BBVA ha lanzado su negocio de banca abierta («open banking») como una plataforma tecnológica que permite a otras compañías acceder a los datos de los clientes del banco, previa autorización, para ofrecerles productos a su medida.
En una nota de prensa, la entidad explica que esta iniciativa, la primera que pone en marcha una gran entidad, se ha convertido en realidad tras un año de pruebas en el que sus clientes han podido comprobar la utilidad de este modelo de negocio.
Para ello, BBVA ha puesto en marcha ocho «APIs», que son interfaces de programación de aplicaciones abiertas, que permiten a empresas, «startups» y desarrolladores lanzar nuevos productos y servicios accediendo e integrando en sus aplicaciones los datos bancarios de los clientes, siempre con la autorización de éstos. Con estas APIs los usuarios podrán, entre otras cosas, gestionar sus pagos, verificar identidades, hacer notificaciones o analizar hábitos de consumo y comportamiento comercial.
El lanzamiento inicial está restringido a los clientes españoles de la entidad, pero el objetivo es extenderlo a EEUU antes de fin de año y ampliarlo para incluir a Turquía, México, Latinoamérica y otras áreas, explica la entidad.