El sector asegurador destina 112 millones de euros al año a acciones de Responsabilidad Corporativa y de Sostenibilidad (RCS), según el Informe Estamos Seguros 2018 realizado por Unespa. Este informe destaca que el 85% de las entidades que lo conforman tenga en marcha una política activa en esta
materia. La mayor parte de la inversión destinada a responsabilidad corporativa va dirigida a acciones de mecenazgo cultural (26,4 millones), acción social (25,9 millones) y seguridad vial (12,3 millones). Otras partidas de relevancia son el patrocinio deportivo amateur (10 millones) y la investigación (9,6 millones).
La vocación de compromiso de las aseguradoras con la sociedad queda plasmada en el hecho de que, cada año, se impulsan 900 acciones de voluntariado. En estas actividades participan 13.284 personas, que dedican 432.279 horas de su tiempo. Teniendo en cuenta que un trabajador del sector asegurador trabaja 1.674 horas al año, esto implica que el voluntariado equivale a la jornada anual completa de 260 personas.
Un total de 388 organizaciones se han visto beneficiadas por las 326 acciones de mecenazgo promovidas desde el seguro. Entre tanto, 232 organizaciones ajenas al sector han recibido alguna donación. Asimismo, se han efectuado 175 acciones de patrocinio deportivo no profesional, 2.199 jornadas de prevención y concienciación, además de 277 actuaciones de educación financiera.
Las acciones que promueven las aseguradoras van dirigidas tanto a la sociedad en general como a las personas que forman parte de sus propias organizaciones. De puertas para adentro, las aseguradoras impulsan políticas de igualdad que fomentan la presencia de la mujer en la empresa aseguradora. En concreto, el 78% de las compañías cuenta con un plan de igualdad en la materia y el 94% dispone de alguna medida que favorece la conciliación de la vida personal y profesional. Las compañías también buscan la diversidad generacional en el seno de sus plantillas.
La discapacidad es otro ámbito donde el seguro ha movido ficha. Actualmente, 1.382 personas con discapacidad trabajan para el seguro. Ya sea como empleados directos (559), a través de proveedores (774) o gracias a donaciones y acciones de patrocinio específicas (49).
Otra magnitud que mide el estudio es la huella económica del sector asegurador. Esta se puede calcular desde dos puntos de vista. Por un lado, se puede tomar como referencia el valor de lo protegido por la industria. El Consorcio de Compensación de Seguros estima que los riesgos cubiertos por el sector asegurador equivalen a 14 veces el PIB español.
Entre todas las partidas, destacan los 10,3 billones de euros en riesgos personales y los 3,9 billones correspondientes al valor de las viviendas aseguradas. La otra forma de medir la huella económica del seguro es tomar como referencia el flujo de pagos realizados por las aseguradoras a terceros. Ya sean sus clientes, sus proveedores, sus empleados, accionistas, Hacienda, la Seguridad Social, los mediadores… Estos pagos rebasan los 61.500 millones de euros, según estimaciones de Estamos Seguros.