueden parecer altas a primera vista, creemos que están justificadas por el excelente avance de los resultados que las compañías del país han demostrado. El índice MSCI India ha experimentado una tasa de crecimiento anual compuesta del 16% en los últimos diez años, hasta septiembre de 2023, superando al MSCI World.
Hemos identificado oportunidades en los sectores financiero, de consumo, de infraestructuras y tecnología. Creemos que muchas empresas dentro de estos sectores tienen el potencial de ofrecer retornos atractivos desde una perspectiva a largo plazo.
Nuestro optimismo por el mercado indio se fundamenta en varios factores:
Estabilidad macroeconómica. A pesar de una recesión global, la salud macroeconómica de India sigue siendo sólida. Aunque la inflación ha aumentado en los últimos meses, aún se encuentra dentro de una zona controlada, con cierto confort. Los tipos de interés, incluso después de las subidas, siguen por debajo de su promedio de diez años, en marcado contraste con el mundo desarrollado que actualmente se enfrenta a esos desafíos de inflación y tipos. El empleo, la fabricación y los servicios están experimentando una fase de crecimiento, lo que ofrece un panorama económico muy interesante.
Estabilidad política y reformas. Un entorno político estable en India ha allanado el camino para importantes reformas en la tributación, la banca y el sector manufacturero. Una mayor y mejorada recaudación de impuestos ha impulsado el gasto en infraestructura. El sector bancario, revitalizado por nuevas leyes de quiebra, está listo para continuar creciendo con abundancia de capital y una drástica reducción en los préstamos no productivos (NPL).
Diversificación respecto a China. A medida que las empresas globales buscan reducir su dependencia de China debido a las disputas comerciales y tecnológicas, India emerge como uno de los principales beneficiarios de esta situación. Con abundantes recursos y mano de obra, se está convirtiendo en uno de los hubs preferidos para las empresas que buscan diversificarse. Las inversiones en sectores como la electrónica, el automovilístico y los textiles están en aumento.
Dividendo demográfico. India, la nación más poblada del mundo actualmente, cuenta con una gran cantidad de población joven, con una edad media de 28 años. Esto significa que India tiene una ventaja demográfica muy interesante para su crecimiento económico. Una clase media en ascenso y un aumento en el ingreso per cápita preparan el escenario para un auge en el consumo y la inversión.
Tribuna de Abhishek Thepade, gestor de fondos en DNB AM y del equipo de Global Emerging Markets.