Alrededor de un tercio de las empresas esperan cambiar radicalmente en los próximos dos años y esos cambios van desde su lugar de trabajo hasta lo que venden, ya que si quieren sobrevivir en un mundo que cada vez cambia más rápido tendrán que buscar nuevas oportunidades de crecimiento. Pero mientras que tecnologías como la robótica encabezan sus planes de gastos, las empresas ahora están priorizando la inversión en el bienestar y las habilidades futuras de sus empleados, según una nueva encuesta de HSBC.
El informe «Navigator: Made for the Future» muestra que el 34% de los responsables de la toma de decisiones piensan que su enfoque tecnológico cambiará «totalmente» en los próximos 24 meses, mientras que otro 45% espera un «ligero» cambio.
A medida que intentan centrarse más en el cliente y en aumentar su productividad, más de la mitad de las compañías (55%) planea invertir más en investigación y desarrollo. Sin embargo, casi el mismo número (52%) impulsará el gasto en formación profesional y el 43% mejorará el bienestar de los empleados, por delante de la logística (42%), las plantas o equipos (34%) y las inversiones en inmuebles (29%).
Noel Quinn, director general de HSBC Global Commercial Banking, explica que, «el entusiasmo por las tecnologías de rápida evolución, incluyendo la inteligencia artificial y la realidad virtual, se manifiesta claramente a medida que las empresas se preparan para satisfacer las necesidades de los clientes del mañana. Esta encuesta también muestra que el futuro no es una pesadilla distópica. Una empresa puede necesitar menos personas que hoy en día, pero necesitará que estas personas estén altamente capacitadas y comprometidas – para que puedan ser felices en sus trabajos – o llevarán sus habilidades a otro lugar. El bienestar y la sostenibilidad se están convirtiendo en criterios clave para el éxito empresarial».
Mediante las cualificaciones de los empleados y la adopción de tecnologías innovadoras, el objetivo final de las empresas es ser más eficientes, más centradas en el cliente y más ecológicas. Más de la mitad de las empresas encuestadas planean aumentar su inversión en la experiencia del cliente (52%) y el 45% aumentará el gasto para ser más sostenible desde el punto de vista medioambiental en los próximos dos años. Casi una cuarta parte (24%) quiere ser más ecológica para atraer y retener al personal talentoso y el 30% está sintiendo la presión de los clientes para mejorar en esta área.
Las empresas ya han adoptado una serie de nuevas tecnologías, entre las que se incluyen la inteligencia artificial (41%), el Internet de las cosas (40%), las prendas de vestir (37%) y el reconocimiento facial/de imágenes (38%). Los mayores beneficios de emplear estas cuatro tecnologías son las mejoras en la productividad, la experiencia del cliente y la calidad del producto o servicio.
Mientras que el 76% de las empresas piensa que las tecnologías harán que su personal sea más productivo y el 72% piensa que mejorarán su bienestar, el 59% también opina que necesitará menos trabajadores en el futuro. Tres de cada cinco (60%) tienen la intención de introducir o aumentar las prácticas de trabajo flexible para mejorar el bienestar y adaptarse a un reequilibrio entre la producción humana y la automatizada.