Ante la dificultad de prever los rendimientos de las divisas al contado y los próximos movimientos de los bancos centrales -más aún en momentos como el actual-, los inversores deben preguntarse si realmente desean estar expuestos al riesgo adicional que suponen las carteras sin cobertura de divisas en mercados internacionales, señalaron expertos de DWS en un reciente Virtual Investment Summit (VIS) con Funds Society.
Al inicio de la presentación Aiviel Sánchez, Latin America Coverage, destacó la gama de soluciones Xtrackers, el segmento de fondos cotizados (ETF) y materias primas cotizadas (ETC) de DWS, gestora que cuenta con casi un billón de dólares de activos bajo gestión tanto en inversión pasiva como activa y alternativa.
A continuación, Dean Allen, Passive Investment Specialist-U.S. Offshore en DWSXtrackers, y Jason Chen, analista senior en el equipo de investigación de DWS, explicaron el entorno por el que el dólar ha llegado a situarse este año hasta un 10% y un 15% por encima de otras monedas importantes, como el euro o la libra esterlina.
Chen indicó que la causa de ello es en primer término el papel del dólar como divisa refugio cuando se venden los activos de riesgo. “El otro motor ha sido la divergencia de los tipos de interés, que es tanto un factor de rentabilidad al contado (spot) como de carry”.
“Básicamente, como la Fed ha estado subiendo los tipos de interés de manera más agresiva que cualquier otro país desarrollado, las personas que prestaban dólares y tomaban prestadas otras divisas pudieron generar una ventaja adicional a la que normalmente obtienen de las divisas en sus carteras”, señaló.
Consideraciones erróneas
Chen también se refirió a algunos conceptos erróneos sobre la cobertura de divisas, como considerar que reduce las ventajas de diversificación de la renta variable internacional. “La diversificación proviene de la renta variable subyacente, no de la exposición a las divisas”, dijo.
También existe la creencia de que las coberturas de divisas reflejan una visión activa de las mismas y no son neutrales, cuando en opinión del experto es al contrario: quienes no tienen una firme opinión sobre una divisa concreta y desean adoptar una posición neutral, deberían optar por las estrategias hedged.
Chen también desmintió que la cobertura de divisas sea cara o compleja. El gran crecimiento de los ETF ha facilitado y hecho más barato el acceso a estos mercados desde el punto de vista del trading, dijo, a la vez que negó que el riesgo cambiario quede mitigado como a veces se cree por la inversión en ADR (American Depositary Receipt). “Los ADR siguen estando expuestos al riesgo de divisas a pesar de estar denominados en dólares estadounidenses”, aseguró.
Finalmente, también desmintió que el riesgo de divisas sea un componente inherente a la inversión en renta variable internacional, ya que mediante el uso de los ETF de renta variable con cobertura de divisas más frecuentes, los inversores pueden eliminar o amortiguar las fluctuaciones monetarias de sus carteras.
Tres pilares
A la hora de analizar el riesgo de divisas, Chen propuso tres pilares fundamentales. “Cuando evalúas cualquier inversión, mides el riesgo frente al beneficio. En este caso consideramos el riesgo como volatilidad. Podemos demostrar que históricamente la cobertura de divisas puede reducir el riesgo entre un 1,5% y un 2%, lo que impacta de manera directa cuando se produce un drawdown”, señaló.
Y añadió: “El rendimiento se ve impulsado por dos componentes, el carry de la moneda cuando los tipos de interés son diferentes en las distintas regiones y que en este momento es muy positivo, y el rendimiento del mercado al contado”.
“Sabemos que hay volatilidad, conocemos el carry por el entorno de tipos de interés y realmente no sabemos qué harán las divisas a corto plazo. Así que la combinación de estos elementos habla en mi opinión a favor de una estrategia de cobertura de divisas”, explicó.
Realizando una comparativa de estrategias con y sin cobertura a cinco años, aunque los inversores sin cobertura se benefician de una mayor rentabilidad en algunos periodos de tiempo, en la mayoría de los casos también han experimentado una mayor volatilidad. “Si la consideras añadida proporcionalmente al riesgo en los mercados de renta variable, asciende a en torno a un 20% de riesgo adicional que puede evitarse o eventualmente destinar a otra parte de la cartera y compensarla mediante la cobertura de divisas”, dijo Chen.
El experto detalló asimismo por qué considera que añadir riesgo de divisas no implica mejorar diversificación de una cartera. “La palabra clave es ‘añadir’ –destacó-. Las correlaciones históricas entre la renta variable y la moneda no han sido a menudo suficientemente negativas como para reducir el gran incremento del riesgo” que se produce. “En general, y este año es muy buen ejemplo de ello, cuando asumes riesgo de divisa los drawdowns que se pueden experimentar son mucho más dramáticos, como se puede ver en los últimos 16 de los 21 años calendario. Este año en concreto ha sido casi el doble: 14,51% (hedged) frente a 28,49% (unhedged)”.
Respecto de las opciones en caso de que un inversor no quiera realizar una cobertura completa de toda la cartera con exposición internacional, Chen también explicó que una posibilidad es adoptar un 50% de cobertura, que ya reduce en dos tercios el riesgo.
Conclusión
Básicamente el carry trade es la monetización de los diferenciales en tipos de interés entre regiones, aseguró el experto. En el ejemplo de Europa, los tipos de interés son ahora más bajos que los de EE.UU. “Cuando haces una cobertura básicamente compras dólares frente a euros, es decir le prestas a alguien dólares a una mayor tasa de interés y tomas a cambio euros de esa persona a una tasa de interés menor. Por tanto, recibes más interés del que pagas y así generas carry de divisas”, indicó.
Como se prevé que las tasas de interés sigan siendo superiores en EE.UU. durante al menos los próximos tres años, quienes cubran su riesgo de divisa al menos durante ese período se verán beneficiados por el carry.
“Este año la cobertura ha ayudado mucho en el rendimiento por la fortaleza del dólar, pero no es en eso en lo que quiero incidir más, porque sabemos que es algo que puede cambiar y no podemos prever dónde estará el dólar en los próximos años”, subrayó Chen. Lo que sí es seguro es que “cuando decides no asumir riesgos que no quieres, reduces la volatilidad entre un 1,5% y un 2% según el periodo de tiempo. Por otra parte, los rendimientos se deben tanto al rendimiento al contado como al carry, algo a tener en cuenta porque creemos que se mantendrá”.
El experto de DWS destacó asimismo que cuando se invierte en renta fija se hace con cobertura. El razonamiento es el mismo cuando lo haces en renta variable, añadió. “Primero, que el riesgo de divisas es muy alto, y segundo, que cuando tienes una cartera con bonos y acciones, a la cartera no le importa de dónde proceden los riesgos. Me resulta inconsistente que un inversor asuma riesgos en unos mercados y en otros no”.
Puede ver el webinar completo “Métodos para gestionar el riesgo de divisas en cartera” en este enlace. Contraseña: DWS_vis1129