Tom Nelson, portfolio manager de la estrategia de renta variable de Energía Global de Investec AM, ha estado de viaje en Omán, Dubái, Abu Dhabi y Arabia Saudita el pasado mes de marzo reuniéndose con quince compañías y visitando cuatro plantas de producción en la zona. Su objetivo principal era hacerse una buena idea sobre las reservas y la oferta de petróleo en la región dominante del mundo para esta materia prima, así como del ambiente político y social en estos países. Éstas son algunas de sus notas tras el viaje:
“Quiero enfocarme en Arabia Saudita, como principal productor de petróleo de la OPEP (9,5 millones de barriles/día), pero también como un país que atraviesa importantes cambios socio-económicos.
El Reino de Arabia Saudita es la vigésima economía mundial en términos de PIB, más grande que Sudáfrica o que Taiwán y de lejos, la mayor economía de la región MENA (excluyendo a Turquía). Tiene las reservas de petróleo probadas más grandes del planeta (260.000 millones de barriles), y se ha ganado por derecho propio la denominación del “banco central del petróleo” al ser el único país productor con un exceso significativo de capacidad productiva (más de un millón de barriles/día).
Saudi Aramco es, según mis cálculos, la empresa más rentable del planeta: produce 9,5 millones de barriles de crudo al día, que vende por 100 dólares y cuya extracción le cuesta entre 4 y 8 dólares. Esto se traduce en unos ingresos anuales de 350.000 millones de dólares con un margen superior al 90%. No sorprende que el SAMA (Saudi Arabian Monetary Authority) tenga activos netos de 550.000-600.000 millones de dólares, siendo el cuarto fondo soberano más grande del mundo. Estas cifras resultarán familiares a muchos lectores que asocian el reino saudí de forma inmediata con los petrodólares.
Puede resultar más sorprendente la realidad social y demográfica del país: 28 millones de personas viviendo en el decimotercer país más extenso del mundo. Un 51% de la población tiene menos de 25 años, con una tasa de paro del 30% en la franja de edad de 20 a 25 años. Las perspectivas más interesantes para Arabia Saudita no están en el legado que descansa bajo el desierto, sino en las implicaciones para la joven población que vive encima de él.
Los objetivos de empleo local se han acelerado significativamente después de la Primavera Árabe, no solo en Arabia Saudita, sino en toda la región. Ésta fue una de las principales conclusiones tras reunirnos con todas las principales petroleras occidentales que operan en la región. BP, Total, Occidental, Schlumberger y Halliburton comentaron que tenían elevados objetivos de contratación y formación de mano de obra local. Schlumberger aseguraba que en Arabia Saudita pronto el 60% de los trabajadores serán locales y si se produjera una revuelta en el reino que provocara un éxodo masivo de expatriados, la compañía seguiría funcionando sin problemas. De la misma forma, Occidental Petroleum en Omán es ahora el tercer empleador del país, con un 82% de sus empleados de nacionalidad omaní.
Rápidamente, fui ganando en optimismo respecto al futuro de esta joven sociedad, primordialmente urbana, a medida que iba comprendiendo los programas sociales en curso. El ingente programa de educación gratuita, así como la sanidad universal y el aumento del gasto en infraestructuras deberían favorecer una diversificación creciente de la economía respecto al petróleo (que todavía representa un 80% de los ingresos del presupuesto estatal y un 90% de las exportaciones) hacia negocios como la banca, la construcción y el sector químico.
Naturalmente, existen todavía numerosos retos: la productividad laboral es muy baja, estimada según la Organización Árabe del Trabajo en un 17% de la de un trabajador del sector industrial en EE.UU. Las mujeres acaban de ganar el derecho al voto -en 2011- y solo representan un 15% de la fuerza laboral del país. Además, y a pesar del esfuerzo en mejorar las carreteras, la seguridad vial es mínima. En términos de muertes en carretera por cada 100.000 habitantes, Arabia es el país más peligroso del mundo para conducir».
¿Quiere saber más sobre Arabia Saudita? Puede leer el informe completo de Investec AM en este link.