Según ha señalado Óscar Arce, director de economía y estadística del Banco de España, en las jornadas sobre previsión social organizadas por EY y Mapfre, el principal problema del sistema de pensiones público es la presión que ejerce la demografía, un factor “estructural, permanente y de difícil solución”. Datos como que en 2050 habrá un jubilado por menos de cada dos personas en edad de trabajar, es decir, la proporción entre personas mayores de 65 y personas en edad de trabajar llegará al 50%-70%, cuando actualmente es del 30%, son los que, para Arce, hacen saltar las alarmas.
Asimismo, ha señalado como principales culpables del deterioro del saldo de la Seguridad Social el aumento significativo del gasto en pensiones contributivas, reflejo de las mayores tasas de dependencia y pensiones medias. A estos factores además hay que sumarles otros como la precariedad laboral, los salarios bajos o las carreras más inestables que contribuyen a desequilibrar el sistema.
En este sentido, Óscar Arce considera que los retos del envejecimiento se deben adoptar desde una perspectiva amplia. “Esta estrategia debe incluir el diseño de un plan fiscal a largo plazo, avanzar en las reformas estructurales que permitan mejorar el empleo y aumentar la participación laboral, la productividad y la capacidad de crecimiento de la economía y diseñar políticas de inmigración flexibles y acordes con las necesidades del mercado laboral”, ha señalado.
Para el director de economía del Banco de España, el principal objetivo de todas las reformas debe ser asegurar la sostenibilidad financiera y social del sistema. “Por un lado, es fundamental la inclusión de mecanismos automáticos que garanticen la viabilidad financiera del sistema. Al mismo tiempo que evaluar la posibilidad de ampliar el abanico de opciones para mejorar la capacidad financiera de los jubilados”, explica. Respecto a la contributividad, Arce considera que debe salir reforzada mediante un sistema más previsible y transparente, para que los ciudadanos puedan tomar decisiones de ahorro con la cautela y la información necesaria.
¿Qué soluciones proponen los expertos?
Una de las soluciones que ofrece el experto para rebajar la presión demográfica y financiera es crear medidas que motiven a los trabajadores a permanecer más tiempo en el mercado laboral. Según ha explicado Arce, “un trabajador que abandone el mercado laboral a los 65 años después de haber cotizado durante 39, percibe un rendimiento cercano al 3%, a partir de ahí se estanca, lo que desincentiva la decisión de mantenerse activo”. Sin embargo, ha admitido que, aunque es necesario implantar reformas laborales, no serán suficientes.
Por el lado del ahorro, Carlos Esquivias, gerente de la Comisión de Vida y Pensiones de Unespa, ha señalado que siete de cada 10 familias cuyos miembros tienen más de 65 años solo cuentan con la pensión pública como fuente de ingresos en su jubilación. Ante esta situación, los expertos consideran que es fundamental diversificar las fuentes de ingresos de las familias españolas. Para Esquivias, el sistema público debe verse reforzado por más pilares, como el empresarial y el ahorro individual. Entre las posibles soluciones, ha aconsejado incrementar la transparencia del sistema, imitar el modelo de “Automatic Enrolment” de Gran Bretaña o reforzar los incentivos de ahorro.
Por su parte, Ángel Martínez-Aldama, presidente de Inverco, ha advertido que tanto el sector público como el privado deben accionar las palancas necesarias para reforzar el sistema de pensiones público. “Desde el sector público se debe diseñar un plan de estrategia sobre el sistema de pensiones y decidir qué modelo queremos tener en el 2030-2040, establecer un comité de expertos internacional, implantar medidas de tipo financiero y fiscal y dar más información y educación sobre el ahorro y la pensión”. Desde el sector privado, Martínez-Aldama considera que las empresas deberían fomentar el ahorro incentivando las aportaciones periódicas o la reinversión del ahorro fiscal.
Olimpia del Águila, responsable de Seguridad Social del departamento de Empleo, Diversidad y Protección Social de la CEOE, ha optado por mirar hacia Europa y resumir los puntos comunes de las reformas que han llevado a cabo nuestros vecinos. “Tienen que pasar por un consenso sobre la situación, se deben aislar las pensiones del debate partidista, asumir la tasa de reposición que se podía dar en este escenario demográfico, prever qué tasa se podrá ofrecer e incorporar sistemas de pilares múltiples obligatorios o complementarios”, ha concluido.